CAPÍTULO 2.

1361 Words
Julián. Caminamos hasta el apartamento de Aarón, el novio por elección de mi mejor amiga Kriss. No lo odiaba, pero digamos que no me caía bien. ─¡Eh! Mira a quién tenemos aquí al criminal Stone ─soltó al abrir la puerta y mirar a mi dirección. ─Te voy a hacer una buena pregunta ─contesté y el asintió con una sonrisa en su rostro. ─¿Alguna vez te han partido la cara a esta hora? Porque si no es así déjame saber y arreglamos esa situación ─dije y Bruno soltó una carcajada. ─Bueno, bueno no quiero peleas son los únicos chicos que amo en todo el mundo y no quiero que peleen incluyéndote Bruno, porque sé que estarás de parte de Julián ─soltó Kriss tomando de la mano a Aarón. Entre al apartamento de Aarón y vi bebidas en una pequeña mesa en la sala, y unos globos con un pastel. ─¿Y esta mierda que es? ─pregunté. Los tres empezaron a corear feliz cumpleaños, vi a Dulce María salir de la cocina con un top que dejaba ver su estómago. ─Que carajos, mi cumpleaños es mañana ya me voy a morir eso es de mala suerte ─dije y ellos soltaron una carcajada. ─Hace quince minutos estabas en la mitad de la calle esperando a que un auto te arrollara, sin incluir la vez que te tiraste del caballo ─soltó Bruno con una sonrisa en su rostro. ─Esta es una fiesta entre nosotros, para celebrar tu cumpleaños, ya que mañana estaremos en una discoteca con muchas personas y conociéndote estarás detrás de cualquier chica que lleve una falda corta y este sin sujetador ─dijo Dulce María a mi lado. ─Puedo darte tu regalo de cumpleaños adelantado si quieres ─susurro en mi oído, esboce una sonrisa. ─Cariño, sabes que no repito con nadie ─dije y ella soltó una risita. ─Solo conmigo porque te gusta que sea mala ¿verdad? Eso te encanta ─respondió apretando mi trasero. ─A follar a las habitaciones, al frente mío no, tengan piedad ─soltó Bruno sentándose en uno de los sofás. Camino hacía el y tomé asiento a su lado, Aarón abrió una botella y nos sirvió a todos en un vaso. ─Brindemos por el Pre- Cumpleaños del idiota de Julián con unas buenas palabras ─soltó Aarón chocando su vaso con el mío. ─Stone, sé que no nos llevamos bien porque piensan que soy un idiota para Kriss, pero eres un buen chico y espero que algún día tengas una buena chica a tu lado lo necesitas ─dijo Aarón tomando de su vaso, yo asentí. ─Hermano mío, las palabras están de más tú lo sabes todo, pero deja de acostarte con una chica diferente todos los días, eso me hace sentir un perdedor ─soltó Bruno chocando su vaso con el mío y dándome un apretón en la espalda. ─Mejor amigo, hermano de vida, necesito una chica a tu lado y que dejes de ser un hijo de puta, estoy pidiendo mucho, pero es un buen deseo y un buen cambió que quiero para ti ─dijo Kriss dándome un beso en la mejilla. ─Yo no tengo nada para decir, solo que te mantengas como el papasito que eres y que sigas teniendo el don de complacer las peticiones de una mujer en la cama, y bueno salud por Julián Stone el dios del engaño ─soltó Dulce María con una sonrisa en su rostro. Todos chocamos las copas. ─Ahora es mi turno de dar unas palabras ─dije poniéndome de pie. ─No me interesa tener una historia de amor, eso no es lo mío No me interesa que alguna chica se enamore de mí, porque yo no lo haré, No me interesa ser el chico hijo de puta que soy, porque así me aman y todas las mujeres están a mis pies. No me interesa ser tóxico, posesivo, obsesivo, impulsivo, porque así soy y nadie me cambiará. Solo les diré: SOY UN DIOS, SOY EL DIOS DE TODAS. Todos soltaron una carcajada, y yo me limité en beber mi trago de un tiro. ─Sigan riendo, ustedes