Enamorada de mi jefe Playboy

Capítulo 4: Una sorpresa desagradable

Punto de vista de Cora

Esta semana ha pasado en un torbellino. Hay realmente mucho que aprender. Soy competente, pero el horario de Collin Lauder es muy exigente de cumplir. No es que él no tenga reuniones tras reuniones a las que asistir, además de otras cosas por hacer, sino que tiene demasiadas reuniones y cosas por hacer. Tengo que programar ciertas reuniones por la mañana, ya que es cuando todos los que trabajan aquí están disponibles, y algunas por las tardes para clientes especiales. Tengo que tener su horario planeado para las dos semanas posteriores a esta para Catherine. Ella sabe que es difícil y fue extremadamente útil al darme información sobre quiénes eran los clientes de primer nivel y quiénes definitivamente obtienen el trato de oro cuando se trata de ver al CEO Lauder.

Hoy es viernes y acabo de darle el horario a Catherine a las once de la mañana.  He estado trabajando en ello durante los últimos tres días e intenté hacerlo totalmente correcto. Tenía dominados los informes mecanografiados, el archivo, llevar los informes confidenciales a las asistentes personales a las que necesitaban ir, y todas las cosas regulares de una asistente, pero fue el horario lo que tuve que ajustar mientras esperaba en mi silla en el escritorio lateral y solo esperaba a que ella me dijera si estaba correcto o no. Ella me había dado la lista de quién vendría y cuándo querían reunirse, pero tuve que ajustar algunas cosas, ya que dos horarios de reunión diferentes no funcionaban en absoluto y habían surgido algunos problemas más.

Mientras ella ve el horario en su tableta, aprovecho un minuto para reflexionar sobre mi primera semana. Después de ir a almorzar el lunes y regresar con Coleman, la puerta de la oficina se abrió de golpe, y me encontré con uno de los hombres más guapos que creo haber visto. Mide más de seis pies de altura, tiene cabello castaño con una pequeña onda, ojos verdes y una mandíbula fuerte. Se puede decir que hace ejercicio para mantenerse en forma. Se ha quitado la chaqueta y su camisa blanca parece que apenas puede contener sus bíceps en ella. Miró directamente a Catherine y le pidió que le enviaran tres informes. Me miró por encima y luego volvió a mirar a Catherine, preguntándole:

—¿Dónde está la nueva empleada? ¿Ya renunció?

—Señor, ella está aquí mismo, se llama Cora, y creo que podría hacer un trabajo aún mejor que yo en este puesto, para finales de este año —le dice Catherine con una mueca en el rostro.

Pude notar que ella quería decir más, pero simplemente le dio la espalda y se sentó para iniciar sesión en su computadora y enviar los documentos solicitados.

Lo vi mirarme como si ahora estuviera molesto conmigo por haber incomodado a Catherine, como si yo hubiera sido quien lo hizo. Antes de cerrar la puerta de su oficina y cerrar con llave, noté que la puerta tenía un nombre y me acerqué más para luego quedarme sin aliento y preguntarle a Catherine en un tono extremadamente bajo:

—¿Soy la nueva asistente personal de Collin Lauder?

—Sí, cariño, lo eres —me dice Catherine y sonríe antes de hacer clic en enviar en el correo electrónico a Collin.

—Um, él no parece que le caigo bien —le dije.

—Cariño, no te preocupes, a él le cae bien muy poca gente. De hecho, toma este cuaderno y comienza a escribir la información que estoy a punto de darte —me dice Catherine con un tono muy seguro y luego comienza a darme los detalles de la vida de Collin.

Tiene dos mejores amigos, Nicolas Caldwell, quien es abogado, y Dalton Fossett, que también trabaja en el sector financiero. Siempre que él no esté en una reunión, pueden entrar directamente. Además, Collin está saliendo con una mujer llamada Celeste Watson, y ella también tiene permitido entrar a su oficina, pero él está comenzando a salir con otra mujer, Maddie Summers, y eso comenzó el viernes de la semana pasada. Todavía no ha informado a Celeste sobre esto. Catherine continúa diciéndome:

—Asegúrate de golpear y esperar un 'pasa' antes de entrar a su oficina. Si una mujer está con él, a veces tienen postre aquí, si entiendes a lo que me refiero.

No sabía a qué se refería. Estamos en el trabajo, tal vez él tenga un mini refrigerador en su oficina, ya que está en muy buena forma y probablemente cuida su alimentación, y ellos son modelos, así que probablemente no comen, y frunzo el ceño hasta que lo entiendo:

—¿Quieres decir sexo? ¿Aquí? En el trabajo? —le susurro casi gritando a Catherine, con los ojos cada vez más grandes con cada palabra que hablo.

Ella sonríe, niega con la cabeza, murmurando algo acerca de cómo ella solía ser tan inocente antes de comenzar a darme más cosas para anotar en mi cuaderno.

Al día siguiente conocí a Celeste Watson y era hermosa. Catherine me dijo que me sentara detrás de su escritorio, ya que me estaba capacitando y necesitaba tener una idea completa de todo. Levanté la vista, y otra vez, a la hermosa mujer de pie al otro lado de mi escritorio. Celeste medía fácilmente 5'11'' de altura con una figura muy delgada, cabello castaño con reflejos y ojos azul cielo, me dedicó una media sonrisa y echó un vistazo a Catherine antes de preguntar:

—¿Así que ya estamos con la número cinco? —Antes de volver a mirarme y decir —: Buena suerte.

