La Reina Malvada del Castillo

8- Por la mañana

Acostumbrada a despertar muy temprano, la mujer abre los ojos esa mañana, lo primero que hace es observar todas las cajas y ropa que la rodean por todos lados.

"Creí que habia soñado todo esto y que despertaria de nuevo donde vivia antes."

Piensa ella apartando la colorida frazada nueva que utilizo para cubrirse, sentada a la orilla de la cama observa a detalle las cajas cerradas sin tocarlas.

"Esos hombres si que aman a las chicas."

Se dice a si misma mientras lee algunas de las tarjetas escritas por esos hombres, en todas ellas declaran su apasionado amor por cierta princesa.

"Necesito ir al baño."

Piensa la mujer cuando la sensacion apremiante invade su cuerpo por lo que esquivando los regalos y ropa regados en el suelo ella logra llegar a la puerta, abrirla en silencio y salir de la pequeña habitacion atiborrada.

Cuando esta fuera ella puede observar gracias a la luz solar el amplio pasillo por el que camino en la madrugada.

"Que maravilla."

Susurra emocionada ella susurro al sentir el suelo de madera del pasillo.

"Que puertas tan hermosas."

Medita ella mirando detenidamente frente a dos puertas de madera decoradas con el nombre de cada una de las chicas que duermen ahi.

"Creo que este es el baño."

Abriendo la puerta que no tiene un nombre pegado fuera, la mujer se asoma un poco, temerosa de equivocarse y entrar a un lugar prohibido.

"Si es!"

Se emociona al ver el limpio baño, por lo que cerrando con seguro la puerta entra para aliviar la creciente presion en su vejiga, mientras esta sentada en el primoroso excusado la mujer admira todo lo que se encuentra en el lugar, tanto el mobiliario como las decenas de productos de belleza, shampoos, jabones liquidos y en barra y diversas botellas que parecen costosas y de las mejores marcas, pero ella no sabe para que son o como se usan.

"Vaya, esas chicas si que son afortunadas."

Determina la mujer despues de acabar su asunto y dejar limpio el baño para que alguien mas lo use, mientras lava sus manos con el jabon liquido de baño que huele a vainilla ella se mira al espejo.

Es la primera vez que no observa el miedo reflejado en sus ojos o la decepcion y cansancio en su rostro, a pesar que trabajo hasta altas horas de la noche.

"Que mierda?"

Ella escucha la voz de Bishop antes que observe que la perilla de la puerta se mueve para intentar abrir.

"Lo siento, ya salgo!"

Se apresura a disculparse la mujer antes de abrir la puerta, el chico quien ahora usa un pantalon azul de pijama sin camisa bosteza mientras frota sus ojos debido al cansancio que aun siente esa mañana.

"Oh eres tu esclava, que haces en mi baño?"

Cuestiona el chico quien deja de frotarse los ojos antes de brincar del susto porque habia olvidado un poco el aspecto de la mujer.

"Lo siento, tenia ganas de ir al baño y pues no sabia donde estaba asi que camine y encontre este asi que lo use."

Se disculpa la mujer, el chico suspira antes de observar dentro como buscando algo.

"Todos tenemos baño en nuestras habitaciones, este baño es mio, mi habitacion esta al lado."

Señala el chico quien abre la puerta por completo.

"En que lugar te metio Pastor?"

Cuestiona el chico con voz ronca y los ojos semi cerrados.

"Dormi en la ultima habitacion del pasillo, la que esta llena de regalos y ropa."

Responde la mujer señalando el lugar de donde vino.

"Descubrio nuestro escondite, estoy seguro que querra que tengamos una reunio para tratar ese asunto."

Se queja Bishop antes de suspirar derrotado.

"Regresa a tu lugar, ire por ti mas tarde para llevarte al comedor, el chef aun no te conoce, debo prevenirlo de tu..."

Bishop mira de arriba a abajo a la mujer quien luce tan ridicula con esa pijama rosada que le queda holgada al estar tan delgada, ademas el color tan encendido resalta su marchita piel y cabello.

"Bueno de ti en general, ahora vete, tendre que lavar el baño y todo lo que tocaste antes de usarlo."

La mujer obedece y camina de regreso a su habitacion al fondo, pero se detiene en la ultima ventana para ver fuera pues no puede creer la belleza del lugar!

Afuera se aprecia verde jardines con arboles altos color verde oscuro, flores de diferentes colores y tamaños ademas de una amplia fuente de piedra en medio de todo, pero que mas llama su atencion es que el edificio donde las chicas atienden a los clientes en realidad si parece un castillo por su arquitectura y diseño!

