En la piscina.

3635 Words
Oh Dios, me levanto como si hubiera pasado la noche más relajante de mi vida, me estiro cuando veo a Rubén en la puerta. -¿Rubén? -Buenos días Srta Molly. -¿Que haces ahí? -El Sr Hans me ordenó que la esperara a que despertara, el desayuno ya está servido y el avión también está esperándolos. -¿Avión?.-Hago memoria y recuerdo todo lo que pasó ayer.Ay no. Ayer me case con el gruñón, lo besé dos veces, me preguntó que lugar me gustaba, yo le dije el Caribe y después dijo que hoy iríamos, eso hace que sonría, después recuerdo lo que pasó en la noche y mi sonrisa desaparece. Miro a mi lado y recién me doy cuenta que estoy en la cama de don gruñón, menos mal no está. -¿Y-y Hans? -La está esperando Srta Molly, además también me ordenó que le diera esto. -¿Otra caja?.-Recuerdo la caja de ayer, esa dónde estaba la ropa que recién me doy cuenta que aun tenía puesta.-¡No!.-Me tapo, Rubén parece ignorarme. -La dejaré sola, porfavor apúrese porque el piloto y el guardia los están esperando en el aeropuerto. -¿Piloto y guardia? -Asi es Srta Molly.-Dice y sale sin darme más explicaciones.¿Que habrá querido decir? Miro la cajita y ya le tengo miedo, pero es más chica que la de ayer, no creo que tenga algo indecente, la abro con dudas y para mi sorpresa es un celular, ¿Un celular? Oh Dios, cuánto me faltaba uno después de que me lo robaron. ¡No puedo creer que Hans me haya regalado un celular! parece lujoso, lo reviso, parezco una niña feliz que acababa de recibir su regalo de navidad, cuando el sonido de este suena y me despierta. ¿Quien me estará llamando? Veo un número, me parece conocido. Contesto. -¡Molly! -¿Lucía? -Menos mal que ya te dieron el celular, no quería arruinar la sorpresa. -¿Cómo sabes que me regalaron este celular? -Pues porque yo lo elegí para tí. El mayordomo de Hans estaba perdido en esto y pues decidí ayudarle, también le recomendé un lindo traje rojo para que sedujeras a tu ahora esposo en la noche de bodas, y dime ¿Cómo les fue? -¡Asi que fuiste tú! Ya decía yo que Rubén no podía elegir una ropa tan atrevida.¡¿Cómo se te ocurrió?! -Ay no me grites, más bien dime qué pasó y no me digas que nada porque con ese babydoll mostrabas todo el cuerpo y no creo que Hans se haya controlado. -¡Lucía te mato! -Ah osea si paso algo y te apuesto que aún lo tienes puesto. No puedo creerlo pero ni contarle, hago memoria de todo lo que me hizo anoche y la cara se pone roja. -No paso nada si es lo que crees, ahora te dejo, tengo un vuelo que tomar. -¿Un vuelo?¿Acaso será tu luna de miel? Dice con sarcasmo pero no puedo mentirle, que le voy a decir, ¿que es vacaciones? No me creería. -No, Hans dijo que es un obsequio por lo de ayer, digamos que es parte del pago. -A mi no me engañas Molly, esa es tu luna de miel, recuerdo que dijiste que era uno de tus lugares favoritos. ¿Ah?¿Acaso sabe a dónde iremos? ¡Ash!, a veces es mejor no contarle todo a tus amigas. -Mira Lucia, no te grito porque estoy contra el tiempo, ya te cuento cuando vuelva. -Pues eso espero, más te vale que cumplas con tu palabra. Quiero todo, con lujo de detalles, ya quiero oír como te quitó la virginidad ese papacito que ahora es tu esposo. -¿De que hablas? Calla Lucia que pueden estarte oyendo. -No te preocupes, nadie sabe que aún eres virgen, ¿Porque aún lo eres verdad?¿O tu esposo ya te lo quito? -¡Lucía!.-Intento calmarme, esta mujer me va a volver loca.-Mejor después hablamos, me tengo que apurar, ah y gracias por la buena elección del celular. -A mi no me agradezcas, yo solo elegí el más caro, en verdad pensé que el Sr Rubén bromeaba cuando dijo cualquiera, y pues aproveché, después de todo eres la esposa de un hombre rico. -¿Ah?¿Cuánto costó este celular? -Pues acaba de lanzarse al mercado, es uno de los pocos modelos que hay. Creo que unos 170, 000 dólares, que envidia te tengo, ni yo puedo darme esos gustos. -¡¿Que?! Espera, ¿no hablas en serio? -Ay Molly, es el único en su clase, se nota que ese hombre te engríe, su mayordomo dijo que no había problema con el precio. -Pero esto es ridículo.-Miro el celular,¿Tanto cuesta este aparatito? -Bien, ya después me agradeces por todo, tengo que colgar, ya cuando regreses me tienes que contar todo Molly, no creo que seas mal agradecida con tu esposo por tal detalle. Cuelga no sin antes darme esa risa de triunfo. Sabía que Hans es rico, pero gastar tanto en un celular es algo estúpido, no, tengo que regresárselo, con esto podría comprar un apartamento digno para mí en la mejor zona o tendría alimentos por varios años. Me levanto algo sorprendida, debo devolverle esto pero recuerdo lo que ayer me hizo y me detengo a media puerta. ¡Hans me besó y me tocó!.Sí ,fue tan real, tanto que aún me siento rara al pararme. Cierro la puerta y regreso a la cama. También me beso, no una ,sino varias veces. No puedo creerlo, mi gruñón me besó y me dió mis primeros orgasmos, ¡oh santo cielo!, no puedo creerlo. Escucho la puerta.-Molly, ¿Puedo pasar? Es él, intenta abrir pero corro y se lo impido, como podría verlo a la cara después de lo que pasó ayer. -¿Molly? -¿Que? -¿Estás bien? -Sí, muy bien.-¡Pero que digo! Después de lo de anoche quien no. -Esta bien, apúrate, el auto nos espera. Dejo de escuchar su voz, esa sexy voz que me dijo extrañas cosas anoche. Intento recordar que más paso además de tocarme como lo hizo. -¿Molly?.-Escucho su voz de nuevo, aún está detrás de la puerta. -Ya voy, ya voy, ve avanzando.-Ni que entre y me vea en estas fachas. -De acuerdo, pero apúrate. -Bien.-Creo que ya se fue.Oh Dios, aún no puedo creer que siga con este babydoll rojo puesto, me acerco al espejo y me miro, ayer ni pude verme. Oh vaya, jamás pensé ponerme esto para seducir a un hombre, pero en ese momento si lo pensé pero apenas abrí la puerta del baño, ese valor se esfumó, quizás Hans se hubiese burlado al verme, pero no, creo que si funcionó. A Hans sí le gustó. Muevo la cabeza, despierta Molly, despierta. Busco en mi mochila algo decente y me pongo un shorts y un polo corto.¡Voy al caribe con mi gruñón, no puedo creerlo aún! Salgo con mi mochila y con el celular que vale más que todas mis cosas juntas. -¿Y Hans? -El Sr ya está en el auto Srta Molly.-Trago saliva, de solo pensar que lo veré a los ojos después de lo de ayer, me pone nerviosa.-Porfavor, desayune lo más rápido para no hacer esperar al Sr Hans. ¿Hacerlo esperar? Será para que el Sr gruñón me de una buena llamada de atención por hacerlo esperar. Tomo las tostadas en mi mano y el jugo en unos segundos, lista. El Sr Rubén solo sonríe.-Porfavor, ayude al Sr Hans a distraerse. Él la quiere a su manera y aunque a veces puede ser un poco amargado, recuerde que es por su condición. -Lo sé Rubén, no te preocupes, lo distraeré lo más que pueda.-Él vuelve a sonreír. Solo espero que no esté pensando en esas cosas. Bajo con todos los nervios de punta, calma, respira Molly. En la entrada esta un hombre que no conozco. -Buenos días Srta Molly, soy Javier y estaré a su servicio. -¿A mí servicio? -Sí, desde hoy le voy a servir a usted y al Sr Hans, su seguridad es mi trabajo. Ya entiendo, miro a la camioneta, él ya está ahí y mi corazón late a mil por hora. - Porfavor sígame. Obedezco ,respiro, trato de olvidar lo que pasó ayer para no sentir tanta vergüenza pero no puedo, es imposible. Hans hizo algo que nunca ningún hombre me había hecho. Javier abre la puerta y él está ahí, sentado, me mira y desvío la mirada para no verlo a los ojos. -Apúrate Molly, estamos atrasados,¿Sabes cuánto dinero estoy perdiendo con el alquiler de una pista de aterrizaje en el aeropuerto ahora mismo? -¿Ah? No.-Respondo con timidez. -Pues mas de lo que vale tu salario al mes. -¿Que? Entonces apurémonos, Javier apúrate, apúrate.-Ambos se rien como si fuera una broma.¿O acaso me estaba mintiendo? Me siento a su lado, sigo nerviosa, muy nerviosa de solo tenerlo a mi lado. Vamos Molly, tú no eres así. Ayer no fue la gran cosa, quiero hablar pero no me salen las palabras. -Molly sobre lo de ayer... Parece que va a decir algo, veo a Javier, ¡No! él puede escuchar, lo tapo con mi mano antes que diga más. -Shh, no digas nada, Javier está aquí.-Hans pone su mano sobre la mía y la baja. -¿Y? Él puede oír si desea pero tiene prohibido hablar lo que escucha, es como si no existiera. -¿Porque te comportas así? -Ah, esa es la misma pregunta que me hiciste anoche. -Tú eres un... Mejor me callo y me aparto de su lado, al verlo a los ojos, hace que me ponga roja. No tardamos en llegar al aeropuerto. Entramos con el permiso respectivo hacia la zona de aterrizaje y Javier lo ayuda a bajar y a acomodarse. -Sube primero Molly. -No, yo debo ayudarte, soy tu..., tu esposa. Ay, como cuesta decir eso.Él sonríe, sí, mi gruñón ha vuelto a sonreir y cada vez que lo hace, me derrito. -Javier, así está bien, quiero que Molly me ayude. -Como usted ordene Sr Hans. Veo a Javier alejarse y soy yo quien empuja la silla de ruedas de Hans. Entramos y no puedo creerlo. Hay solo unos cuantos asientos, amplios y se nota que muy cómodos. Creo que somos los únicos pasajeros. -Molly el avión tiene que partir y debemos acomodarnos. -Ah claro, claro. Javier entra y lo ayuda, yo tomo mi asiento y me abrocho, aún sigo sin poder creerlo, jamas pensé que Hans pudiera alquilar un avión como este. Miro atraves de la ventana y sigo como en un sueño. El avión está apunto de partir, es la primera vez que subo a un avión, no se que esperar. Se mueve, esto es un poco angustiante.-¿Molly estás bien? Cierro mis ojos y muevo mi cabeza negando. El avión sube, creo que mi corazón se va a salir. -Tranquila Molly , solo es al inicio, después todo estará bien .-Dice y siento su mano en la mía, eso me ayuda, cuando siento que el avión ya está en el aire, me relajo. -No sabia que era la primera vez que subías a un avión Molly, lo siento. -No, está bien, fue extraño pero estoy emocionada.-Lo miro a los ojos y se me olvida lo de ayer. -Solo disfruta del viaje, son 9 horas que tardaremos en llegar, puedes leer lo que quieras o disfrutar de algún juego, o quizás desees dormir. -¿Dormir? Estás loco, es la primera vez que subo a un avión y estoy muy feliz. -Me alegra que te guste. Ay Hans, porque tiene que ser tan lindo, me derrito con cada palabra que sale de su boca, aún si es para renegar, se ve como un Dios. -¿Acaso te gustó tanto lo de ayer que te me quedas mirando de esa manera? -¿Que?.-Y aquí vamos, tenía que recordar lo de ayer. Miro a Javier, esta lo suficientemente lejos para oír esto.-Hans lo de ayer ,yo... -No tienes que decir nada Molly, ya me disculpé contigo por lo que pasó. -Sí pero... Me mira a los ojos como si quisiera comerlos, si sigo así, soy capaz de besarlo y eso no puedo hacerlo ahora. -Creo que leeré algo.-Cogo una revista y hago como si la leyera, Hans también hace lo mismo y cada quien por su lado No pasa tanto tiempo y el capitán nos anuncia que ya llegamos. -¿Dónde estamos? -En una isla privada. -¿Isla privada? Pense que iríamos a algún aeropuerto. -Estamos en un terrapuerto Molly, pero de mi propiedad. -¿Propiedad?.