Salimos de la terapia y me voy rápidamente a nuestra habitación, no se porque estoy huyendo de él es que joder no se como afrontar su te amo, no si debo de decirle yo tambien, es que no se que siento lo quiero ¿pero lo amo?.
—Keres cariño sal del baño.
—Me estoy bañando.
—No es verdad, abre ¿por qué estás huyendo?.
—Claro que no— ¿cómo sabe?.
—Claro que lo se, es por él te amo.
Abro la puerta.
—¿De verdad lo haces?.— le pregunto
—Si, te amo como no tienes idea.
—Mientes.— trato de cerrar la puerta
—No lo hago— me jala y me abraza —Te amo demasiado que no estoy seguro si algo puede describir lo que siento por ti.
—No se como sentirme.
—¿Por eso huyes?.
—Sí, es que no se, el que me ames me da miedo.
—¿Por qué cariño?.
—Porque me puedes romper el corazón y temo que ambos podamos rompernos en mil pedazos.
—Entiendo— pone su mano en mi mejilla —Pero tambien ambos podemos unirnos y crear maravillas.
Si solo supiera las maravillas que creamos aun sin amarnos.
—No soy buena expresando mis sentimientos.
—Claro que si ¿Qué paso con todas las veces que me dijiste que me jodiera?.
—Eso…
—Las veces que me gritaste te odio.
—Bueno eso…
—La mejor es cuando me pediste que fuera tu novio— se levanta —Aún recuerdo y siento la misma emoción.
—Ya entendí.
—Oh sin contar cuando gritaste que me vengarías, si…
—Jódete.
—¡Vez!— me besa —Te amo.
—Idiota.
—No, no, no, dime osito.
Dioses, no puedo evitar reírme, es que es tan ¡AAAAAAAA!.
—Tienes razón osito, tienes razón.
—¿Sabes que nunca he hecho?.
—¿Tirarte de un paracaídas?.
—No.
—Entonces…
—Tener sexo con la persona que amo en un hospital psiquiátrico.
—Aún no veo resultados.
—Todo negativo— me muestra el celular
Me dejo sin escusas.
—Está prohibido tener sexo en las instalaciones.
—¿Y desde cuándo algo está prohibido para ti?.
—Paciente Elijah Monroe por favor de presentarse a recepción, paciente Elijah Monroe por favor de presentarse a recepción— dicen por los altavoces.
—Creo que te hablan— salgo de su agarre seductor que un poco mas y me hace flaquear.
—¿Lo planeaste?.
—No— lo empujo —Anda ve, quien sabe que quieren.
Elijah
Maldita sea la interrupción.
—Acompáñame.
—¿Seguro?.
—Si, me pierdo y eres mi guía.
Sonríe de esa manera en la que me encanta y se agarra de mi brazo, mierda quiero casarme con esta mujer.
—¿Él es el hombre que buscaban?.— dice la mujer
Que los dioses de Keres me ayuden a pasar esta vergüenza que estoy sintiendo ahora mismo, Alex, Jason, Martín y otros guardias están en la recepción.
—¿Qué mierda traes puesto?— dice Jason sorprendido.
—Pensamos que te secuestraron— Alex mira a Keres —Sin ofender, un lugar lejos, una casa rara.
—¡Hey!— le grito —Deja de tomar fotos, maldita sea.
—Claro que no— se mueve para que no lo agarre. —¡Jason!.
—Pueden ir a la sala de terapia a hablar, por favor nada de fotos ni ruido, les pido respeto a los pacientes— dice la señora.
—Los dejare para que hablen— me dice Keres.
La señora nos guía a la sala donde tomamos terapia en la mañana.
—Manuel me hablo temprano que habías entrado y no sabían nada de ti, no querían alarmar a Tabita, Elijah me imagine cosas, pero nunca que estuvieras en un psiquiátrico.
—¿Te obligo?— me pregunta Jason —Puedes decirlo, si lo hizo te sacaremos.
—No me obligo de hecho creo que me gusta— les digo —Ya entiendo por qué desaparece para venir aquí.
—¿Se interna cuando desaparece? Elijah perdón, pero esa mujer está loca.
—No creo que esté loca, solo se preocupa por su salud mental— dice Alex
—A mí me encanta su locura.— le digo
—Ya te lavaron el cerebro.
