Si hubiera sido en cualquier otro escenario, ella lo habría golpeado hasta dejarlo sin sentido después de informarle que su nombre no era "rosita" y que ya estaba mostrando bastante piel. Sin embargo, se suponía que no era más que una civil normal y desnudarse era ahora su trabajo. Se sorprendió una vez más por lo valientes que eran las chicas para enfrentar algo como esto día tras día y entendió un poco mejor porque Tora golpeó la botella con tanta fuerza a primera hora de la mañana. - Ten un poco de paciencia- dijo, tratando de ser coqueta pero su voz sonaba más tensa de lo que había querido- No querrías apresurar algo bueno, ¿verdad? - Me haces esperar demasiado y tendré que encontrar a alguien más a quien darle esto- dijo el hombre, rompiendo un billete crujiente frente a ella, y se