Apocalipsis

2. ENCUENTROS INESPERADOS

Max

Seguimos nuestro camino hacia unas mesas donde está un hombre con otros dos niños y una niña de la edad de Lily, él se gira al igual que los pequeños, noto que la niña le dice algo a los otros dos y estos se van corriendo muy felices, entonces ella viene corriendo hacia Ragnar saltándole encima igual que hizo Lily.

Al tenerla más cerca me percato que es su gemela, son idénticas en todo con la diferencia de que ella tiene sus ojos miel y sus cicatrices están en brazos y rostro, incluso falta un pequeño fragmento de su cabello al frente, pero eso no evita que ría con gran euforia denotando al primer instante la diferencia en sus personalidades.

—Mamá no sabía que venías, papá dijo que no estarías aquí ¡Papá eres un mentiroso!

Grita la pequeña a aquel hombre que viene caminando hacia nosotros con su mirada endurecida. Es muy alto quizá unos centímetros más que yo, bastante fornido, piel canela con varios tatuajes, ojos miel, barba y cabello largo color castaño.

—No sabía que vendría por eso te lo dije pequeña —responde él.

—Es cierto hermosa, vine de improvisto para traer a alguien que quería conocer el lugar, así que permítanme hacer las presentaciones —me mira y señalando uno a uno los va presentando.

—La pequeña en tus brazos ya sabes que es Lily la cual es gemela de esta hermosura llamada Victoria, pero Vicky de cariño y este fortachón con ganas de matarte es Nicolay Romanov. Chicos, él es Massimo D’Porti.

Al escuchar ese nombre sentí una montaña rusa de emociones recordando todo lo que ella me había contado hace unos días, ahora entiendo por qué dijo ese "interesante" hace un momento y es que parece un mal chiste de la vida que justo ahora nos encontremos con él en este lugar, igual evito mostrar cualquier emoción o acción que pueda ponerme en evidencia.

—Mucho gusto, puedes decirme Max.

Me dirijo primero a Vicky quien me da su mano y me analiza de pies a cabeza como si quisiera hacer una travesura, a diferencia de Romanov que se nota y quiere decapitarme, pero igual no perderé la cordura y mis modales por un arrebato. En cuanto a él, le extiendo mi mano presentándome formalmente ya que está muy claro que de aquí no saldremos siendo amigos.

—Mucho gusto, Massimo D’Porti.

—Nicolay Romanov —dice con gruesa voz de mando.

—¿Eres el novio de mamá? —pregunta Vicky sacándonos a todos de lugar y más con la tensión que se estaba haciendo entre nosotros. —porque de una vez te digo Max que si es así, primero necesitas el permiso de mi hermana y el mío, hasta entonces no podrás ser su novio —inteligente la pequeña.

—Interesante ¿y qué debo hacer para obtener el permiso de ustedes dos?

—¿En serio quieres ser el novio de mamá? —me pregunta Lily con mucha inocencia.

—Me encantaría serlo, pero si primero necesito el permiso de ustedes dos entonces adelante, díganme qué hay que hacer.

—Me gusta eso Max, entonces ven con nosotras te diremos qué hacer.

En eso Vicky baja de los brazos de Ragnar para tomar mi mano mientras llevo a su hermana cargada en mi otro brazo y nos alejamos de mi noche y Romanov.

(…)

Ragnar

Vemos al trío alejarse muy felices. Ese hombre no sabe que se ha metido en muchos problemas con ese par, pero al menos me darán tiempo para hablar con Nick quien no ha quitado su mirada de Max desde que nos vio llegar.

—Así que es él... y por tu rostro y sus últimas palabras, diría que las cosas van bastante en serio entre ustedes.

—A mí también me encanta verte de nuevo Nick —respondo con ironía.

Es el colmo que este hombre vaya a hacerme una escena de celos en este lugar.

—Lo siento Zarina es solo que no me esperaba esto, ven aquí preciosa.

