XV

2356 Words
Una sonrisa tensa se formo en sus labios, claro, Reborn le dijo sobre esto. Si, se lo dijo. Y recuerda con claridad cuando y como se lo dijo. Paso nuevamente sus ojos con los demás, parando en Reborn.   Quien -Como todos.- esperaba una respuesta de su parte. Sus ojos pararon esta vez en las otras personas sentadas en el sillón grande, una chica, dos jóvenes y un niño.   Los hermanos mayores también están presentes, a ellos les parece graciosa la escena. Desde que arreglaron las cosas con sus hermanos menores, están visitando el departamento básicamente todos los días.   -¿No eran dos? -Pregunto el castaño mirando al cazador de talentos.   -Ya vez que no. -Respondió este bajando su sombrero.   -¡Reborn! -Se quejo Tsuna, hasta que capto los temblores en algunos de los nuevos.   ¿Por qué dios? ¿Por qué todas las personas tiene que ser abusadas de algún tipo? La niña con pelo corto color n***o verdoso, esta temblando mientras que el albino le abraza. El niño abrazaba fuertemente al pelirrojo, el cual trataba de no mirar a los ojos a nadie. Hay demasiadas personas en la sala para el gusto de ellos cuatro.   Tsuna entre cerro sus ojos triste, conoce esas reacciones. Los demás miraron a Tsuna, reconociendo su mirada, no pudieron evitar sonreír con tristeza, el castaño tiene un corazón muy grande. Tanto así les que llevo a pensar si Tsuna algún día podrá librarse de su pasado, aunque saben que no podrá hacerlo mientras que Nana siga libre y dando a luz otros niños. Los cuatro niños se tensaron viendo como el castaño se levantaba, no se dirigió hacia ellos, sino a las otras personas. Estos confundidos miraron a Tsuna, este los saco de la sala.   -¿Oka-san? -pregunto Hayato mirándolo, fue el último en salir.   -Los están poniendo nerviosos, son demasiados para estar acá. -Respondió regalándoles una sonrisa antes de irse, cerrando la puerta.   El único que no se fue es Reborn, las cuatro personas en el sillón solo se siente cómodos cuando están solo en presencia del cazador. Tsuna les regalo una sonrisa suave, haciendo que ellos se relajen.   -Siento lo de hace un momento. -Se disculpo agarrando la tasa de Te en el mesa ratona del comedor. - No quería asustarlos así.   Para la sorpresa del castaño, el niño que abraza al pelirrojo le miro y trago, preparándose para hablar.   -¿Quién eres? -Pregunto, aun si tuvo la valentía necesaria para hablar no está dejando de temblar.   Tsuna sonrió, arrodillándose frente al niño. Este trato de ocultarse, los otros le miraron de forma cautelosa. Le hace recordar a la primera vez que conoció a Hayato y los demás. Toco con delicadeza la mano del niño, sonriéndole en el proceso.   -Soy Tsuna, Tsunayoshi di Arcobaleno. - Acaricio la mano del chico, sintiendo como este lo mira más atentamente, sin dejar de agarrar la ropa del pelirrojo. - ¿Cómo te llamas?   -F-Fuuta. -Contesto, se veía como si esperara un golpe, causando que el castaño sonriera de forma triste. El niño se sorprendió al sentir una caricia en su cabeza y no un golpe en la cara por atreverse a hablar.   Reborn mira todos apoyado en la pared, brazos cruzados y su sombrero tapando su cara. No le sorprende el hecho de que Tsuna pudiera interactuar con ellos cuatro. No es al único que le recuerda cuando le trajo a los demás, una sonrisa suave se formo en sus labios, siendo tapada por la sombra de su sombrero.   -¿Y ustedes? -Pregunto el castaño, sin dejar la sonrisa suave, acariciando la cabeza de Fuuta, quien está por dormirse por las caricias.   -Byakuran. -Dijo el albino, animando silenciosamente a los otros dos a hablar. No siento hostilidad por parte de ese chico castaño, siente esa seguridad, esa seguridad que sintieron al lado de Reborn. La persona que les trajo acá.   -E-Encantada, soy Yuni. -Se presento la niña inclinándose ligeramente.   -E-Enma. -Respondió el pelirrojo, todavía esquivando la mirada de cualquiera.   Tsuna ensancho su sonrisa y con cuidado levanto en brazos a Fuuta. Este sorprendido y asustado trato de separarse, causando que Byakuran, Enma y Yuni casi se levantaran. El castaño acaricio la espalda de Fuuta en círculos, el niño se relajo en sus brazos. Sin sentir miedo.   Reborn camino hasta quedar detrás de Tsuna, este le miro de reojo pero no hizo nada. - Se quedaran.   -Ya me lo dijiste. -Hablo el actor. - Pero tu te encargas de buscar una casa nueva.   -¿Casa nueva? -Pregunto cruzándose en brazos.   -Reborn ¿Sabes cuantas personas somos? Giotto y los chicos hay veces que se quedan a dormir, no alcanzan los cuartos para todos. - Dijo mirándolo sin dejar de sonreír. - Tenemos dos chicas en este departamento, necesitan tener un cuarto cómodo y no sentirse presionadas.   -Mnm. - Murmuro este asintiendo, miro a los otros tres en el sillón. Estos están escuchando atentamente la conversación. Tsuna les miro también, tomo suavemente la mano de Enma, causando que este salte sorprendido.   -¿Qué tal si comemos algo? Ya es medio día. - Pregunto acomodando a Fuuta en sus brazos, el niño ya se quedo dormido. Tsuna esta preocupado por las clases, los chicos tienen que practicar para el festival que se celebra en dos días.   -¿Comida? -Pregunto Yuni, mirándolo como si tuviera dos cabezas. El castaño se trago las ganas de llorar al escuchar esa pregunta, como si ninguno creyese que pueden comer sin castigo o algo a cambio.   -Si, Chrome seguramente debe estar cocinando en este momento. -Respondió, los demás pudieron ver el brillo en los ojos del castaño gracias los rayos de sol.   Lentamente Yuni se puso en pie, mirando de reojo a Byakuran, quien recibió el mensaje silencioso. Se levanto tomando la mano de la de ojos azules. Enma se levanto en el momento que Tsuna le tomo suavemente la mano, Fuuta siguió durmiendo en los brazos del castaño.   Tsuna se paró a mitad de camino, confundiendo a todos. Se dio media vuelta con una sonrisa, notaron que esta es distinta, más cariñosa y llena de amabilidad. Una sonrisa verdadera, sonrisa que Enma, Yuni y Byakuran nunca fueron capaz de ver de nadie, siempre miradas de desprecio, asco y odio. En cambio, esta sonrisa, hizo que un remolino se les formara en el estomago. Reborn sin dejar de sonreír bajo nuevamente su sombrero.   -Bienvenidos a casa. - Dijo Tsuna, un nudo se formo en la garganta de los chicos. Las lágrimas se formaron en los ojos de Yuni.   Enma y Byakuran se negaron a llorar, llorar es una debilidad. Cosa que no tienen que mostrar ante nadie, no pueden mostrar debilidad, tienen que proteger a Fuuta y Yuni de los demás. Sintieron una mano en sus cabezas, giraron un poco. Viendo a Reborn acariciando su cabello. Cierto, el caza talentos puede leerlos fácilmente.   Todavía con el nudo, abrieron la boca para responder.- E-Estamos de vuelta.   Tsuna suavizo su sonrisa, antes de volver a caminar, acomodando a Fuuta en sus brazos. El niño paso sus brazos por el cuello del castaño, abrazándolo.   