En la fiesta

1438 Words
Llegamos al bar. Se estacionó frente al módulo del valet. Por favor no fumes, y si tomas no te pongas como la otra vez y... No te quiero hablando con ningún hombre, hoy eres mía. Estas loco. 1 no soy tú novia, 2 no puedes darme órdenes, 3 es una fiesta y... Me interrumpió al agarrarme la cara con fuerza con una mano y con la otra puso su dedo índice sobre mis labios para callarme. Solo obedece En serio estás loco Se bajó del auto y dió las llaves al valet. Dió la vuelta y me abrió la puerta. Extendió su mano para ayudarme y me negué, en serio estaba cabreada, no me contestó los mensajes, no me habló en todo en camino y solo agarra y me da órdenes, está bien que me gusta pero definitivamente no sabía que era tan mandón. Salí del auto, me miró molesto y al caminar hacia el bar, donde los amigos estaban en unas mesas en la terraza me tomó de la cintura y casi llegando donde estaban todos, me plantó un beso en la mejilla. ¿Estaba marcando territorio? Todos nos miraron, no era secreto para algunos que en verdad me gustaba desde mis 12 años y era bien sabido que tenía una lista de chicas pero nunca iba acompañado. Dos amigas se me acercaron y me preguntaron si en verdad iba con él, como una cita, no supe qué responder en realidad, no sabía en qué "plan" íbamos. Les dije que pasó por mi a casa. Ellas siguieron preguntando: ¿Por qué?, ¿Desde cuándo?. Evite las preguntas, claro que no les dije que le había insinuado querer ir con él a otro lado después de la fiesta. Durante un rato estuvimos sentados juntos, después me pidió que lo esperara un momento; lo vi acercarse a una mesa donde se que están personas con las que tiene amistad pero yo definitivamente no les hablo. Aproveche para acercarme a mis amigas y encender un cigarrillo con ellas. Creí decirte que no fumaras Me susurró muy bajo al oído mientras me abrazaba por atrás y recargaba su barbilla en mi hombro. Mis amigas me miraron con cara cómplice ¿De qué hablan, flaca? De nada en particular Le preguntábamos si están saliendo, pero no nos dice nada - contestó una de mis amigas, maldita... La vi molesta y solo rió. Ummm, no lo sé. ¿Tú qué dices? - me preguntó y yo voltee a verlo muy confundida, además me miraba de una forma tan inocente, para nada el como se había comportado antes. Me dio un beso en la mejilla y me soltó. Te veo en la mesa, por favor no fumes. Se dio la vuelta y mis amigas me tomaron del brazo y gritaron en silencio dando saltitos. En serio no sabía qué decir. Ya dinos No hay nada que decir Por favor, acaba de plantarte un beso frente a todos. Él, el que nunca tiene novia. No lo sé, es muy raro. Logré que dejarán de preguntar y me dejarán volver a la mesa. Me senté junto a él y puso su brazo sobre mis hombros mientras me miraba sonriendo. Comimos papas fritas, nachos y me puso un caballito de mezcal "Amor". En la siguiente ronda pedí Ron. ¿Te gusta el ron? Si ¿Qué más te gusta? No lo sé, la cerveza. Y las papás, prácticamente ignoras los nachos - me dijo mientras llevaba una papa a mi boca. Abrí la boca para dejarlo meter la papa y él aprovechó para dar un leve pellizco en el labio. Después de un rato se acercó a mi oído. Es hora de irnos Pero todavía es temprano. Vamonos - y se levantó En serio quiero quedarme otro rato Vámonos - me tomo de la cintura y me acerco a la mesa donde estaba la cumpleañera y nos disculpo, no hice más que despedirme. Caminamos al valet y pidió el auto, nunca me soltó la cintura. Yo en verdad estaba molesta y en 2 ocasiones trate de que me soltara pero solo pellizco mi cintura y me pegó más a él. El valet llegó con el auto y sin soltarme abrió la puerta y entré, él subió y arrancó. Yo iba molesta y callada, mirándolo de reojo y volteando nuevamente a la ventana. Ya