-Dovete sapare dove il vostro hid.- Antonio y yo nos vemos como si nos saliera dos cabezas.
- ¿Ése el que está hablando, no es Ángelo? - Le digo lo más bajito, ya que se escuchan varias voces de hombres, por su tono se escuchan cabreados.
-Creo que si Fani. - Me dice acercándose a mí, camino hacía donde se escuchan las voces, me quedo en un lado dónde no me vean, Antonio me está jalando de mi brazo para que me aleje, le estoy dando manotones para que se quedé quieto.
-Fani, no este husmeando. - Me gruñe.
-Sussuuchuu. - Le hago poniendo mi dedo en mis labios, para que se calle.
-Estás loca, si no descubren la que se nos va a armar es grande. - Dice ya desesperado, también se para aún lado ocultándose para que no, nos vean.
-Sí, pero también quieres saber. - Me mofo de él a verlo muy pendiente de la conversación que no entendemos, porqué hablan en italiano, hay una mujer y tres hombres más con Ángelo y Francesco, uno de ellos es un afroamericano alto y bastante musculoso, los otros dos no lo vemos bien, Ángelo y Francesco los tapan, están en toda la puerta del despacho de la casa.
- ¿Quiénes serán esos hombres y esa mujer hermosa y elegante? - Dice Antonio intrigado.
-Y yo qué sé. - Le digo entre risas, Francesco entra de nuevo al despacho y se puede ver a uno de los hombres, mis ojos se abren más de lo normal, porqué creó que estoy viendo un fantasma, siento la mano de Antonio que está en mi cintura se tensa, sé que está igual de impresionado que yo. -Antonio creo que estoy viendo a un Fantasma. - Le digo con mi voz entrecortada, él no dice nada quito la mirada al hombre y la llevo a la de Antonio, su mirada está ida sé que está muy sorprendido.
-Se parece mucho a. - Dice, pero no termina de hablar, vuelvo mi mirada a los chicos, si se parece mucho a Rodrigo y si es ¡Dios Mio!, tengo que salir de la duda, me dispongo a ir a verlo de frente, Antonio no me deja, agarra de mi brazo tan fuerte y me arrastra hasta el baño, hacemos tanto ruido que sé que nos escucharon.
-Estás loca. - Me gruñe pegándome a la pared del baño.
-No Antonio, tengo que salir de la duda. - Le digo desesperada.
-Rodrigo, está muerto.
-Y si no y si está vivo. - Le digo ya poniéndose un nudo en mi garganta.
-Fani, Rodrigo va para cinco años muerto, nosotros lo enterramos. - Tata de que me calme.
-Sí, pero recuerda que nunca lo reconocimos, porqué se quemó en el accidente del coche. - Le digo ya moviendo mis manos como loca.
-Hermanita Rodrigo se murió, él jamás nos haría algo así.
-Lo sé, es que pensé que podría ser él. - Pongo mis manos en la cara, llorando descontrolada.
-Vamos Fani, no te pongas así. - Me abraza consolándome, después de pasar un rato metidos en el baño, salimos y cómo siempre el universo conspira en mi contra, me consigo a Ángelo y Francesco en el pasillo, se me quedan viendo como si me saliera dos cabezas y para el colmo, sale Antonio detrás de mí, Ángelo lo ve y su cara de sorprendido a cabreado.
-Fani me has manchado la camisa de tú maquillaje. - Dice Antonio sin ver a los chicos está limpiado la mancha, no digo nada Francesco tiene una sonrisita que provoca es arrancársela a patadas, Ángelo está muy cabreado y yo, estoy que quiero que se abra la tierra y me trague.
-Es que por lo menos ayud. - Dice Antonio, pero no termina al subir su cara y ver a los chicos delante de nosotros.
- ¿Divirtiéndose? - Dice Ángelo sarcástico, mátenme, mátenme, mátenme ahora mismo, Dios me imagino que pensaría que estábamos teniendo sexo.
-Sí nadar entre vómitos y lágrimas para ti eso es divertirse, entonces para la próxima acompáñala tú. - Dice Antonio sarcástico y saliendo del pasillo, Francesco se ríe a carcajadas y se va también, Ángelo le cambia su cara y ahora es de preocupado.
- ¿Todo bien? - Se acerca.
-Sí, es que mi estomago no resistió toda la comida y quiso salir. - Le digo sarcástica.
- ¿Por qué estabas llorando? - Me dice intrigado a él no se le escapa nada.
-Es que estoy emocionada por los chicos y el embarazo, me está dando por llorar por todo. - Le oculto la verdad, él se ríe y pone una mano en mi cuello, cierro los ojos y suspiro a sentir el calor de su mano. -Cómo quisiera que el mundo se detuviera cada vez que estamos juntos y que todo lo que nos separa, se borren para siempre. - Le digo aún con mis ojos cerrados.
-Nena, pronto volveremos a estar de nuevos juntos. - Me susurra en mis labios, nos besamos….
L. R.