Me encontraba aparcado delante de la casa de Isabella. Saqué mi móvil y le marqué a Arnold.
- ¿Me confirmas para esta noche? – dijo, nada más contestar. Tenía alguna especie de fiesta en su casa y quería que yo asistiera.- Tu presencia sería muy buena, hay varias chicas que podrían ser de tu agrado.
- No estoy de ánimos para fiesta. Te he llamado para otra cosa.
- Estoy a punto de almorzar.
- Seré breve, nunca gané la apuesta, desde el principio nunca fui el tipo de hombre que le gusta a Isabella. Mentí, pensando que cuando ella estuviera un poco mas lejos podríamos tener una cita. Jamás me acosté con ella, ni siquiera nos llegamos a besar.
- ¿Por qué mentir? Te quedaban dos meses, tenias tiempo de sobra, ¿no estarás tratando de encubrir algo?.
- No. Todos ya lo sabían, ¿Qué s
