—Me gustas, Ángel. — de mis labios querían salir las palabras “te quiero” pero eso no era posible. ¿Cómo decirle que lo quiero cuando miente, oculta cosas y tiene un corazón tan grande como para albergar a varias personas en él o enamorarse una y otra vez? Es cierto, dije que una relación no la quería, que esto solo era por sexo, algo físico, carnal. Porque ¿qué otra cosa podríamos tener? Conocí a Ángel con la que fue su primera esposa, no mucho tiempo después se separaron, iniciaron el divorcio y poco tiempo después ya estaba Ashley, con pedidas de mano y todo incluido, llegó la boda, los problemas y ahora el divorcio. Para buscar su repertorio, solo se tenía que ir a internet y poner su nombre, salían sus múltiples parejas en un periodo corto de tiempo. Como si eso me alentara hac