CAPÍTULO DIEZ Danielle estaba mirando por la ventana del auto de Martin, odiando el hecho de que se sentía como una niña enojada castigando a sus padres con silencio. Quería preguntarle a Martin qué lo había llevado a ser tan desagradable en la casa de Chloe y durante la fiesta de la cuadra. Siempre había sido un poco irritante, pero nunca a ese nivel. Sin embargo, no lo hacía porque estaba bastante segura de que sabía la respuesta. Había actuado de esa forma por la misma razón que a Danielle le había costado tanto mirar a Chloe a los ojos, por la misma razón que siempre se encogía cuando estaba cerca de Steven. Era porque habían entrado en otro mundo hoy. Era un mundo que supuestamente odiaban, un mundo que no necesitaban ni les importaba. Pero, a decir verdad, era un mundo que Danielle