Un millon de razones para dejarte

Apuesta

Me levantaba la mañana siguiente en mi cama sintiendo mi boca totalmente seca. Cuando miro alrededor de mi habitación notaba un vaso de agua con un plato encima. Tomaba el agua sintiéndome un poco mejor levantándome con una resaca horrible. Usualmente no tomaba para nada pues siempre estaba sola y me quería proteger. Mis padres murieron en un accidente de auto el cual fue provocado por una persona ebria, por eso lo detestaba. Había pensado en tomar solo un vaso, pero no recordé cuantos vasos tomé gracias a Mary. Me levanto con dificultad teniendo el mismo vestido de la noche anterior mirando mi teléfono dándome cuenta del mensaje que le envíe al señor Jackson.

-Pero que mierda hice anoche.

Marque enseguida a Mary la cual me respondió con un leve gruñido.

-Nena porque llamas tan temprano.

-Son las doce del día…pero he estado viendo y le envíe un mensaje horrible al señor Jackson.

-¿Entonces no recuerdas que el nos trajo a casa? Mis padres me hablaron horrible, dijeron que estaba muy ebria.

-Bromeas…. ¿cierto?…yo no recuerdo nada de eso.

-¿Que es lo ultimo que recuerdas?

-Creo que fue cuando le dije lindo al barman.

-Whao nena, te perdiste de mucho.

-Por favor no me digas eso…..tal vez hice algo horrible.

- ¿Porque lo dices?

-El señor Jackson me hubiera estado enviando miles de mensaje a estas horas, pero él no me ha enviado nada. Tal ves me va a despedir.

-Eso es bueno, pensabas renunciar ¿no? Además, eso te ayudara a pedir indemnización por despido injustificado.

-Pero le hice algo no es motivo de despido con justificación.

-Estábamos fuera de horario laborar, pelearemos por eso si el intenta ponerse de payaso.

-Bueno tienes razón, mejor para mí.

Tras todo lo que paso pase el fin de semana terminado el trabajo que me había encargado el viernes y enviándolo para el domingo en la tarde. No tuve respuesta lo cual me puso aún más nerviosa. Durante ese fin de semana recordaba pocas cosas entre ellas que le había vomitado, quería que me tragara la tierra y me escupiera en chica. Los nervios se apoderaban de mí y solo quería sentir que lo merecía. El lunes aquel hombre no me llamo, pero termine llegando antes de las ocho a mi puesto de trabajo. Ojeaba hacia la oficina de este notando que el no estaba en su oficina lo cual era totalmente extraño. A las ocho Mary llegaba a mi escritorio sentándose en mi escritorio.

-Como esta la chica más rica del mundo.

Al decir esto la rubia de ojos grises me sonrió.

-Nerviosa, Jackson no me ha llamado para nada, ni me llamo de cuatro o cinco de la mañana para trabajar.

-Eso es bueno, así no podrás enojarte para cuando renuncies.

-Tienes razón…..voy a renunciar….solo debo entregar mi carta de renuncia.

-Porque darás tu carta de renuncia si el te hizo sentir mal.

-Mmm tienes razón, el siempre me trato mal.

-Por cierto, recuerdo que lo que escribiste anoche fue por una apuesta, así que ten tu ganancia.

Mary sacaba de su bolsillo cinco dólares y me lo entregaba.

-No se si sentirme bien o mal por este dinero.

-Tu relájate….sabes ya que no necesitaras este trabajo no te quieres divertir antes de irte por ultima ves…. ¿quieres hacer otra apuesta?

-¿Cuál?

-Veamos….apuesto cien dólares a que renuncias al mes.

-¡Claro que no! Sabes que, hare que me despida.

- Hui eso si estará divertido, eso quiero verlo.

Esta riendo me guiñaba el ojo mientras escribía un texto. Recibia un texto en el grupo de w******p de nuestro trabajo donde Mary hablaba sobre una apuesta donde ella comentaba quien apostaría si renunciaría o seria despedida al mes.

-¡Mary estas loca!

-Sera mas divertido si tenemos a todos los empleados mirándote.

-Pero si se entera el señor Jackson.

-Como lo hará tontita, este grupo es solo para empleados, estamos todos los empleados y creo que Steven en este grupo.

-Pero si se entera…

-¿Asustada? Si es así renuncia.

-¡Claro que no! No voy a perder la apuesta.

Tras hablar un rato Mary se iba hacia su área mientras llegaba aquel hombre. Este comenzó a caminar hacia su oficina mirándome.

-Señorita levántese necesito que me traiga los informes y mis citas para hoy en día.

Este pasaba por mi lado mientras yo me levantaba caminando a pasos lentos detrás de el. Usualmente corría a su paso, pero ese día preferí caminar de manera lenta notando como este lanzaba su saco a un lado el cual solo le paso por un lado yendo hacia la oficina de este notando como este se sentaba en su ordenador como siempre. Sus dedos rápidos tecleaban mientras apuntaba hacia la máquina de café.

-Necesito que mueva dos de mis citas. Las de las once muévela para las tres y la de las tres necesito que la pongas para mañana. Ya hablé con Harrison y le gusto el plan que le enviaste, pero pidió que cambiáramos cosas así que rescribe el contrato con las informaciones que te envíe.

Algo enojada notaba como este me insistía en traerle su taza de café la cual hice dos tazas. Le entregue su taza de café tomando la mía dando un suave sorbo al mío. Adoraba mi café con miel, y leche así que pensaba disfrutarlo para no tener que ponerle mas shot de expreso a mi café. Noto como esta toma un sorbo de su café lanzando un chillido de asco.

-¿Que diablos es esto?

-Es su café.

Comentaba tomando otro sorbo al mío.

-Porque sabe así.

-Le heche azúcar…..así tal vez se le endulza un poco la vida.

Este alzaba una ceja al escuchar mi respuesta.

-Me imagine que iba a mover las reuniones así que lo hice esta mañana antes de que llegara pues sus reuniones tomarían mucho tiempo, rescribiré el contrato y se lo enviare.

Comentaba mientras salía de su oficina ignorando a aquel loco por el trabajo que me llamaba para empezar a trabajar respirando hondo mientras me sentaba en mi asiento.

-¡Oh dios que bien se sintió! Ahora debo planear cosas que se que molestaran a ese loco por el trabajo y decidan despedirme.

Susurraba sonriendo mientras buscaba la información que me había enviado el señor Jackson.

-Uhi eso significa que ganare la apuesta.

Una voz cantarina invadía mi espacio de trabajo. Steven aquella ves me trajo unas donas las cual agradecí dandole un mordisco, Steven se habia vuelto un amigo mio tan cercacno pues el siempre me llevaba algo cuando iba a visitar a su amigo. El visitaba de ves en cuando a el Jackson pero en los ultimos dos meses serian mas recurrente por sus ultimos dos contratos juntos

-Steven, no pensé que vendrías hoy.

-Yo tampoco, pero el loco de tu jefe me pidió que le trajera unos documentos de los ultimo siete años los cuales me tomaran un rato traer, no se para qué los quiere pues no eran tan importante en mi opinión.

-Eso es extraño, usualmente me pedía eso a mi.

-Ni que lo digas, a mi también me pareció extraño, bueno te dejo vere como esta el loco de mi amigo.

Comento aquel rubio coqueto desapareciendo tras las puertas de aquella oficina.