Capítulo 14.

954 Words
Leyssi D'Luca. A paso rápido salgo de la casa de mi mate, mi pecho duele, corro hacia el bosque y sin esperar me transformó. Acelero, tengo que llegar, a medida que más me acerco el olor de la sangre se intensifica. Por un momento freno ya que todo me da vueltas debido a mi poca energía ya que la implementamos para que, Maya, estuviera presente pero sin que mi cuerpo cambiara. Todo el día la que estuvo hablando y compartiendo con él fue mi loba, yo solo escuchaba, Maya, quería hablar con él y la entiendo, nos conoce en forma de loba cuando ella está presente pero ella quería hablar con nuestro mate. «Estoy segura que él se dió cuenta del extraño comportamiento .—Maya, jadea. Estamos muy cansadas, trotó hasta llegar a la manada, respiro profundo y saltó las rejas, sigo el olor de la sangre. «Nuestro mate no es bobo .—Le digo. «No lo es — Me acerco a un árbol volviendo a mi forma humana y tomo la ropa que dejan los demás integrantes de la manada. No es mi ropa pero debo saber que sucede. Camino por la manada y me extraña la soledad que hay, apenas son las nueve de la noche y todo está muy solo, sigo el camino hasta llegar a una casa de color blanca, algunos guerreros están afuera y divisó a mis hermanos. El olor de la mate de mi hermano se hace presente y me acerco preocupada. Me acerco viendo cómo están mis otros hermanos, me acercó y mi pulso se dispara, hago una mueca de asco. —¡Diosa! —Exclamó horrorizada. Ethan nos mira y el dolor en su mirada nos golpea, mi pecho sube y baja rápidamente. Mi padre grita órdenes pero no las escucho solo me concentro en la sangre, y las nota que está aún lado de la cabeza del padre de la mate de mi hermano. ¿Quién se atrevería a atacar nuestra manada? ¿Quien es tan loco para hacer esto tan atroz? No me importa solo corro lejos, corro hasta que mis pies se cansan, levanto la vista y observo la luz del cuarto de mi mate encendida. El miedo me invade, miedo de que algo malo le pase a él, miedo a perderlo. Me escondo detrás de un árbol cuando el se asoma a la ventana. «Nos espera .—Maya, dice con una débil sonrisa. No puedo transformarme, mi energía está muy débil. «Tan solo si pudiéramos marcarlo, sentiríamos sus miedos y sus sentimientos todo .—Ignoro lo que Maya dice. Cierro mis ojos cuando pero con mis instintos alertas. °°° Abro mis ojos cuando un ruedo me alerta, me levanto y miro a ambos lado viendo como el padre de mi mate llega, me acerco silenciosamente y le sigo cuando empieza a bajar para el sótano. Me escondo detrás de una puerta y lo veo seguir por unos túneles. «Sigamos .—Maya, intenta que nos movamos pero me niego. «No, es mejor esperar algo no me cuadra de todo esto — Salimos del lugar y me concentro en proteger a mi mate, canalizo mi energía haciendo un escudo para él y su hermana. Corro de regreso a la manada y entro en total silencio, lo que menos quiero es que mi padre se de cuenta que no dormí aquí. Cuando estoy por dar un paso me encontro de frente con mi hermano, Ethan. —Estas no son horas de llegar .—Me regaña, yo solo baja la mirada, aunque él sea mayor que yo solo por veinte minutos le debo respeto, no importa si también yo soy una Alfa, él es el líder y mi respeto por el es grandes. —Si fuera Jannesa no le estuvieras diciendo eso .—Él por fin me mira y asiente.. —Tienes razón .–Le sonrió –Pero, Jannesa ya tiene mate ¿y tú? .—Trago con fuerza ante su pregunta, el recuerdo de mi rojito con sus preciosos ojos peculiares me hace suspirar. Lo miro y suspiro, quería mantener a mi mate en secreto, temo por él, pero ya no puedo, no lo puedo ocultar de mi familia. —Ya lo encontré — —Ya lo presentía Les, pero después hablamos, ve antes de que papá se enoje mucho más contigo por no llegar anoche y no dormir aquí y por llegar tarde al entrenamiento — Asiento y me alejo. «Mejor alístate, no tentemos más a la suerte, si papá se enoja es capaz y nos dejan en cama una semana, y me niego a no ver a nuestro rojito una semana entera .—Maya, lloriquea pero estoy totalmente de acuerdo con ella. Una semana sin ver a nuestro rojito. No. Me muero. Me alistó con rapidez y salgo del cuarto. «Creo que es hora de tener nuestro propio cuarto— «Si, de eso hablaremos después con mamá, Ethan ya se está mudando o ya se mudo no se — Salimos de la casa y me posicionó al lado de mi primo, Matthew, que me regala una sonrisa muy hermosa. -¿Que te tiene tan feliz? .-Le susurro. -¿Ahora no puedo sonreír? - -Si puedes, pero tú eres más cara de limón, y verte sonreír tes extraño.- -No entiendo cómo los de manada creen que tú eres las más cariñosa de todos nosotros .- -Eso se llama tener carisma y una sonrisa siempre en el rostro, cara de limón .-Muevo mi cabello -¿Me dirás por qué tan feliz? -Digamos que me levantaron de una muy buena manera .-Me dice y hago una mueca al entender sus palabras.
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