Intente tragar saliva en vano, de alguna forma, verlo ahí, justo en ese lugar, justo el día en que trataba de retomar mi vida me dejo sin palabras y con muchas preguntas. ¿Qué estaba haciendo ahí? ¿No se suponía que ya debia estar en New York? Me quedé sobre mi sitio cuando él comenzó a avanzar en nuestra dirección, mantenía la vista inclinada, parecía estar pensativo, pero entonces al estar a tan solo un metro de mí, alzo la vista y se detuvo. Me miro comenzando por mis piernas y siguiendo mi altura hasta llegar a mi rostro, entonces alzo ambas cejas, quizás sorprendido o impactado de verme ahí. Estaba segura de que de haberlo planeado nunca nos habríamos encontrado, pero el destino nos había vuelto a reunir, aunque extrañamente mi corazón se sentía acongojado en vez de estar feliz de v