Habían transcurrido dos semanas, días en los que intente retomar mi vida. Mejore bastante, a tal grado de poder regresar al trabajo y aunque Tracy no estaba del todo de acuerdo, yo lo necesitaba. Esas dos semanas en casa habían sido difícil para mí porque había sido tiempo en el que únicamente había estado pensando en Benedict y eso me frustraba bastante, pensar que había decidido dejar su empleo y mudarse al otro lado del mundo, quizás con la esperanza de que Olivia no contara con el privilegio de seguirle sus pasos a donde sea que fuese. No dejaba de pensar en ello. Olivia ya nos había demostrado que su determinación no tenía límites, así que en vez de descansar y disfrutar de ese tiempo libre, me la pase preocupada e inquieta, así que tome la iniciativa de contarle a mi jefe mis dese