dilo ¿Qué? ¿Qué estás molesta Claro que estoy molesta. Quería quedarme y me obligaste a irme. ¿Quién te dijo qué puedes decirme qué hacer? Ni siquiera me dejaste hablar con mis amigos, ni saludarlos... No me soltaste cuando me acerque a ellos. Vienes conmigo Son mis amigos Hoy eres mía, son mis reglas. No soy tuya. Ni siquiera se que quieres conmigo, me das órdenes, me contestas cuando quieres Te dije que quiero cogerte No soy una zorra para solo ir a tener un acostón contigo ¿Y quien dijo que solo quiero un acostón? No te entiendo Quiero cogerte, más de una vez. Pero si no es lo que tú quieres te puedo llevar a casa. Claro que quería acostarme con él, pero estaba muy enojada y en verdad no entendía su forma de ser. Sabía que era raro, pero estaba demasiado fuera de lugar, hasta daba miedo. ¿Si me acuesto contigo, ¿no será solo de una vez? No si quieres más Me quedé callada. Paro el auto, vi por la ventana y estábamos afuera de un motel, voltee a verlo. No sabía qué responder, no sabía si en serio lo quería. Por un lado en verdad quería tener sexo con él, por otro lado me decía que no debía dejar que me tratará así, pensaba que no podía ser fácil y solo dejar que me "cogiera" después de como me trataba. Estaba muy metida en mis pensamientos cuando sentí su lengua en mi oreja. Se te acaba el tiempo para decidir - mordió el lóbulo y siguió lamiendo y fue recorriendo de mi oreja a mi boca, no pude ni responder en beso me estaba calentando. Se apartó, y avanzó. Vi que entraba al motel y voltee a verlo con intriga, nunca le dije que si quería. Vamos, tú cuerpo grita que te coja Me quedé callada, nunca me habían hablado así, no sabía si debía tenerle miedo, ¿Me estaba faltando al respeto? El encargado se acercó cuando aparcamos en el espacio debajo de la habitación; él bajo, p**o y el encargado corrió una cortina que aislaba el estacionamiento. Lo vi caminar hacia mi puerta, la abrió y me ofreció la mano, la acepté. Camino a las escaleras, él se paró delante de mí y empezó a subir, abrió la puerta, entró, me dejó pasar y cerró. Me encaminó hacia dentro de la recámara, me soltó y fue al baño sin decirme una sola palabra. Yo me abracé a mí misma, en serio estaba muy nerviosa. No es que nunca hubiera estado en un motel pero definitivamente nunca me habían tratado así. Salió del baño y me preguntó si necesitaba usarlo, solo me di la vuelta y entré al baño. Oriné, me lavé las manos y palmee mi cara con agua, con un pedazo de papel acomodé un poco el delineador que se había corrido por él tiempo, debo cambiar de marca. ¿En serio me voy a acostar con él?, o sea ya estoy aquí. Me parece ese tipo que si decido que quiero irme no le importará; no, no creo que él sea así. Espero. Salí del baño y solo sentí como me aventó contra la pared y empezó a besarme muy fuerte mientras con sus manos estrujaba mi cintura. No te vendría mal subir un poco de peso, estarías deliciosa. - me dijo entre el beso. Es cierto, había bajado muchísimo de peso gracias a una terrible depresión provocada por mi ex novio. Su comentario me hizo sentir mal y volteé la cara escapando de su boca. ¿Por qué te quitas? No me gustó tu comentario Solo es lo que pienso No me gustó que lo dijeras Ok - comenzó a besar mi cuello y yo quise empujarlo, pero me besó con más fuerza - Me excitas, solo dije lo que pensé que te haría más deliciosa. Solo pensaba lo rico que sería tú trasero - me apretó las nalgas con fuerza - si fueran más grandes; podría nalguear y apretarte. Eché la cabeza hacia atrás, estaba súper excitada. Cuando hice eso él empezó a morder y besar mi cuello para después bajar a mis pechos y morderlos sobre la blusa. Mmmm - gemí y él mordió más fuerte Que rico gimes
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