Antes de dirigirse hacia la puerta de la oficina de Collin y llamar. Todos escuchamos cómo él dice "pasa" y escuchamos el clic de la cerradura. Después de que ella entró a la oficina. Desafortunadamente, también escuchamos otras cosas provenientes de la oficina. Celeste era obviamente muy ruidosa cuando entró, ya que me puse completamente roja cuando el ruido alcanzó un cierto nivel y le pregunté a Catherine si podíamos ir a almorzar quince minutos antes, ya que no quería tener que enfrentarme a ninguno de ellos cuando salieran de la oficina. Catherine estuvo de acuerdo y nos fuimos. Coleman iba justo detrás de nosotros en el ascensor y su rostro también estaba un poco rojo.

Cuando regresamos del almuerzo, todo estaba tranquilo y volvimos directamente al trabajo. La puerta de Collin estaba cerrada y creí que él estaba fuera almorzando porque era su hora de almuerzo, así que entré para dejar dos archivos entrantes en su escritorio y me quedé paralizada.

—¿Por qué no tocaste? —escuché una voz fuerte decir mientras me quedaba paralizada y miraba a otra mujer completamente diferente inclinada sobre el escritorio de Collin.

Esta era rubia, con cabello hasta los hombros y grandes ojos azules. Solo estaba medio desnuda, ya que se había quitado la falda y la ropa interior, pero aún tenía su camisa puesta. Tenía la pierna izquierda tirada sobre el escritorio y él la sujetaba firmemente por la cintura. Él nunca dejó de entrar y salir de ella, y sentí una mano rodear mi muñeca y jalarme hacia atrás, hacia la puerta y fuera de la oficina. Mi rostro estaba completamente rojo y no podía hablar. Él estaba teniendo sexo con esa mujer sobre su escritorio. Él se enfadó, pero ella estaba totalmente entretenida por mi reacción. Ni siquiera se enfadó. De hecho, me lanzó una sonrisa burlona ante mi expresión de sorpresa.

—No sabía que había alguien ahí —le dije a Catherine, atónita —. Solo quería dejar los informes para no tener que verlo cara a cara después de lo que él y Celeste hicieron antes. Nunca volveré a entrar sin llamar. Estoy tan avergonzada —le dije a Catherine.

Collin y la mujer salen de la oficina unos diez minutos después, y él le pide que espere en el ascensor y luego le indica a Catherine que entre a su oficina con él. Puedo escuchar una discusión detrás de la puerta y sé que mi rostro está rojo de nuevo. La mujer me mira de reojo y me dice:

—Sabes, si te maquillas un poco, podrías ser atractiva.

Asiente como si me hubiera dado algunas palabras para vivir.

—Gracias —le digo, ya que realmente no creo que esté tratando de darme un cumplido.

—También necesitas renovar tu guardarropa. Tú eres la cara que representa a Collin Lauder, y no estás vestida lo suficientemente bien para hacerlo. Necesitas usar maquillaje también, cariño. Te verías mucho mejor. En realidad, estoy sorprendida de que él no te haya dicho nada todavía. Necesitas trabajar en eso rápidamente —me dice, y casi aprieto los dientes, ya que no conseguí este trabajo para lucir bien, creo que mi mente es lo más importante para este trabajo.

—Lo tendré en cuenta —le digo, antes de mirar hacia abajo y continuar escribiendo el informe en el que estaba trabajando.

La puerta a mis espaldas se abre de golpe y Collin sale pisando fuerte y se detiene justo al lado de mi escritorio y me dice:

—Tienes mucha suerte porque quería despedirte. Por favor, intenta arreglarte mientras estés en el trabajo. Ahora me representas,  y sinceramente, pareces que deberías estar trabajando en el lobby de recepción, no como la asistente personal del CEO de la empresa. Nunca entres a mi oficina sin consentimiento verbal mío, o te irás —me dice Collin, antes de darse la vuelta y entrar al ascensor con la mujer, y la vi sonreír burlonamente mientras las puertas se cerraban.

—Lo esperaba, cariño. No te preocupes por ello. Te lo dije, pero ambas pensamos que él estaba fuera de la oficina con Celeste. Esta se llama Maddie y no es una persona agradable. Es con la que él está empezando a salir ahora. Cada uno o dos años, si tienen suerte, él elige a otra mujer para salir, y uso ese término libremente. Supongo que le dio a Celeste su "despedida" después de haber tenido sexo antes, así es como suele hacerlo —me dice Catherine.

—Lo siento mucho, Catherine. Espero que no hayas tenido problemas por mi culpa. Realmente no sabía que él estaba allí. Solo no quería enfrentarlo después de escuchar todo eso hoy —le digo.

—Oh, cariño, no te preocupes por eso. Le dije que si te despedía, yo también me iría, y cambió de opinión. Ya le dije que eres la indicada, ahora eres su asistente personal, Cora. Tú estás tomando el relevo de mí, e incluso creo que serás mejor que yo en este trabajo. Incluso te haré una promesa. Si alguna vez necesitas que sustituya por ti, dentro de un año, dos años a partir de ahora, lo haré. No lo haría por todos, pero por ti, haré una excepción —me dice Catherine y me sonríe.

Escucho que me llaman y me sacudo de mis pensamientos.

—Sí, Catherine —le digo.

—Este es un excelente trabajo. Verifiqué tu horario con el mío y eran iguales, excepto por la reunión del jueves en la segunda semana. Captaste que deberían ser los inversionistas de Pekín por la tarde para que puedan regresar en avión después y sea mañana allí cuando lleguen. Eso es una excelente planificación por tu parte, y estoy segura de que será notada y apreciada por los hombres de ese grupo. No tendrán que volar el día anterior para pasar la noche aquí y poder asistir a la reunión por la mañana. Me llevó meses dominar el horario. Creo que al final del primer mes lo tendrás dominado a la perfección —me dice Catherine y me felicita por el horario