Asombrada por lo que sus ojos le muestran, la mujer contempla todo hasta que escucha una puerta que intenta abrirse por lo que corre a meterse a su lugar y esperar en silencio sobre la cama.

Sin forma de saber el tiempo en ese lugar porque no tiene reloj alguno para saber que hora es, la mujer decide hacer algo que no habia hecho nunca en su vida entera, descansar en la cama despues de despertarse, asi que recostada sobre su lado izquierdo ella se cubre con la frazada mientras trata de contar los regalos apilados contra la pared.

Solo unos minutos despues el sueño de nuevo se apodera de ella, pero entonces unos toquidos en la puerta aunados a una vocecita femenina la despiertan de nuevo.

"Ya voy."

Responde en voz alta mientras aparta de nuevo la frazada, coloca los pies en el piso, esta vez no le importa patear algunos regalos antes de abrir la puerta.

"Estabas dormida de nuevo?"

Cuestiona Bishop quien esta acompañado de una de las chicas quien mira con lastima a la mujer.

"Si."

Contesta ella antes de ahogar un bostezo.

"Oh dios, habia olvidado toda la basura de este lugar."

Declara la chica mirando dentro el inmenso caos de regalos.

"Ni lo menciones, Pastor seguramente nos impondra un castigo por haberle ocultado esto."

Se queja Bishop porque conoce a su jefe.

"Tengo una idea, Pastos no nos castigara, confia en mi."

Declara la chica con voz angelical, Bishop se muestra incredulo.

"Espero que tengas razon, Elsa le enseñara su baño y le dara algo de ropa para que se cambie, el almuerzo esta por servirse, dense prisa las dos o se quedaran sin comer."

Bishop informa a la mujer antes de marcharse.

"No temas, no todas somos tan malas y groseras como Aurora, ni tampoco nos creemos reinas en este castillo de degradacion."

La voz de la chica ahora causa un poco de tristeza en la mujer quien recuerda que es lo que hacen para ganar dinero y lo maltratadas que quedan cuando "su señoria" se marcha.

"Se supone que detras de todo esto se encuentra la puerta del baño..."

Comenta la hermosa chica quien aparta sin preocupacion alguna los paquetes hacia fuera de la habitacion.

"Si, aqui esta!"

Se alegra la chica antes de tomar la perilla de la puerta e intentar abrirla, despues de varios intentos por fin la abre, el olor a humedad y viejo satura el ambiente.

"Creo que no se habia abierto este lugar en años."

Declara la chica mientras cubre su nariz con su mano mientras mira el sucio lugar, pero para la mujer es mas de lo que esperaba.

El pequeño cuarto cuenta con una taza de baño de color indefinido debido a la suciedad, un lavabo de manos salpicado de sarro blanco, el piso esta lleno de moho n***o en las esquinas pero lo que mas llama su atencion como un iman es la bañera en medio de la habitacion la cual tiene sus propias llaves y regadera.

"Es precioso."

La chica no puede ocultar su asombro al escuchar lo que la mujer asegura.

"Mas tarde te dire donde se encuentran guardados los productos de limpieza para que puedas lavar tu baño, nosotras nos encargamos de la limpieza de nuestros baños."

"Por ahora date prisa en cambiarte, tengo hambre y quiero comer algo diferente a fresas bañadas con chocolate."

La chica busca entre la ropa tirada algo que pueda darle a la delgadisima mujer, cuando encuentra algo de talla muy chica lo mira un momento antes de entregarselo.

"Esto servira, el color azul oscuro te favorecera y la tela es suave, date prisa, saldre para darte privacidad, no te preocupes por zapatos, podemos andar descalzas en la casa."

Informa la chica antes de salir de la habitacion, la mujer observa la ropa deportiva pegada al cuerpo, por lo que quitandose la pijama rosada para doblarla y dejarla en un rinconcito de la camita individual, la mujer toma ropa interior limpia del rincon donde la vio cuando ayudo a Pastor a pegar los regalos a las paredes.

Solo un par de minutos despues sale para encontrarse con la chica quien sonrie de forma triste antes de indicarle que caminen rapido porque la primer campana ya sono.

"Es tarde!"

Grita la chica por lo que echa a correr, la mujer la sigue lo mas rapido que puede aunque no puede correr como ella.

Pronto se les unen dos chicas más quienes corren y rien, la mujer rie tambien contagiada por la alegria femenina, pero frena su carrera al ver el gran y lujoso comedor frente a ella!

***By Liliana Situ***

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