…hacia nosotros, yo me asuste era enorme pensé que si chocaba con el auto podía voltearnos, estaba por salir del auto con mis niños cuando recordé lo que el señor de la camioneta me dijo, me detuve y no lo hice. Después en cuestión de segundos la bola esa desapareció, las otras dos bolas continuaban en el cerro rodando, volteé para ver a mis hijos, cuando volví la vista hacia afuera ya no había nada, habían desaparecido. Suspire hondo y me acomode para seguir esperando a mi esposo que viniera por nosotros, de pronto empiezo a oír risas de varias personas, pero todas de mujer, empezaron a dar vueltas en rededor del auto y como a rasguñar el auto, se oía muy claramente porque la verdad no las veía, me quede quieta en el auto, vi a mis niños esperando que despertaran, pero ellos seguían dor