Seth regresa a la cabaña, entra en la habitación y se sorprende al verme levantada y vestida. —Realmente estás lista para salir de aquí, ¿no? —dice con una mirada compasiva en su rostro y yo solo asiento en respuesta. Se acerca y trata de ponerme los zapatos, pero le sonrío y levanto la mano, recordándole que mi mano ya está curada. —Se me olvida —dice sonriendo y me los entrega. —Has tenido que ayudarme desde que nos conocimos —señalo con una sonrisa—. Te acostumbrarás. —Estoy feliz de hacerlo —me dice gentilmente —Sabes eso, ¿verdad? —Sí, lo sé —respondo mientras termino de atarme los zapatos. —¿Han tenido una buena charla? —pregunta Robbie a Seth. Seth lo mira seriamente y asiente. —Creo que hemos llegado a algo. Me siento cómodo con eso, pero necesitaré hablar con Molly al res