18 | Él es mío y yo soy suya |

1427 Words
SANDY Un mes. Hoy es un mes desde que nos conocimos y hasta ahora no hemos podido dejar de vernos. Aunque tenía mis reservas al inicio, luego del fin de semana donde nos conocimos el lunes y el martes no lo vi ya que aún no quería que me visite en casa o en la universidad. Pero no pasó mucho tiempo ya que mis ganas de verlo eran más fuertes que terminé almorzando con él algunos días entre clases. También me ha visitado en casa y los sábados nos ha acompañado a visitar a mamá. Cada vez que veo como ellos hablan, me ilusiono más de él. La mayoría de los chicos con los que he salido antes no entendían lo importante que es mi madre para mí. Pero William lo entiende e incluso lo comparte. Siento que cada día mis sentimientos avanzan más y siento cosas más fuertes por él, pero no me he atrevido a preguntarle si él siente lo mismo. Hoy vendrá a recogerme del Eclipse, le dije a Lis si puedo irme con él unas cuantas horas para cenar, conversar y dijo que está bien. Pero yo no quiero llegar hasta mañana, necesito más de él y hoy lo quiero tener. … Desde que lo vi llegar mis ganas de él no han disminuido. Estos días he tenido más ganas que antes y hoy definitivamente no podré resistirme. Lis no viene hoy porque está un poco enferma. Le deje una nota que me quedaría con William esta noche, espero no la vea hasta muy tarde ya que si la ve ahora es capaz de venir a buscarme. Yo se que ella dijo que tenía que tener cuidado, pero ya hemos tenido intimidad así que no veo el problema de volverlo a hacer. ¿Qué podría salir mal? Él no me ha insistido o insinuado querer tener sexo, pero … los hombres siempre tienen ganas ¿no? Al menos eso es lo que dicen mis amigas en la universidad. … Llegamos a su departamento y lo único que quiero es arrancarle la ropa, pero al mismo tiempo me siento ansiosa y ¿si no quiere? Empiezo a seducirlo y lo logro, ya lo tengo donde quiero, pero me detiene. — ¿Quieres ser mi novia? — me pregunta, haciendo acelerar mi corazón. No lo esperaba, sé que me dijo muchas veces que quería construir algo bonito conmigo, pero ¿ser su novia? Veo sus hermosos ojos grises mirarme con anhelo, y una sensación en mi pecho nunca antes sentida se instala en él. — Si, si quiero ser tu novia — digo tocando su cabello. Él se levanta de golpe conmigo del sofá. Aferro mis piernas a su cintura mientras damos vueltas. —- Gracias, gracias amor, por aceptarme — dice antes de juntar sus labios con los míos en un tierno beso. Me dijo “amor”, nunca nadie que no sea mi mamá o Lis me ha llamado de esa manera. Intento intensificar el beso y él me deja, no puedo dejar de tocar su cuerpo y su abdomen tan duro. Lo quiero, quiero estar con él más que nada. — ¿Dónde está la habitación? — preguntó y él me lleva hacia ella. — Sandy, déjame hacerte el amor ¿si? — dice mirándome con deseo, asiento con la cabeza. Me deposita en la cama mientras pasa dejando besos por todos lados, llega a mi centro y empieza dejando besos hasta que mueve mi tanga a un lado y empieza a succionar mi clítoris, enloqueciéndome. — Willy, te necesito adentro — digo mientras el sigue entre mis piernas. — Si amor, te daré todo lo que quieras — veo como baja sus calzoncillos dejándome ver su hermosa polla, y aunque pensé que sería imposible estar más mojada empiezo a lubricar más. Veo su mano que va de arriba abajo mientras yo espero por él. Busca algo en su cómoda, pero parece que no lo encuentra. — ¿Qué pasa? — pregunto cuando veo que se baja de la cama — No tengo preservativos — dice y yo me rio — Yo me estoy cuidando, estoy sana y no he estado con nadie más que contigo — le digo y él vuelve hacia mí. — Yo también estoy sano, y como