Fecha: 20 de septiembre del 2014 Habían pasado solo unas semanas, unas pocas nada más, aun así no podía ver a Andrew a la cara. Durante tantos años me plantee los escenarios de mi vida, pero desde que lo conocí, desde que me enamore de él; en todos los posibles escenarios en los cuales había proyectado mi vida estaba él presente. Mi futuro ya estaba metódicamente planeado en mi cabeza, dónde él estaba no solo presente, sino que formaba una parte vital del mismo, algo así como un pilar en mi propia casa, que yo creí era de concreto y resultó ser de naipes. No habíamos hablado del tema, no queríamos discutir del tema, dormíamos uno al lado del otro por no sentir nuestra ausencia, pero siempre de espaldas solo por nuestra incapacidad de estar solos, o más bien, de estar el uno sin