“Éste es el único momento que tenemos para estar juntos", respondió Elijah. "Sólo hay que disfrutarlo.”
Ella asintió, pero una lágrima de plata se abrió paso por su mejilla.
"Nunca te dije que yo también te amo", respondió Kate.
"Lo hiciste," le dijo Elijah: "Lo leí en tu mente."
Kate se acurruco junto a él y puso sus brazos alrededor de él. "Deja que me quede contigo, Elijah, hasta que suceda. ¿Me dejas tener eso al menos? "
"Por supuesto", dijo.
Kate echó la cabeza hacia arriba para que los dos estuvieran al mismo nivel y poco a poco, suavemente, apretó los labios contra los de Elijah. Su boca se sentía cálida y suave contra la suya. Una sensación como un millar de fuegos artificiales estalló en su interior. Ella cerró los ojos, apoyándose en el beso, profundizándolo, sin desear na
