14. Un pequeño gato de madera

1335 Words
Llegamos muy pronto a la ciudad donde se encontraba Letta, pero encontrarla fue mucho más difícil de lo imaginado, así que, tras caminar alrededor de dos horas, al final nos rendimos y nos sentamos en la acera para mirar la edificación. ―De verdad parece una ciudad de mi mundo ―susurré. ―¿El mundo moderno? ―preguntó Dylan. ―Sí, creo que el único que no conoce estas cosas es Yu, ¿no? Yu asintió sin despegar sus ojos de una pantalla que mostraba el anuncio de los concursos y sus fantásticos premios. En el mundo de Yu solo había cosas medievales y mágicas, ni siquiera había este tipo de tecnología, pero tenían poderes asombrosos. La historia de Dylan se desarrollaba en Madrid, mientras que la de Byron en Nueva York, ellos eran los que más referencias al mundo moderno tenían, así que solo veían la ciudad para asegurarse que todo estuviera bien y después la ignoraban por completo, salvo Yu, quien veía emocionado y con grandes ojos brillantes cada mínimo detalle y preguntaba cada minuto el nombre de todo lo que no conocía. Pero este mundo era una clase de mezcla híbrida, tenía clases, cazadores, a.nimales extraños, y ese extraño sistema de videojuegos al que estaba atada, después estaba esta clase de lugares donde podía mirar a un ochenteriano hablar por teléfono celular y a otro manejar un auto de lujo. ―La Torre es distinta ―comentó de pronto Dylan―. Según lo que logré rescatar, es como otro mundo totalmente distinto a este. ―¿Sí? ―Sí, de hecho, pasa algo curioso con la Torre, es como otra forma de ganarse la vida, pero los que van allí no tienen buena fama. ―¿Qué? ¿Po qué no? ―Ellos solo suben por mero placer, orgullo y fuerza ―alguien más respondió y me giré un tanto sorprendida para ver a Letta―. ¡Hola!, ¿puedes explicarme por qué estás rodeada de hombres guapos y apuestos? ―¡Letta! Salté a sus brazos como un resorte y ella me abrazó de la misma forma, después nos soltamos a llorar como era de esperar, diciendo que nos encontrábamos muy asustadas y queríamos volver a casa, después nos alegramos de estar en este mundo juntas y jurar jamás separarnos de nuevo. Mis protagonistas principales se pusieron de pie para ver la vergonzosa escena, mientras que un chico detrás de Letta esperaba alguna indicación y lucía nervioso. ―Este chico… ¿es tu oc? ―pregunté confundida. ―¿Y ellos son tus protagonistas? Nuestros acompañantes se miraron confundidos entre sí y después esperaron alguna respuesta por parte de ambas. ―Será mejor que hablemos en privado, ¿por qué no vamos a la posada donde me hospedo? Asentí enseguida y partimos. Íbamos hablando de todo lo que había pasado, la forma en la que llegamos aquí y que ninguna sabía muy bien qué hacer ahora, era bueno saber que Letta estaba igual de perdida que yo porque así podría sugerir mis planes y ver si me apoyaba o no. ―Ya veo, así que despertaste en una biblioteca… lo mío fue distinto ―Letta y yo estábamos sentadas una frente a la otra mientras tomábamos té y comíamos galletitas―. Yo estaba dibujando cuando pasó eso y de pronto mi mano se adentró en la pantalla, ¡hubieras visto mi cara cuando pasó eso! Me asusté demasiado y cerré mis ojos, cuando los abrí estaba en este lugar y una misión me pidió ir a la Plaza de Plata, después me acordé de todos los juegos que he jugado y heme aquí. ―¿Y cuál es tu habilidad? ―me animé a preguntar, ella sin dudar desplegó su panel y la leí en detalle―. ¡Oh, genial! Eres un Rango S. ―Y tú una pequeña Rango D ―Letta dijo burlona y me encogí de hombros―, pero feo que recién subiste de nivel, un