piensan que me van a ver como Aarón como un idiota enamorado sin ofender Kriss eres una buena chica, pero yo no creo en eso de los sentimientos prefiero darles placer a las chicas y si se enamoran ellas pierden ─solté y asintieron. ─Bueno, bueno vamos a celebrar ─dijo Dulce María levantándose del sofá. ─¿Me acompañas a la habitación? ─preguntó y asentí. Caminamos a la habitación del fondo y ella abrió la puerta, al entrar pegó sus labios a los míos y apretó mi m*****o. ─¿Quién es tu Dios? ─pregunté besando su cuello. ─Julián Stone, tú eres mi Dios ─contestó quitando su top. *** ─Creo que estoy enamorada de ti Julián, no sé en qué momento paso, pero siento que mientras más estoy contigo más crece ese algo en mí ─dijo Dulce María a mi lado. Ambos nos encontrábamos en la cama después de nuestra sesión de sexo. ─Estas son las cosas que evito, vez porque no me gusta estar con una chica más de una vez, tienes una jodida idea de lo que me estás diciendo te lo advertí desde el primer momento no te enamores de mí, te lo dije y mira las estupideces que salen de tu boca ─solté, recogiendo mi bóxer y pantalón del suelo. ─Pero Julián, sentir amor no es mal... no la dejé continuar. ─No me interesa lo que tengas que decir, no me vuelvas a hablar ─dije llegando a la puerta. ─No me pidas eso ─dijo, tapando su cuerpo con las sábanas, me volteé y caminé hacia ella para detenerme frente a su rostro. ─Aléjate de mí ─susurré. Observé caer lágrimas por sus mejillas, pero no me importo. Abrí la puerta y salí de la habitación al llegar a la sala vi a Bruno caminar hacia mí. ─¿Que son esos gritos? ─preguntó, lo empujé caminando hacía el pastel, lo tomé y tiré al suelo, caminé hacía la puerta y salí del departamento. Al salir a la acera el frío viento llegó a mi cuerpo, caminé hacía un bar cercano y vi que estaba cerrado, me dispuse a caminar a mi departamento nuevamente y al llegar a esté, abrí mi gaveta secreta de licores y comencé a tomar del pico de la botella. ─¡¿Amor?! ─grité riendo. ─¿Enamorada? ─bufé. Son fantasías absurdas, que rayos ocurre con Dulce son tres años en esto y ella ahora dice esto después que me repetía mil veces que nunca se enamoraría. Después de una hora y de dos botellas todo me daba vueltas, corrí al baño y vomité, me metí como pude en la ducha y sentí el agua fría caer en mí, inmediatamente desperté de mi coma alcohólico. Escuché toques en la puerta y salí con la ropa mojada de la ducha hasta la puerta, al llegar la abrí y vi a Kriss y a Bruno. ─¿Que mierda te paso? ─preguntó Kriss tomándome del brazo. ─Estaba tratando de acabar con mi vida ─solté con una sonrisa en mi boca. ─No es momento para sarcasmos Julián ─dijo Kriss. Bruno fue hasta el baño y cerró la pluma. ─¿Que pasó entre tú y Dulce? Está hecha un mar de lágrimas desde que te fuiste y no nos ha dicho que le dijiste ─soltó Bruno a mi lado. ─Se enamoró de mí ─murmuré abriendo otra botella. ─Basta Julián deja de tomar tanto ─dijo Kriss a mi lado. ─Estoy celebrando mi cumpleaños, ya que es mi cumpleaños ─dije soltando una carcajada. ─¡Me estas estresando, me voy a ir y te voy a dejar solo en tu miseria! ─gritó Kriss a mi lado. ─ME GUSTA ESTAR SÓLO, SIEMPRE HE ESTADO SÓLO NO TE NECESITO A MI LADO, NO LOS NECESITO ─grité bebiendo todo lo que quedaba de la botella. ─LARGO ─grité. Kriss tomó del brazo a Bruno y salieron del apartamento. Caminé hasta el sofá y me acosté en él antes de cerrar mis ojos y soltar una risita gracias al alcohol en mi organismo. ─Feliz cumpleaños de mierda Julián ─solté y no me di cuenta cuando me dormí.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD