Una semana después.
Zane se encuentra sentado en el sillón y le sonríe a Emily.
—Es bueno verte caminar
—Si, mi trasero se estaba entumeciendo de estar en la cama
—Lo imagino
Ríen.
—Aunque estas toda encorvada como una anciana
—¡Gracias! Gran comparación
Zane se parte de la risa.
—Que bueno que te hago reir —dice Emily
Zane se sigue riendo.
—¡Mi-mi estomago! ¡No puedo respirar! —dice entre carcajadas
—Ya deja de burlarte de mi
—Esta bien, ya —toma aire para dejar de reírse
Emily entrecierra los ojos y Zane no resiste más, y sigue riéndose.
—¡Te aplastare! —Emily salta y se tira sobre Zane
—¡No! ¡Espera! —Zane le da la vuelta y la pone contra el sofá, tomándola de las muñecas —Ahora que estas asi... ¿Tienes cosquillas? —levanta una ceja
—No —dice segura
—¿Segura?
—Mmm...
