Uno de esos amargos momento por el que lastimosamente atravesaron fue cuando mi abuelo falleció, mis padres lo querían inmensamente, diría que estaban eternamente agradecidos por el apoyo que habían recibido de su parte, dado que fue alguien que siempre les brindo ayuda tanto en los negocios que formaron en conjunto como para que no les faltase nada, sin dudarlo su partida fue muy dolorosa. En vista de que mi padre era su único hijo, fue el heredero de todos sus bienes.
Debido a su deceso no pude conocerlo como quise, ya que para ese tiempo solo tenía dos años, diría que lo he sabido de él, es que físicamente nos asemejábamos en algunos aspectos, peculiaridad que he corroborado a través de las fotografías que mis padres aún conservan.
El hogar en el que ahora me encuentro es un
