DEJAME ESTAR EN TU VIDA... AUNQUE NO SEA CONTIGO

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Mi mamá estaba en el público junto a mi hermanita, yo le envié un beso a mi madre, mire a ambos lados buscando a papá, era extraño que él aún no estuviera aquí, nunca se perdía una de mis peleas.

— Concéntrate, tienes que vencerlo — Me dijo mi entrenador.

— ¿sabes algo de mi papá? — Le pregunté.

— tal vez está atendiendo algún negocio, ahora deja de pensar en eso y enfócate, ¿o no te gustaría llevarle el trofeo a Devon? — Yo asentí de inmediato, papá iba a estar feliz por mi victoria, no lo iba a defraudar, el tenía mucha confianza en mi, me ha apoyado en esto desde que empecé.

— ¡ganaré! — Volví a mirar a mi madre, ella estaba llorando, había un policía junto a ella.

Yo corrí a ellas de inmediato, papá tiene que estar bien.

— Cariño... tu papá — Ella no termino la frase, mi hermanita también estaba llorando.

— ¿que le pasó? — Pregunté.

Mamá me agarró de la mano e hizo que saliéramos del recinto.

Ella me llevo al camerino, junto con mi hermanita y el policía.

— Amor, tu papá está muerto — Los ojos se me empañaron, lágrimas tibias salieron de ellos y recorrieron mis mejillas.

— ¿como paso? — pregunté calmado.

Mamá empezó a llorar mucho más, yo la abrace fuerte.

— ¿Que paso? — Le pregunté al policía.

— lo asesinaron, presuntamente él iba a abusar de una menor de edad — Yo negué con la cabeza de inmediato, mi padre jamás le haría daño a otra persona, esto debe ser un error, papá no le haría daño ni a una mosca, en esta vida no existe mejor que mi padre.

— esto debe ser una equivocacion — Mamá se apretó más a mi, mi hermanita también me abrazo, me sentía mareado por toda esta información.

— Lo siento, pero la víctima ha hablado y ya conto lo que pasó —

Tenía rabia, y tanto dolor en estos momentos, como alguien podía acusar a mi padre de algo tan ruin!

— No me importa lo que ella diga, mi padre jamás haría algo así! — Le grite al policía con rabia.

— ¿donde está mi padre? — Le pregunté al policía.

— están revisando su cuerpo, pero ustedes pueden ir a verlo —

Me separé de mi madre y de mi hermana, me saque la ropa de la pelea y me puse unos jeans, y un suéter de algodón.

— quiero que me lleves allí — Le pedí al policía.

Mamá nego con la cabeza, yo me acerque a ella y le di un beso en la frente.

— Todo está bien, papá no es capaz de hacer algo así, yo voy a aclarar todo esto, y castigare al culpable —

Cargue a mi hermanita y salí con ella, mamá me apretó la mano con fuerza, ahora yo era el hombre de esta familia y iba a mantenerla unida.

— ¡Donovan! — Grito mi entrenado mientras se acercaba a nosotros.

— Lo siento, pero no creo volver, te deseo suerte — Me despedí, de el, junto a mi sueño de ser un boxeador profesional, ahora tenia que centrarme en mis estudios universitarios, y en mantener a flote mi familia y los negocios de mi padre.

Cuando salí del recinto, los flashes de las cámaras de los reportados me cegaron, ellos gritaban y preguntaban si era verdad lo de la violación.

Camine más rápido hice subir a mi madre y a mí hermanita primero en el coche del policía.

— ¿Donovan que piensas de lo que pasó? Tu ¿hermana está bien? — ¡como se atrevía a insinuar tan cosa!

Me di media vuelta y le di un puñetazo al reportero.

— No te permito que insinues tal cosa —

Le había partido la nariz, el resto de los reporteros no se atrevieron a entrometerse, solo tomaban las fotos y me gritaban algunas preguntas.

Yo me di la vuelta y subí al coche junto a mi madre y mi hermanita.

— aclararé todo esto, no te preocupes —

Mama asintio con la cabeza, pero no sé veía para nada convencida.

— ¿Y si es verdad? — Me preguntó mamá.

— ¡no! yo sé que clase de persona era mi padre, y me duele que dudes de él — mamá agachó la cabeza.

— ¿entonces por qué pasó esto? no lo entiendo — Y yo mucho menos, pero de algo estaba seguro, mi padre era inocente de lo que se acusaba, y yo iba a refundir en la cárcel a ese chica por manchar el buen nombre de mi padre.

— Confía en mi, yo arreglaré todo —

Mamá solo asintio con la cabeza, pero podía ver en sus ojos la duda, y eso me partía el alma.

*

Afuera del lugar donde estaba el cuerpo de mi padre habían muchos más reporteros, mire a mamá que solo agachó la cabeza y después a mi pequeña hermana que aún no entendía del todo lo que había pasado.

— bajaré yo — Mamá nego con la cabeza.

— lo haremos todos — Me baje primero y después ayude a mamá a bajar, los reporteros se apilaron sobre nosotros, pero un par de policias nos ayudaron a poder apartarlo.

— No tenemos nada que decir — Grite.

Mamá camino rápidamente mientras cargaba a mi hermanita en brazos, yo camine detras de ella, estaba dolido, pero la rabia que tenía dentro era mucho mas grande.

— ¿puedo ver a mi padre? — Le pregunté a un trabajador del lugar.

