Melanie, nunca debimos estar juntos. - Su voz es como si no le importara que me entregue a él.
- ¿Te arrepientes de haberlo hecho? - Mi pregunta es la que termina de partirme el alma.
-Sí. - Mis ojos se abren como platos, no me puedo creer lo que me respondió, como se atreve.
-Yo no Esteban y si tuviera que cambiar algo de mi pasado, cambiaría todo menos el a verme acostado contigo. - No sigo hablando, no puede ser que sea una más de su lista, tenía esperanza de que,, aunque me tuviera aquí, cambiaría algo.
- ¿Por qué todo lo tienes que hacer tan difícil? Me grita.
-Y tú no te quedas atrás, no sabes cuánto me duele ser una más de tus listas pasadas.
-Deberías de odiarme.
-Ya vez que no, no puedo odiar al hombre que hace un año comencé a amar. - Sus ojos se abren como platos,