tipo de aquí me dijo que eso se logra con meses de entrenamiento y tú subiste en menos de dos semanas, ¿es por ellos? ―Sí, yo en realidad no puedo hacer nada… Después de explicarle a Letta lo que podía y no podía hacer, ella señaló al chico que estaba sentado en la cama. ―Tenemos una habilidad similar, ¿sabes? Yo puedo ilustrar cualquier cosa que quiera, pero solo es inanimado, incluso si ilustro un teléfono celular, no puedo hacer que funcione. Ese chico de allí es un oc, pero solo realiza las tareas más sencillas y casi no habla, por cierto… ¿qué significa “habilidades de compatibilidad”? ―Que pueden fusionar sus habilidades ―respondió el buen Dylan―. Posiblemente Writery pueda darle vida a tus ilustraciones por lo singular que es su habilidad ―señaló mi libro―. Ella puede describir incluso situaciones e influir en ellas. ―Pero se limita a mi rango ―aclaré cuando Letta señaló a su oc―. Por eso quería subir a la Torre y me registré como cazadora. ―¿Cazadora? Oh, sí… escuché de eso, yo solo me quedé aquí porque no supe qué hacer, ¿yo puedo ser una cazadora también? ―No cuentas con habilidades para pelear ―Byron habló por primera vez en mucho tiempo―, ¿qué tipo de trabajo hacías para que te dieran un rango tan alto? ―Ilustradora y escritora de cuentos infantiles, los ilustraba ―explicó mejor―. Muchas veces Writery me ayudó con las historias y yo solo las ilustré… así que el Mundo 87 ignoró mi segundo trabajo y me dejó como ilustradora… ¿por qué? A todo esto, ¿tú eres Byron? ¡Eres tan guapo! ―Entonces puedes ilustrar a un personaje que pueda pelear, un guerrero, algo así ―Dylan se acercó para ver la tableta que Letta tenía sobre la mesa―. Y Writery puede invocarlo. ―¿Es en serio? ¿Podríamos hacer algo así? ―pregunté incrédula y Letta comenzó a fantasear con todo lo que podría tener en sus manos. ―Tu habilidad está sellada, así que necesitas subir al Rango S para poder hacerlo, pero es posible, incluso ahora pueden probarlo. ―¡¿Quién es este chico tan inteligente y maravilloso?! ―preguntó Letta―. Hola, soy Letta, ¿quieres ser mi novio? Prometo amarte y cuidarte hasta el último de mis días. ―Soy gay. ―¡Maldición! ―¿Qué tenemos que hacer? ―pregunté entre risas y Dylan señaló el libro y la tableta. ―Letta, por favor dibuja un gato de madera, no tiene que tener muchos detalles. Mi mejor amiga asintió, no se tardó ni 5 minutos cuando el pequeño gato de madera ya estaba listo y nos giramos a ver a Dylan y esperar otra indicación. ―Ahora, Writery, escribe algo sobre el gato e invócalo. Eso también fue fácil, simplemente escribí esta situación y cuando lo invoqué, la palabra “Gato” desapareció de la hoja blanca y muy pronto apareció frente a nosotros. Un pequeño gato de madera totalmente materializado y formado, incluso parecía que nosotras lo habíamos tallado y saltamos, tan emocionadas que nuestros acompañantes saltaron en sorpresa. ―¡Eso es genial! ¡Somos geniales! ―gritó Letta. ―¡Somos geniales, lo somos! ―grité yo. Nos abrazamos, reímos, agradecimos al Dios del Mundo 87 por habernos dado estas habilidades y después nos sentamos de nuevo, mirándonos con una clase de sonrisa retorcida en el rostro y la adrenalina recorriendo nuestro sistema. ―Quiero ser una cazadora ―aseguró Letta―. Y vamos a subir a la Torre y volvernos fuertes, porque realmente no sé qué demonios tengo que hacer aquí y no puedo pasarme toda la vida en un cuarto sabiendo que podrás hacer realidad mis ilustraciones. ―¡Trato! Vayamos a registrarte como Cazadora de Rango S, ¡let’s goooouuu!
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD