«¿Se puede morir por ansiedad s****l? Yo creo que sí» Justo en este momento creo que me dará un paro vaginal si no me quito estas ganas inmensas que tengo de ser penetrada por un pene. Todo por culpa del hombre que va sentado frente a mí con porte de macho alfa. Lleva su pierna cruzada arriba de la otra, unos lentes de lecturas puestos, mientras mira unos documentos con mucho interés. Él está ignorante a la excitación que siento yo en este momento. Pero el muy condenado es el culpable de que mi libido me esté azotando. Primero lo veo desnudo saliendo de la piscina, donde me mostró como se seca su pene con tanta alevosía. Luego, el enfrentamiento del corredor, ¡Dios! En serio estaba deseosa de que al menos me pasara la mano. «¡Pero, no! Lo único que hizo fue tener un arrebato de bipolari