Mejores Amigos=Idiotas Sin Sentido

Capítulo 5

Cinco días después...

—¡Te di un hermoso hijo! ¡¿Qué más querías?!— Min Seok le gritó a punto de darle un zape pero se contuvo ya que estaban frente a la profesora de su pequeño.

—¡Sexo!¡No me dabas sexo!— dijo plenamente sincero mientras bufaba cruzándose de brazos molesto ya que consideraba que aquello fue el factor fundamental para que sacara los pies del plato (literal) aunque la verdad fuera que era un mujeriego de primera.

Min Seok abrió enormemente los ojos enojado porque, ¿Cómo se atreve? Por ello y como si lo dicho por su futuro ex esposo no fuera suficiente agregó un "delicado"...— ¡Es que la tienes chiquita!— mencionó sincero, tan sincero que señaló al amigo de su esposo e hizo una señal con sus dedos indicando que la tenía del tamaño de un...— Chisito.— rodó los ojos antes de posar su mirada hacia la profesora quién los veía con una expresión en blanco y eso que aún no escuchaba la defensa del señor Oh.

—¡¿Chiquita?! ¡¿Chisito?! ¡Dijiste que era un tigre en la cama!

— Fingía, ya sabes, para hacerte sentir bien, dah, eras mi esposo.— bostezó mientras miraba sus uñas, casual.— Aunque, debo aceptar que la primera vez me dejaste escaldado.—admitió sincero ya que lo que era, era y debía aceptar aquel hecho, ya que esa noche hicieron a su hijo y aunque no recordara nada pues él realmente no podía caminar al día siguiente porque le dolía el culito.

—¡Pues no pensabas lo mismo cuando te bailaba sex...— se calló al escuchar a la profesora aclararse la garganta.

—Muy bien, ya escuché suficiente, aunque lo único que les pregunté fue cómo se lo dirían a Suk pero ya que me han contado con detalles sus conflictos como si yo fuera su psicóloga pues...— ella sacó una tarjeta de su libreta y se los entregó.— Arreglen una cita con ella, es una psicóloga y es mi amiga, estoy segura que los ayudará, con respecto a Suk, el los quiere mucho por lo que les aconsejo que se traten bien frente a él, no creen escenarios en su cabeza a propósito, es un niño de cuatro años que lo único que desea es jugar con sus juguetes sin estrés.— Ella les sonrió antes de dar por finalizada su pequeña reunión.

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—Joven Byun, lo veo en mi oficina.— el profesor Park habló serio y el chico del delineado suspiró cansado ya que parecía que a ese hombre nada le hacía feliz.

— En definitiva, no ha cogido nunca en su vida, apuesto a que todavía es virgen.— murmuraba divertido mientras caminaba hacia la oficina de su asesor.

Tocó la puerta y la abrió cuando escuchó la gruesa voz de Park diciéndole que entre.— Cierra la puerta y siéntate en el sofá, terminaré en dos minutos.— dijo sin despegar la mirada de su computadora, su profesor era guapo, debajo de aquellas gafas había todo un galán, Baek se quedó apreciando sus facciones por largos minutos hasta que se dió cuenta del lunar que Park tenía sobre su mejilla derecha, era la primera vez que se daba cuenta de la presencia de aquel lunar y eso que lo ha tenido varias veces demasiado cerca.— ¿Desea preguntarme algo joven Byun?— su voz seguía sonando seria.

— ¿Eres Virgen?— soltó de golpe arrepintiéndose al instante, abrió la boca de la vergüenza queriendo que la tierra se lo comiera, su profesor lo miró por unos segundos antes de pararse de golpe y caminar en su dirección "Soy pato muerto, soy pato muerto, soy pato muerto" se repetía una y otra vez mientras apretaba los dientes listo para escuchar una putiza de su profesor quién se paró frente suyo con su imponente presencia.

— ¿Qué?— se cruzó de brazos y agachó un tanto hasta quedar a la altura de su alumno buscando intimidarlo.

Baek tragó duro y aunque con las demás personas se le fuera demasiado fácil ser un hijo de puta descarado, no se explicaba cómo aquella parte de él no salía a flote cuando se trataba de Park Chan.— Emm, nada, ¿Por qué, dije algo?— rascó su nuca.— Vaya, creo que hablé en voz alta.— rió nervioso.—¡Ohh, claro! Estuve pensando en mi amigo, le preguntaba si era virgen en mis pensamientos, qué loco, ¿No?

—Muy loco.— su profesor continuaba mirándolo logrando ponerlo nervioso.— Creo que el hecho de que tu amigo sea o no virgen no es de tu incumbencia, digo, las personas entrometidas no son bien vistas joven Byun, y menos, proveniente de un joven como usted quién en vez de pensar en tonteras debería ordenar adecuadamente los anexos de su tesis.— mencionó aquello antes de volver a su lugar frente al computador.

¡Mierdaaaaa! Gritó Baek internamente.

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Cinco años atrás...

Min Seok corría muy emocionado con un sobre en la mano, era muy feliz, podría gritar de la felicidad en aquel momento, él llegó frente a una puerta y tocó muy rápido, esperó unos minutos hasta que la puerta se abrió dejando ver a un muy somnoliento Lujan.— ¿Qué suce...¡Aahhh!— No pudo decir nada más ya que Min Seok saltó sobre suyo y ambos perdieron el equiliquio hasta caer al suelo.

El ciervo se quejó ya que realmente golpeó su espalda pero al ver la amplia sonrisa de Min Seok todo dolor de disipó.— ¡Mira lo que me llegó!— de inmediato le mostró el sobre muy feliz, Lujan lo cogió antes de abrirlo y ponerse a leer.

— ¡¿Bromeasss?!— lo miró entre emocionado e incrédulo, su amigo lo había logrado, había logrado ingresar a la Universidad de Pekín.— ¡Minnie, muchas felicidades!— lo estrechó con mucha fuerza entre sus brazos antes de besar sus regordetas mejillas, Min Seok también envolvió su cuerpo con sus brazos y así permanecieron por un largo tiempo.

— Estoy muy feliz, por fin dejaré esta ciudad.— el más bajo dijo sincero, él moría por disfrutar de otros aires y ciudades.— Quiero decir, dejaremos esta ciudad.— miró al ciervo fijamente a los ojos.— ¿Ya te contestaron de la Universidad?— Lujan negó con una sonrisa.

— Aún no, pero todavía no pierdo la esperanza.

— Lo harán, o sino, les partiré la cara por idiotas.— Lujan se rió ya que su amigo a pesar de querer verse como un malote, ante sus ojos siempre se vería adorable.—Oh, espera...— Min Seok alzó su mano y fingió que había algo en la mejilla del ciervo, ya saben, siguiendo los consejos de Baek sobre cómo seducir a un hombre, su amigo le había dicho perfectamente "Ellos aman las expresiones adorables" "Simula que tiene algo en el rostro y acaricia su mejilla como seduciéndolo" "Saca puchero, ellos se vuelven locos con eso" "Pégate lo más que puedas y míralo con ternura" "Trata de ponerte en bandeja de plata para que él no se resista y te bese"

Y eso, es lo que precisamente estaba haciendo, sus rostros estaban muy cerca, Lujan sudaba mucho, gritaba por un vaso de agua para que lo enfríe y Min Seok saltaba celebrando su próximo triunfo internamente.— Emm...— se aclaró la garganta.— ¿Q—qué se cuenta Se Hun?

— No lo sé y no me interesa, parece amar a su moto más que a su vida.— él no se apartaba y Lujan tenía tantas ganas de arrinconarlo pero usaba todo su aucontrol para no hacerlo ya que Min Seok probablemente nunca volvería a hablarle después de eso, Lujan no entendía de pistas, él dejó ir aquella oportunidad una vez que el bollo se alejó con un suspiro de derrota.— Bueno, creo que volveré a casa.— lo miró de reojo.— Lu...— miró hacia sus dedos.— ¿Te gusta alguien?— "¿Y por eso no correspondes a mis señales?"

Lujan suspiró y asintió.— Me ha gustado la misma persona desde que estaba en primaria.— lo miró aunque Min Seok siguiera con su mirada en sus dedos.— Pero, él se merece a alguien mejor que yo.— mencionó triste.

— Pues qué afortunado ese puto.— Murmuró para sí mismo.

— ¿Eh? ¿Dijiste algo?

— No, nada.— y así se fue a casa.