—Puedes ser serio por una vez en tu vida Jason— le digo molesto
—¿Entonces te sientes cómodo y bien estar aquí?.
—Hablando me di cuenta de que la lastime mucho, pero tambien de lo lastimado que estoy desde mi infancia.
—Si te estás sintiendo bien, entonces quédate mas tiempo, sabes que siempre querremos lo mejor para ti.— me dice Jason
—Jason tiene razón, cuando estás en ese ambiente, normalizas muchas de esas cosas hasta te das cuenta de que no es normal.
—Si y creo que es bueno reconocer que necesitamos ayuda, siéndoles sinceros fue duro aceptar que habían abusado de mí, no solo hace unos meses, sino en mi adolescencia y la forma en la que hablas con el terapeuta, sientes que te quitas kilos de los hombros.
Jason se levanta y me abraza, después se le une Alex, en mis largos 25 años son contadas las veces que esos dos me dieron un abrazo asi, la muerte de mi madre es la que mas recuerdo, tres mocosos llorando mientras nos abrazamos.
—Me internare contigo— dice Jason
—Yo tambien, solo tengo que decirle a mi esposa.
—No es necesario, chicos, tienen cosas que hacer, la empresa…
—Hola, Rose, me internare en un psiquiátrico con Elijah, Alex y Keres…
—Jason dile que mi esposa la ayudara.
—Quedas a cargo de la empresa junto con la esposa de Alex, adiós.
¿Qué mierda acaba de pasar?.
—Listo, donde nos inscribimos.
—¿¡Están locos!?— les grito
—Apenas lo vamos a averiguar.
—Jefe…
—¿¡Tu tambien Manuel!?.
—Pues siempre es bueno cuidar nuestra salud mental en este trabajo.
Jamás imaginé que esto pasaría…
—Elijah ¿por qué están metiendo camas a nuestra habitación?.— me pregunta Keres
—Nos internaremos tambien— dice Jason
—No quedaban habitaciones asi que como su habitación es grande.
—Elijah.
—Intente detenerlos, pero…
Me jala al otro extremo, si supiera cuanto rogué porque no lo hicieran.
—Nunca he dormido con hombres, ósea si, pero no dormir de dormir.
—No te aran nada.
—Este era un lugar seguro, que pasa si se dan cuenta de que varios de tus amigos están aquí.
—No sedarán cuenta.
—Elijah— dice alargando mi nombre —Que no íbamos a tener sexo.
—Habías dicho que no.
—Crees que no quería tener sexo en un psiquiátrico, es sumamente excitante.
—Podemos hacerlo, en otra parte tal vez.
—Todo tiene cámaras, hay guardias de seguridad.— suspira —Pero en fin, tienes muy buenos amigos que te apoyen en eso.
—Estoy sorprendido de hecho, no dudaron, hasta la esposa de Alex dijo que si de inmediato.
—Si no me gustaras tanto ya te habría abandonado por hacerme dormir de esa forma.
—Por eso te amo cariño, eres perfecta y amorosa— la abrazo —Te amo como no tienes idea.
—Lo se osito, lo se.
Me abraza fuerte y aunque ella aún no me lo diga puedo sentir que me ama de la misma manera en la que yo la amo a ella, no la presionare para que me lo diga, cada quien tiene sus tiempos y si el de ella aún no lo es la respetare de la misma manera en la que ella respeta que la ame.
Y de cierta forma esto, el mostrarme este secreto y el exponerse de esa manera ante mí es un te amo para mí, el que piense que esto nos ayudara a los dos tambien es otro te amo, el que me diga sus miedos y demuestre que le importan como me apoyan sus amigos es otro y otro te amo, que no dice con palabras sino con acciones.
Eso me encanta de ella, puede parecerte la persona mas desinteresada, pero es lo contrario, le interesan las personas, se preocupa por ellas, les ayuda sin esperar nada a cambio y que lo haga considerando la mierda que vivió me llena tanto de orgullo, estoy orgulloso de quien es después de eso, porque lo que vivió puede cambiar a las personas para mal. Pero no ella, ella es… es tan jodidamente perfecta que merece mas de lo que tiene.
Ella es mía.
Yo soy de él.
Ambos nos pertenecemos de una manera que asi tengamos mil vidas, siempre estaríamos destinados incluso en el mismo infierno.