Nos damos un abrazo como hace mucho tiempo no lo hacíamos, pero bien necesitábamos, y por supuesto, esos labios no iban a continuar lejos de los míos muchos segundos más y menos ahora que había visto a Max. Es típico de él que marque su territorio, aunque me encanta ponerlo celoso para verlo en esa fase dominante.

Nos sentamos en la mesa que estaba hace un momento mientras vemos a esos tres en una batalla campal.

Si hay alguien a quien no le mentiría sería a Nicolay y Alexandre, ellos son dos personas muy importantes en mi vida y siempre dijimos que seríamos honestos cuando se tratara de nuestra relación, así que le explico lo ocurrido en los últimos días puesto que él estuvo presente en las sombras todos estos años y le contaba lo que pasaba con Max, él me observa y escucha con mucha atención, hace las preguntas correspondientes y al final logramos quedar en buenos términos.

—Bueno, si ya está tomada la decisión, entonces solo queda decir que necesitará la aprobación de nuestras hijas, la mía y la de Alex.

—Vamos Nick ¿no quieres meterlo también en un cañón?

—Me encantaría más que el cañón apuntara hacia él —río negando con la cabeza.

—Nick, tú siempre vas a ser mi Zar y eso nada ni nadie va a cambiarlo.

—Y tú siempre serás mi Zarina, así que si ese imbécil se atreve a lastimarte deseará estar muerto, porque me encargaré de llevarlo al infierno en vida.

—No tengo problema en recorrerlo por ella, solo dame el día y la hora —dice Max quien aparece junto a las gemelas… este hombre es un suicida de primera.

—No vas a recorrer nada de eso Max y te prohíbo que le hagas algo malo papá —se pronuncia Lily bastante firme, al parecer quedó enganchada a él.

—Si lo lastimas, lastimarás a mamá y entonces tú serás el malo y no te perdonaré que le hagas eso a ella —completa Vicky la idea de Lily.

—Parece que todos haríamos lo que fuera por ti noche.

Qué ganas de provocar a Nick y lo mejor de todo es que yo solo puedo divertirme por ver a esos dos en guerra. Me pregunto qué tal será poner a esos tres en un cuarto... Solo de pensarlo no puedo evitar morder con fuerza mi labio.

—Cancela esa idea por completo Ragnar Wintar porque eso no pasará —eso me encanta de Max, no necesito decirle algo porque él ya lo sabe sólo con mirarme.

—Qué aguafiestas Max, mejor vámonos chicas, tengamos un momento madre e hijas.

Ya veremos si sigue pensando lo mismo cuando tenga a los tres encadenados y desnudos.

(…)

Max

Esas pequeñas son increíbles, estuvimos hablando en lo que hacía algunas actividades un poco locas que se les iba ocurriendo, sobre todo a Vicky, me demostraron el cariño tan grande que le tienen a Rag y me contaron un poco de sus vidas en el orfanato, pero algo que me dolió bastante fue la forma en la cual se expresaron de sí mismas, especialmente por sus cicatrices.

Es terrible que piensen tan mal de ellas cuando tienen una energía impresionante, son muy inteligentes, bastante audaces y se nota desde ya que no serán chicas fáciles cuando crezcan, es por eso que fui honesto con ellas y les dije que sus cicatrices no debían ser importantes en sus vidas, eso no definía quiénes eran ni la belleza que tenían, porque aun con eso, ellas son hermosas.

Al cabo de media hora de hacer varias cosas, les dije que fuéramos con sus padres para tomar algo y descansar un poco, pero en realidad no me fiaba mucho de Romanov, vi cómo había besado y abrazado a Rag y no negaré que me dolió un poco, pero sé cuánto significamos él y yo en su vida, así que no tengo nada de qué preocuparme.

Luego de intercambiar algunas palabras y verlas marcharse juntas, me senté para hablar con él y dejar en claro varias cosas.

—Tienes unas hijas maravillosas Romanov y lo digo en serio.

—Lo sé, son las más inteligentes y hermosas de todas —dice con seguridad y orgullo, se nota que en verdad las quiere.