dije antes no acostumbro a tener sexo sin compromiso — dice mirándome a los ojos, es imposible no creerle. — ¿Por qué conmigo? — pregunto algo tímida, tengo miedo a su respuesta — Tu me hechizaste Sandy, desde que te vi, me sentí como un imán atraído a ti — ¿no puede ser más lindo? no puedo creer que somos novios. — William, no sé qué es esto que siento pero siento que quiero estar siempre contigo. Cuando no estas junto a mi, me siento sola. Cuando me levanto sin un mensaje tuyo me siento triste, quiero saber que estás bien y si no lo estas hacer algo para que lo estés. Quiero acariciarte y besarte. ¿Es muy rápido sentir todo esto que siento? — No mi hermosa, porque yo me siento igual. Te quiero Sandy, con todo mi corazón. — dice y siento como me derrito. Él es el hombre de mis sueños y espero que podamos estar juntos siempre. — Yo también te quiero William — lo atraigo hacia mi, y termino de quitar nuestra ropa. Se siente tan bien sentirlo así, piel con piel. Guio su m*****o a mi entrada y abro mis piernas bien para que entre en mi. — aaaaaah — decimos al mismo tiempo mientras su m*****o se desliza lentamente dentro de mí, haciéndome sentir muy llena. Y como si ambos estuviéramos en sintonía, empezamos un vaivén suave pero profundo. Siento como su polla se va engrosando más en mi interior causando una fricción deliciosa que me hace gemir fuerte. — Willy — digo susurrando y tomo su rostro y lo beso con pasión. — Eres mía, mi hermoso Zafiro, y yo soy tuyo mi amor, para siempre — dice y seguimos besándonos mientras las embestidas no paran, siento cuando tensa sus piernas y las mías empiezan a temblar, empuja mas dentro de mi y para dejar todo su placer. — Te amo — sale de mi boca y unas cuantas lágrimas se escapan de mis ojos. No pude evitarlo, simplemente salió de mis labios. Escondo mi cabeza en su pecho, ya que me siento avergonzada, pero él la toma y reparte besos por todo mi rostro haciéndome reír. — También te amo mi niña, no lo dije por no querer asustarte, pero es lo que siento dentro de mí — dice mirándome a los ojos, nunca he conocido a nadie como él y tampoco quiero a nadie más. Él es mío y yo soy suya. Siento como el pequeño Willy se mueve en mi interior, y va creciendo rápidamente. Lo siento duro y me muero por estar encima, pero ahora quiero hacerlo más rápido. Lo acomodo en la cama, y me subo sobre él. Inmediatamente sus manos van a mis pechos y empieza a jugar con mis pezones. Me atrae hacia él y se mete uno a la boca, lo jala , chupa y muerde haciéndome temblar. Yo empiezo el sube y baja con mi coño apretado alrededor de su polla. Me ayudo del respaldo de la cama para ir mas rápido y mas fuerte. — Sandy, Sandy, déjame a mi, me vas a hacer llegar muy rápido — dice tratando de moverme a un lado pero no lo dejo. Eso es exactamente lo lo que quiero, quiero ser la única mujer que desee, la única mujer quiera siempre a su lado. — ¡oh, Sandy! — grita antes de tomar mis caderas y empezar a empujar dentro de mí rápidamente. No puedo aguantar mas, y me corro sobre él en un orgasmo fuerte y potente, siento que aún está dentro de mi bombeando. — Córrete Willy, ven dentro de mí — le digo y no tarda mucho que siento su leche salir de mi coño mezclándose con mis fluidos. Deja un beso en mis labios y se levanta de la cama, me imagino que debo hacer lo mismo, e ir a asearme, pero veo que él viene con una toalla y empieza a limpiarme delicadamente. — Gracias Sandy por hacerme tan feliz. Te amo mi niña, y nunca dejaré de amarte — asiento con la cabeza aun no me recupero. Me atrae a su pecho y así me quedo dormida escuchando los latidos del corazón del hombre que amo.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD