21. Mequetrefe.

1035 Words
Noemí. Llegamos del aeropuerto y estoy muerta de cansada. Hoy ha sido un día eterno. Son como la una de la madrugada y mañana llegan mis padres temprano, asique decido ir a descansar. El mensaje que me envía Matías me deja pensando, pero nada puede ser tan grave como para no esperar al lunes. Su actitud cambió mucho desde el café. Quedó perdido en sus cosas, pero con Alfon estábamos demasiado impresionadas con la ciudad y con él trato que hicimos con Matías. Tuve que hacerle toda la explicación del acosador para que dejara de darle vueltas al asunto, hasta que al fin lo dejó ahí. No tardo nada en dormirme, ni estoy tanto tiempo en ello, hasta que mi alarma suena y me dice que son las 7 y 50. No camino. ¡Corro! Al baño para higienizarme y hacer lo propio, a la cocina a hacerme un café en mi vaso de llevar y me meto al auto. Mis padres deben de estar bajando del avión, sino ya esperándome. La alarma la puse para salir de casa, no para levantarme. La autopista la hago al límite de la velocidad permitida, hasta que entro al estacionamiento del aeropuerto y los veo parados en la cebra de entrada. Tengo que tratar de calmarme porque papi va a saber que conduje demasiado rápido y me va a dar su sermón. -Hola papi, mami. - me bajo para abrazarlos -Hola princesa ¿quieres que conduzca a casa?- habla mi papi tan lindo. -Bueno papi. - accedo aún medio adormilada. Mama sube de copiloto y yo saco mi vaso de su lugar. -Me parece que alguien se olvidó de nosotros, Less- molesta papá. -Ni que lo digas- contesta mami como si yo no estuviese aqui- Hasta la almohada pegada se trae. -Estoy aquí, eh. - contesto haciéndome la ofendida. -Princesa, estaba pensando- papi y sus pensamientos- ¿Porque no invitamos a Matías a almorzar y que traiga los papeles? Por un momento me pierdo. -¿Qué papeles papi? -Los que tienes que firmar para que mis acciones sean tuyas- mi mami me aclara como a una tonta. -Me da igual. Mientras pueda agrandar la cuenta, es igual si están a mi nombre o a los tuyos, ma. Es una realidad. Eso es lo de menos para mi. Yo solo quiero generar más y más. -Bien, amores. Envíale el mensaje por fa. - papi se dirige a mamá. -Que los lleva si- le avisa mamá a papi luego de unos minutos. Al rato ya estamos en casa de nuevo. Últimamente es menos el tiempo que pasó aquí de lo que debería, pero bueno. Ojos que no ven, corazón que no siente. Vamos llegando a casa y veo a Matías apoyado en su auto como la vez que llegamos y el calor se me sube. -Buenas, señor Ferreira- le dice cuando papá llega a el. -Buenas, Matías. ¿Cómo estás?- mi papa toma su mano y mi madre lo saluda de igual modo. -Buenos dias- es lo único que puedo decir. -Buenos días, señorita. Pasamos y como siempre mi padre se enrosca en charlas de negocios. Yo me hago la tonta y voy con mamá a la cocina. -Hija, te extrañé muchisimo ¿como te ha ido estos días? -Bien, ma. Ayer fuimos a buscar los papeles a Las Vegas y la U bien, también. -Que bueno mi amor. Vamos a cocinar con mamá, ¿si? -Obvio. - afirmo sonriente porque extrañé esto. Seguimos hablando de todo un poco hasta que papá y Matías se acercan a poner la mesa y sigen con los negocios. Nosotras terminamos y pasamos la bandeja con los canelones para el otro lado de la mesa. -Hija- papi saca tema. -Dime papi. -Me contó Matías de tu estrategia con el señor Holt. -comenta todo orgulloso. -Si. Pensé sobre la marcha en pedirle el 10 por ciento mas- y le guiño mi ojo -Muy bien, princesa. Siempre velando por la familia. Dime ¿has salido a recorrer o algo? -No papi. Alfon esta en 2 turnos la mayor parte de la semana. Anoche se acostó tardísimo haciendo trabajos y poniéndose al día. No me apetece salir sola. -Tal vez Matías la pueda acompañar- menciona mami y yo me ahogo con la comida. -¿Estas bien princesa?- papi me habla mientras mamá golpea mi espalda. -Si. Solo se fue por el lado equivocado. No te preocupes. - hablo como puedo. -Si la llevas de paseo, tienes que asegurarse que no se le acerque ningún mequetrefe- le habla mi padre, solo para Matías. -¿Disculpe?- Matías quedó rojo de un momento a otro y la señora Ferreira me mira con sospecha. -Que si la llevas a pasear te tienes que asegurar que ningún mequetrefe se acerque a mi princesa- le repite como si fuera tonto. -No se que es eso No debiste preguntar, Matías. -¿Cómo te explico?- papi piensa sus palabras. - Ningún tipo que se quiera pasar con mi nena, ningún muerto de hambre que quiera acercarse por interés- enumera con sus dedos. -Ahora si. No entendía la expresión de la palabra. -Igual no voy a salir a hacer nada- hablo para mi papá primero- , no me tiene que cuidar de nadie - luego a Matías. -Mejor así, así estas en lo tuyo y no te distraes con mequetrefes por ahí. -¡Papa! -¡Amor! Las dos le llamamos la atención y el hombre como si nada. Trato de evitar mirar a Matías y justo aparece Alfon. -No te preocupes tío, para los socios ya tiene pareja. - dice como si fuera cualquier cosa, a la vez que lo saluda- ¿Cómo estás? Tía hermosa. -Hola mi vida. ¿Cómo te ha ido?- le pregunta mamá. No quiero mirar a mi padre porque se que sus ojos están en mi. Siento su mirada quemando mi rostro, como si fueran rayos x. -¿Puedes contextualizar?- cruza sus brazos y se echa hacia atrás en la silla. -Es culpa mia- Matías trata de aclarar y la cabeza de mi padre se asemeja al exorsista- Un tipo le coqueteo y yo dije que era mi pareja. Y se descontrola la cosa.
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