35 No estoy preparada.
1033 Words
Noemí.
Quiero dar un paso por vez y hacer esto de la manera correcta. No sé si en verdad estoy preparada para una relación. El miedo a que mi salud decaiga de un momento a otro es grande. No quiero condenar a alguien a que pase por lo mismo que pasó mi familia. Nunca me lo perdonaría.
-Primero vamos a solucionar esto. Luego veremos como avanza la relacion- les digo directamente.
-Yo no tengo problema en avanzar, cariño. Ya lo sabes- Matías busca mis ojos mientras lo dice.
-Creo que Matías tiene razón. Nada les impide hacer las cosas al tiempo, sobrina.
-Tu me debes confidencialidad porque eres nuestro abogado. Se que como tío quieres lo mejor para mí, pero es nuestra decisión, tío.
-Lo que decidan entonces.- contesta poco convencido con su mirada viajando entre Matías y yo.
-Luego lo hablaremos bien. ¿Estas de acuerdo en luchar por esto ahora y luego podemos ver que pasa con nosotros?- Le pregunto directamente tocando su brazo.
Sus profundos ojos celestes me esquivan, pero termina asintiendo.
Con un suspiró frustrado, mi tío se pone en marcha con la siguiente fase del plan.
Luego de ir y venir en dos ocasiones, nos hace partícipes activos de la demanda y tenemos que viajar.
-La demanda por intento de abuso ha sido presentada. Continuamos con la solicitud de anulación de matrimonio. Abogado, presentela. - pide el juez.
-Si su señoría. - Le entrega el documento que ambos tuvimos que presentar.
-Mi cliente alega que no hay motivos para una anulación. - habla el abogado de Dublin.
-Por supuesto que la hay. No es un matrimonio real- Mauricio se pone firme.
-En realidad presentamos la evidencia de que se consumó el matrimonio y ambos se han encontrado en forma privada en Mexico- se acerca la otra parte para mostrar la evidencia.
-Mis clientes fueron drogados por el suyo y eso ya quedó demostrado. Por eso se "consumó" el matrimonio- hace énfasis con sus dedos en consumar- Luego se han encontrado para tratar de solucionar un tema del que ambas partes quieren salir. He aquí la solicitud de anular esto. - acota mi tío cada vez más furioso.
-Pido a las partes que se acerquen a declarar- exige el abogado ese.
-Adelante- dice el juez.
-Pase el señor Rivero, por favor. - la sonrisa en su rostro no me gusta. - Sabe que está bajo juramento.
-Si. claro. - Matías está firme.
-Quiero que me cuente como es que llegaron a la conclusión de que están casados.
El abogado de Dublin va por todo.
-Cuando nos despertamos al otro día, los dos nos sorprendimos. Ella es hija de mi socio y nunca me habría propasado con ella en mis cinco sentidos.
-¿Ella opina lo mismo, señor?- le pregunta sarcasticamente.
-¿Usted piensa que ella hubiera elegido estar con un viejo y pobre teniendo tanta gente de su edad a los alrededores? Pues no.
Por lo visto habernos preparado para esto, esta dando sus frutos. Matías parece totalmente convencido de lo que dice y por un lado me alivia al ver al abogado dudar. Por el otro despierta el miedo de que en verdad se lo crea.
-Es todo. Pido que suba la señora- cruza sus brazos mientras cambiamos de lugar- Dígame señora. ¿No fue consensuado nada de lo que pasó?
El quiere acusar a Matías de violacion. Son realmente increíbles.
-No estaba en mis cinco sentidos y no recuerdo nada. Por lo tanto no estoy en capacidad de afirmar su pregunta- lo miro a los ojos fingiendo no tener miedo.
-Y dice que las reuniones por hora eran para salir del embrollo- ya me provocó demasiado.
-Y para buscar a alguien capaz de ir en contra de su cliente, ya que se encargó de amenazar a medio continente si nos ayudaban a presentar la denuncia- remató firme.
El abogado se acerca al miserable. Por su rostro no conoce esta información y estoy segura que no lo esperaba. Ambos hablan en voz baja durante unos minutos hasta que el juez los interrumpe.
-Por lo que puedo escuchar, ninguno era consciente, por lo tanto esta permitida la anulación. - decreta y mi alma vuelve a mi.
-Un momento señor juez- interrumpe el mal nacido- Para nuestro estado, el matrimonio es algo sagrado. Considerando los hechos que conocemos y los que aún no, solicitamos que el proceso sea evaluado durante seis meses para demostrar de qué no es real y que en verdad merecen una anulación y no una solicitud de divorcio.
El juez parece pensar en su argumento y pienso que no va a aceptar. Ruego porque no acepte. Hasta que me hunde.
-Estoy de acuerdo. Se dispone el tiempo de seis meses para que ambos puedan demostrar de qué la consumación no se volvió ni se volverá a repetir. En caso contrario, debe solicitar un divorcio. -golpea su martillo y me siento más pequeña en mi lugar. - Se termina la sesión. Pueden irse.
Todos nos ponemos de pie. Mis ojos viajan al desgraciado. Sus labios se mueven en una frase que me congela 'Te tengo, pequeña'
Camino al avión nadie dice nada. El camino a casa es igual, tanto en el avión como en el auto desde el aeropuerto.
Llegamos a las 8 de la noche y mi amiga no está en casa.
-Una de dos- mi tío pasa las manos por su pelo- o acaban con esto ahora o se atienen a lo que pueda descubrirse en la audiencia de dentro de seis meses. Los dejo para que lo hablen.
Se da media vuelta y se marcha a su dormitorio.
Un sentimiento angustiante se instala en mi.
-Podemos hacerlo real, cariño. No tengas miedo. Estamos juntos. - Matías toma mi mano mientras habla.
-Nada vamos a hacer real Matías. Tenemos que terminarlo- sentenció.
-¿Puedes explicarme porque? ¿Tan poca cosa soy, Noemí?
Sus ojos están cristalizados. No quiero herirlo.
-No estoy preparada para decirle a mis padres que me casé borracha. Necesitamos hacer esto bien.
-¿Y que es lo que sugieres? ¿Qué renuncie a ti? Porque soy capaz de enfrentarme al que sea. Tu padre no va a matarme.
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