Dajuku asintió y dijo que se aseguraría de que fuera así antes de preguntar si necesitaban algo más. - Sí... ¿Tienes amigos que sean dueños de clubes similares o conoces a alguien más que quiera que este club fracase?- Preguntó Arlet. El hombre de la silla se río entre dientes y negó con la cabeza. - Conozco a algunos de los otros propietarios de clubes de la ciudad, pero algunos de los lugares son un poco lujosos en comparación con este lugar. Nos va bien aquí, pero de ninguna manera somos los mejores en el negocio. No veo que ninguno de ellos se moleste en verme como una competencia - Bueno, ¿Hay alguien más entonces? ¿Alguien que tenga una venganza personal contra ti? ¿O tal vez alguien a quien debas dinero? Dajaku negó con la cabeza. - No, todos mis préstamos se pagaron hace much