A medida que llegaron a la cocina, gritos y fuertes ruidos se escucharon.   Tanto Reborn como Tsuna suspiraron ¿Que abran hecho los chicos ahora? Abriendo la puerta, tuvieron que esquivar rápidamente una sartén, una cuchara y varios platos, no solo eso, sino que las cosas que tiraron tenían comida.   Reborn chasqueo la lengua, estos niños. Son incontrolables, sin el o Tsuna alrededor siempre terminan peleando. No le sorprende que la Primera generación terminara involucrada, ya que son hermanos de los primeros. Byakuran, Yuni y Enma miraban todo, no sienten miedo. Tienen a Tsuna y Reborn a sus lados, eso les tranquiliza mucho.   -¿Que está pasando acá? -Pregunto el pelinegro, cruzándose en brazos y mirando a todos. Ellos se pararon en sus lugares en el momento que escucharon la voz de Reborn.   Hayato y G estaban por tirar fideos con sus manos a Takeshi y Asari, estos dos estaba por tirar agua. Alaude y Kyoya tiene tenedores en las manos tratado de atacar a Deamon y Mukuro. Chrome, Lambo y Lampo están en un esquina con sus platos de comida, esperando que la lucha termine. Tanto Ryohei y Knuckle gritan a todo volumen, llenos de comida.   El caza talentos siguió mirándolos a todos, enojado y esperando la respuesta. Tsuna sonrió suavemente, la manera en cómo se está comportando el de patilla risadas le saca una sonrisa. El pelinegro se burla de que Tsuna se comporta como una mama ¿Y él? Tiene unas ganas de reír.   -Pareces un padre regañando a sus hijos. -Pensó para sí, acariciando la cara de Fuuta.   -Err ¿Me perdí de algo? -Giotto apareció detrás del castaño, el rubio le sonrió a los nuevos integrantes de la gran familia. Obteniendo como respuesta una sonrisa suave de Yuni y dos asentimientos de cabeza por parte de Enma y Byakuran.   Giotto miro por el hombro de su hermano, mirando al niño en sus brazos acariciando el cabello. Tsuna dejo que lo haga, ya que a Fuuta parece que le gusta que le acaricien el pelo.   -L-Lo siento, Tou-san. -Se disculpo Chrome, la primera en hablar. -Me dijeron que querían cocinar, es mi culpa...   Mukuro y Deamon estuvieron a punto de abrir la boca, quieren defender a su hermana. Pero, antes de que los regañen a todos Tsuna decidió meterse.   -Vamos Reborn, el desastre ya lo hicieron. -Dijo entrando a la cocina, pasándole el niño a Reborn. Este suspiro tomando a Fuuta en sus brazos. Lo demás respiraron aliviados, miraron a escena delante de ellos sonriendo. - Lo único que queda es ordenar y limpiar todo.   -Tú no lo harás. -Ordeno el caza talentos. -Ellos lo hicieron, que limpien todo.   -Está bien. - Respondieron al mismo tiempo, sin querer que Reborn se enoje más de lo que esta.   -Iré a cocinar. -Aviso Tsuna, miro a los resiguen llegados. Animándoles silenciosamente a presentarse, los demás quedaron donde estaban, sabiendo que tienen que darles una oportunidad a los chicos.   Sonriendo brillante, y cada uno a su manera. Decidieron ayudarles a integrarse, quizás la presencia de Tsuna y de Reborn en sus vida les cambio mucho. Saben que se siente estar en presencia de gente nueva.   -Jajaja ¡Encantado, soy Takeshi! - Dijo siendo el primero en hablar, sin dejar de sonreír.   -Un placer, soy Asari hermano mayor de Takeshi. - Siguió su hermano inclinándose de forma respetuosa.   -Hayato. - Hablo el plateado mirando a otro lugar cruzándose de brazos.   -Me llamo G, un gusto, hermano mayor de este. -Dijo el pelirrojo metiendo un de sus manos en su bolsillo, sonriendo de costado y apuntando con la otra a Hayato, ignorando en el proceso el grito de "¡Hey!"   -¡Soy Ryohei, al extremo! -Grito levantando sus manos de forma animada.   -Knuckle, encantados de conocerlos, soy hermano mayor de Ryohei. - Dijo Knuckle de una forma sorprendente mente más suave que la de su hermano, pero, sin dejar de sonreír.   -Ku fufu soy Mukuro. - Se rió, causando que Byakuran sonría mientras que Enma y Yuni temblaron.   -Nu fufu Daemon, hermano mayor de Mukuro y mi linda Chrome.- Se presento Daemon, el pelirrojo y la chica volvieron a temblar.   -M-Mukuro-nii, Dae-nii los están asustando. -Dijo Chrome de forma nerviosa. - M-Me llamo Chrome, es un gusto.   -Lambo, Lampo. -Dijeron al mismo tiempo, apuntándose entre ellos y confundiendo a los recién llegados con los nombres.   -Hn, Alaude, hermano mayor. - Dijo el rubio ceniza apoyándose en la pared.   -Kyoya. - Dijo el pelinegro saliendo de la cocina.   -Soy Giotto, hermano gemelo menor de Tsuna ¡Encantado de conocerlos! -Les regalo una sonrisa, confirmando el hecho de que es gemelo de Tsuna. -S-Soy Yuni, encantados de conocerlos. - Dijo Yuni sonriendo suavemente, sin dejar la mano de Byakuran.   -Soy Byakuran~ un gusto~. - Dijo el albino de forma cantarina.   -M-Me llamo E-Enma. -Dijo mirando el suelo abrazándose a el mismo.   Mientras que todos se presentaban y charlaban entre ellos, tanto Reborn como Tsuna hablaban sobre algunos planes. El cazador de talentos sigue sosteniendo a Fuuta en sus brazos y el castaño se movía por la cocina.   -Reborn, eres muy bueno cuando quieres. -Dijo Tsuna con una sonrisa. - Llenaste mi departamento de personas en menos de dos meses.   -¿Que quieres que te diga? Se reconocer un talento cuando lo veo. - Dijo bajando su sombrero, el castaño rió entre dientes lavando unas verduras. - Yuni y Fuuta tienen potencial para ser caza talentos, Byakuran es bueno creando frases, tiene talento para ser compositor y escritor, Enma tiene futuro como actor.   -Te lo dije, tú buscaras una casa nueva. - Agarro el cuchillo y comenzó a cortar las verduras. - Presiente que en cualquier momento Giotto arrastrara los demás a vivir con nosotros.   Reborn se inclino al costado, acercando su rostro frente al del castaño.   Tsuna sintiendo una sombra arriba suyo, levanto la cara, sonrojándose frunció el ceño por la cercanía del caza talentos. Aun así cerro sus ojos, haciendo que Reborn sonriera presionando sus labios contra los de Tsuna.   El castaño sonrió también, siempre fue así con Reborn. Pocas palabras y más acciones, no es como si el pelinegro se dejara llevar mucho por las opiniones de los demás.   -¡AHH...! -Alguien grito.   -¡Oka-san!/¡Tou-san!/¡Tsuna!/¡Reborn! - Fuertes gritos hicieron que rompieran el beso, Tsuna soltó el cuchillo sorprendido y Reborn no dejo de sonreír. Pobre Fuuta, acaba de ser despertado por los gritos.   Un gran sonrojo se presento en la cara de Tsuna, trato de ocultarse tras sus manos. Risas y gritos se escucharon viendo eso, el más desorientado de todos fue Fuuta, quien no tienen idea de que esta pasando, por eso decidió volverse a dormir.   Reborn agarro la cintura del castaño, volviéndolo a besar frente a todos.   Más gritos se escucharon, chiflidos, risas, bromas y felicitaciones.   -No entiendo porque se sorprenden, mocosos. - Dijo Reborn. - Esta relación se veía venir desde hace tiempo.   -¡¡Reborn...!! -Grito Tsuna sonrojándose más.   Un día para el festival.    
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