—He escuchado mucho de ti y la verdad no creí que te encontraría justo hoy en este sitio.

—Opino lo mismo, pero ya ves, la vida es una perra de vez en cuando. Dime algo D’Porti ¿realmente estás dispuesto a lo que sea por esa mujer?

—Lo que sea Romanov, lo que sea, ahora tú dime, más que una simple amistad realmente la sigues amando ¿no es así?

—Desde el primer momento en que la vi y hasta después de mi muerte, por ella soy capaz de hacer lo que sea —sonreímos de lado por su respuesta.

—Su vida empezó siendo un martirio, pero si lo miras en retrospectiva, también ha sido muy afortunada desde que salió de ese lugar.

—Sí, aunque también le ha costado sangre, sudor y lágrimas llegar a donde está.

—Lo sé, por eso quiero proponerte una tregua, no me interesa que seamos los mejores amigos Romanov, pero sí quiero que al menos nos podamos llevar con respeto frente a ella y sobre todo, frente a las gemelas.

—¿Creí que me dirías que me alejara de su vida?

—Eso sería estúpido de mi parte porque sé que no lo harás y prefiero tenerte por las buenas en nuestras vidas, a convertir la de ellas en un infierno solo porque no podemos ser adultos de verdad.

—Es cierto, eres tal y como ella te ha descrito estos años, pero estoy de acuerdo, la felicidad de ellas es lo primero para mí así que tenemos un trato D’Porti, ya veremos qué tal te va con Alex y no pienses que solo por eso me voy a rendir con ella.

—No espero que lo hagas, aunque me harías más fácil el trabajo.

—¡Vaya! cuánta testosterona tenemos aquí —menciona Ragnar muy divertida al volver con las gemelas.

Y es verdad, si los ojos de Romanov y los míos lanzaran rayos, la tormenta sería fuerte.

—Mami, ¿qué es tre… tes… tle… ash, eso que dijiste? —pregunta Vicky ofuscada al no poder pronunciar la palabra, lo que la hace ver más hermosa.

—Es una hormona cariño, luego te explico, mejor ustedes vayan a hacer algo productivo y se presentan con Laura para servir la comida de todos, y no se olviden de la nuestra.

Romanov y yo nos quedamos mirando y es como si pudiésemos decirnos todo en medio de ese silencio, pues estamos dispuestos a lo que sea con tal de defender nuestra posición frente a la mujer que amamos.

(…)

Los hombres se alejan dispuestos a dar el todo por el todo para quedar como el mejor hoy, Ragnar y las gemelas quedan sentadas hablando, Vicky le menciona que su padre no está feliz con la llegada de Max y no le gusta verlo cerca de su madre. En tanto Lily, lo defiende diciendo que Max es una buena persona que las ha tratado con cariño y respeto, pero sobre todo, no las ve con asco, rechazo, ni lástima.

—Cuando le dije que mis cicatrices me hacían ver fea al estar en mi rostro, él dijo que no era verdad y que debía ver lo bueno que había traído esa mala experiencia, a siempre estar con la frente en alto y que era muy hermosa —dice Vicky.

—Así como papá es tu novio también dejaré que Max lo sea mami y se nota que te quiere mucho, te mira de la misma forma en que lo hace papá, los dos tienen un brillo en sus ojos al verte y siempre sonríen —afirma Lily con ternura.

—Yo no quiero darle la oportunidad tan rápido, pero pienso lo mismo que Lily así que también tiene mi permiso.

Ragnar las veía con una gran sonrisa al ver que ellas habían aceptado a Max igual que a Nicolay, las abrazó y le dio un beso a cada una con mucho amor.

—Ustedes dos son un peligro mortal cuando están juntas, pero hagamos que el día de hoy sea más entretenido, si voy a tener dos novios, entonces veamos cuánto podrán hacer para vernos felices a las tres.

Ellas se miran con complicidad entre sí mientras tienen las ideas más locas para llevar a esos dos al límite.