Narra Bianca: Venir a este evento ha resultado tan frustrante lo era ir al dentista cuando era pequeña: lloraba, pataleaba, hacía rabietas y hasta me ocultaba debajo de la cama para no ir, pero siempre perdía la batalla contra mis padres y terminaba cediendo a su voluntad. Lo mismo sucedía en el internado, claro que los berrinches disminuyeron, aunque el temor y la frustración seguía ahí. Hoy es lo mismo. Estoy aquí en contra de mi voluntad, a pesar de mis interminables quejas, nada ha podido salvarme de tener que estar en este lugar. Después de lo vivido anoche con Cinthia y luego con Alejandro, mis ganas de vivir se han esfumado a un lugar sin retorno. No tengo amigos, no tengo familia y no tengo al hombre que amo conmigo. Lo que menos quería era tener que lidiar con gente desconocida