— Sígueme — Yo asentí con la cabeza.

Mire a mi madre, tal vez ella quería acompañarme, pero al verla tan descolocada lo mejor era que no lo viera en el estado que estaba.

Camine a la par del hombre, quien me llevo a un cuarto, al entrar el frío se colo por mis huesos.

— ¿Estás listo? — Me preguntó.

El destapó el cuerpo de mi padre, yo me acerque y lo mire, parecía dormido.

— la bala impacto directo en el tórax, perforando un pulmón, tuvo una emorragia interna, murió casi al instante — me dijo el hombre.

Acaricie la mejilla de mi padre, me agache un poco y le di un beso en la frente.

— Gracias — Le dije al hombre. limpie mis lágrimas y salí de esa habitación, ahora tenía que encargarme de otro asunto.

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DIAS DESPUÉS

Estaba cansada de decir siempre lo mismo, cada que entraba un policía nuevo me volvia a preguntar que habia pasado y yo, siempre contestaba lo mismo, nunca dije algo diferente, siempre sostuve la misma versión.

Mi abuelito habia llegado a visitarme, yo le pregunté que si nos iríamos dr aquí, pero el me dijo que aún tenia que estar un tiempo más en este lugar.

Hoy la abogada que me asignaron había llegado, ella me había dicho que yo iba a salir libre pronto que no me preocupara, que esto era solo una formalidad.

— hoy tendrás una audiencia, pero no te asustes, saldrás libre pronto, tal vez salgas para este fin de semana —

Yo le sonreí y asentir con la cabeza, salir de este lugar era lo que más deseaba, aunque me sentia tab culpable por todas las mentiras que dije.

— gracias — Le dije con una voz apagada.

Ella se acercó a mí y me abrazo fuertemente.

— a ti por decir la verdad — Trague en seco, ahora me sentía aún peor.

— ¿has visto a mi papá? — Le pregunté.

Yo no había visto a mi papá en estos días que he estado aquí, tal vez tiene miedo.

— seguro vendrá, ahora no pienses en cosas malas — Yo asenti con la cabeza.

Un policía llegó y me pidió acompañarlo, yo me levanté y fui con el.

— ¿a dónde vamos? — Le pregunté.

El policía no me contestó, solo siguió caminando, cuando salimos habían tantas personas afuera, gritando preguntas que no quería responder.

Me subí al coche y este arranco de inmediato, yo todo esto lo estaba haciendo por mi papá y mi abuelito, se que esto me convierte en una mala persona, pero ya no podía retractarme.

*

La audiencia fue más de lo mismo, yo repetí lo mismo de siempre, sin equivocarme en nada.

— haremos un pequeño receso — Dijo el juez, yo mire a las personas que estaban en ese lugar, y allí en una de las bancas estaba Donovan, él me miró y yo le sonreí un poco, ¿que hacía el aquí?

— No lo mires, ese chico es de lo peor —

Yo mire a la abogada y negué con la cabeza, él era bueno.

— Donovan es bueno — Le dije, ella me quedo mirando.

— Donovan es hijo de Devon —

Las lágrimas empezaron a salor de mos ojos, yo volví a mirarlo, pobrecito, por mi culpa su papa ya no estaba aquí.

— ¿Puedo retractarme? — Le pregunté bajito a la abogada, ella me miró con extrañeza.

— ¿de que estás hablando? estamos a punto de escuchar el veredicto del juez —

Yo necesitaba decir la verdad, Donovan no merecía esto.

El juez volvió junto a varias personas más.

— retomemos — Dijo el juez.

— teniendo en cuenta todas las pruebas, hemos llegado a la conclusión de que Lorena Salazar es culpable del asesinato de Devon Gross, su sentencia será de 40 años —

Toda la sala quedó en completo silencio, yo volví a mirar a Donovan, el me sonrió, levantando una esquina de su boca.

— ¡Eso no puede ser! ella es la víctima — Grito la abogada.

— ¡orden en la corte! — grito el juez.

Ella me miró.

— lo siento — Me dijo casi llorando.

Yo me levanté y trate de huir, pero un policía me detuvo.

— ¡quiero irme con mi abuelo! — Grite mientras pataleaba.

— ¡abuelito! — volví a gritar.

Donovan se acercó a mí, junto a un hombre mayor.

— aprovecha tu tiempo en prisión, que yo me voy a encargar de tu familia de mierda —

Me dijo el con una sonrisa de satisfacción en los labios.

— perdóname —

Donovan se dió media vuelta y salió del lugar.

— es hora de ir a tu nuevo hogar — Dijo el policía arrastrandome.

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15 AÑOS DESPUÉS

Mi asistente personal entro a mi oficina, que estaba en situada en uno de mis casinos, el se acercó a mí y me miró con algo de miedo.

— señor, hoy saldrá en libertad la señorita Salazar —

Saque un chocolate de mi bolsillo y lo lleve a mi boca, masticando lentamente el rico manjar.

— Ya lo sé, mañana iremos a darle una calurosa bienvenida — Me levanté de mi silla y camine hasta la puerta.

— Hoy estoy de buen humor, así que tienes el resto de la tarde libre — Mi asistente asintio con la cabeza y salió de la oficina.

Yo salí detrás de el, esa pobre infeliz no iba a tener un día de paz mientras yo esté con vida, mañana empieza su verdadero calvario, uno del cual no iba a escapar.