La mañana del lunes el carro de la mudanza paso por las cosas y por la tarde tomaron el avión para regresar a casa porque por la noche del domingo hablaron que era mejor regresar y arreglar las cosas. No llegaron juntos a la casa, Sebastián dio indicaciones que dejaran a Emilia en casa el iría directo a la oficina del trabajo. —Te veré en casa. —dijo Sebastián. Emilia asintió. —Sí, pero esto no a acabando. —expreso Emilia molesta. Es cuando Sebastián la besa. —Amo cuando te enojas. —dijo Sebastián. —Sebastián. —dijo Emilia. Al entrar a la casa saludo Isabel que se encontraba en la cocina. —Isabel estaré arriba por favor avisa me cuando esté lista la comida Sebastián no vendrá a comer. —dijo Emilia riendo siendo lo último que había dicho. Subió por las escaleras entro a la