CAPÍTULO ONCE Aunque lo intentó mucho, Chloe no pudo sacarse la imagen de la sonrisa siniestra de Danielle de su mente. Algo sobre ella la incomodaba demasiado. Pasó todo el domingo pensando en eso mientras ella y Steven vagaban por la casa, ignorándose. Sabía que Steven estaba empezando a sentirse avergonzado por lo que había hecho en la fiesta de la cuadra, pero que no estaba preparado para aceptarlo. Todavía perpleja por la razón por la que la sonrisa casi pasiva de Danielle seguía molestándola, Chloe entendió al final que esa sonrisa parecía estar sacando a relucir algo del pasado. Es por eso que Chloe no perdió tiempo el lunes por la mañana y llamó al consultorio del doctor Skinner a primera hora. Afortunadamente, pudo programar una cita para la una de la tarde. Mientras se acercab