Besos torpes y entrecortados sustituyeron a las palabras y se regalaron varios minutos para sólo calmarse y sentirse; cuando el frío comenzó a calar, Cedrick acomodó sus pantalones e invitó a la desnuda chica a ponerse de pie, Aura apenas pudo levantar su vestido y cubrirse el cuerpo cuando fue alzada de la cintura y el trasero por el joven que enseguida comenzó a caminar. Ella bajó su mirada a él y su largo cabello resbaló por su rostro rozando el de él. —No pareces cansado— soltó con un tinte de gracia cuando Cedrick comenzó a subir las escaleras. —Créeme que lo estoy— confesó y dejó un pequeño beso a la joven que sostenía por instinto su vestido, buscando no entorpecerle el paso. Aura se abrazó más de él mientras le sonreía y se sentía absolutamente cansada, segura que é