Ya todos estaban reunidos en la sala de conferencias listos para la reunión extraordinaria que había solicitado el arquitecto De La Fuente . Se escuchaba a todos murmurando, preguntándose en su mayoría de qué se trataba esa reunión. Al cabo de unos veinte minutos se abrió la puerta de la sala, haciendo su entrada triunfal el arquitecto De La Fuente, su hija Susana y Jorge quien iba a estar representándolo como su abogado. El último en entrar a la sala de conferencia fue Colate que venía con una cara de hostilidad y al que todos quedaron viendo sin entender el porqué no era él en lugar de Rogelio quien se sentaba en el puesto principal de la mesa. Todos se habían puesto de pie y el padre de Susana comenzó diciendo: — Pueden sentarse por favor. Bueno se preguntarán el porqué de esta