-Miro por la ventana. Hay una casa de unos dos pisos, detrás de ellos algo de vegetación con unas rocas, pero no veo nada de gente a la redonda, raro, muy raro. Javier se adelanta y ayuda a Hans a bajar, yo los sigo con mi mochila en mano. No quito de vista todo lo que me rodea, solo veo playa, palmeras y un cielo tan azul como el mar. -Molly. -Dime. -Ayúdame a ir a nuestra habitación, esta en el primer piso, yo te guío. -Claro.-¿Espera, dijo nuestra habitación? No pensará que dormiré de nuevo con él, ayer y apenas pude dormir con lo que me hizo mi gruñón, otra noche más y caigo. Llegamos a la puerta y ahí está una señora con ropa de sirvienta.-Ah, ella es Martha, la encargada de servirnos por estos días. Solo ella y Javier son los únicos que nos acompañaran de día, después se van de la casa a descansar a otro lugar. -Un gusto.-La saludo y ella hace una reverencia, eso me incomoda un poco, no estoy acostumbrada a que me traten así. Seguimos avanzando, todo es hermoso, los acabados, los detalles, se nota que Hans tiene muy buen gusto. -Molly despierta, por aquí no. -Oh lo siento.-Miro directo y lo que me llama la atención es una enorme piscina con una cascada de agua detrás, sus sombrillas, sillas y todo con vista al mar celeste, esto es un sueño. -¿Molly?.-Suelto su silla y camino hacia la piscina. -Lo siento, es que esto es lo que me imaginé alguna vez, mi mamá hablando de lo hermoso que se vería y... Siento que se me forma un nudo en la garganta, Hans lo nota. -¿Quieres entrar? -Sí, claro que quiero, ¿Puedo? -Sí lo deseas puedes meterte con ropa y todo. No te detendré, todo lo que ves ahora es tuyo, eres mi esposa después de todo. Su esposa, suena tan lindo. -Creo que primero me iré a cambiar, ¿Tu también te vas a meter? -Si tu lo haces ,yo también. -Bien. Dejo a Hans con Javier, quien lo va a ayudar a cambiarse mientras yo me pongo mi ropa de baño.No es tan sexy pero es lo único que tenía. Alguien toca la puerta del baño. -¿Sí? -Sra, esto le manda el Sr Hans. -¿Que es eso? -No lo sé Sra, yo solo obedezco órdenes. -De acuerdo.-Lo tomo y es otra caja, ya me asustan las cajas. Lo abro y oh Dios, no habla en serio. Esta vez es un bikini de dos piezas, me muero, esto es peor que el babydoll de anoche. Ya supongo de quién fue la idea, voy a matarla apenas llegue a Londres. Calma Molly, es solo un bikini, nadie te va a ver más que ese gruñón. Respiro y tomo el valor de ponérmelo. Menos mal no tengo rollitos que me hagan ver gorda, creo que esto me ayuda a verme más sexy para él. ¡Ay pero que pienso! Abro la puerta y voy a la piscina, menos mal tengo la toalla puesta, a pesar que hay sol, hace un poco de viento. -¿Molly? -¿Que?.-Lo miro sentado en la parte mas baja de la piscina, el agua apenas le cubre hasta la cintura. Oh Dios, porque tenía que estar sin nada con que cubrirse. Ese pecho tan perfecto, suspiro de solo verlo. A decir verdad, es la primera vez que lo veo así. -¿Que te pasa? -Nada. -¿Entonces porque estás tapada con la toalla? -Pues porque hace frío. -¿Frío? Yo siento calor Molly. Estamos a 30 grados y tu dices que sientes frío. No sabes mentir. -¡Tú! a ti te gusta burlarte de mí.-¡Este gruñón! -¿Y ahora porque dices eso?.-Me mira, sabe de lo que hablo, pero bien que quiere verme renegar.-¿Acaso no te vas a meter a la piscina? Dijiste que te gustaría. Ven, el agua está tibia. Vamos Molly, demuéstrale a este gruñón que no te importa que te vea así. Me quito la toalla de a pocos hasta dejarme en dos piezas, veo que sonríe, lo sabía, le parece gracioso, mi cuerpo no es el de una modelo, aunque no estoy gorda tampoco. -¿De que te ríes? -De lo hermoso que te queda. Pensé que no te quedaría. No digo, lo hace solo para molestarme, pues bien. Me meto a la piscina y me sumerjo en el agua. Está tibia como lo dijo, miro el cielo azul y sigo sin poder creer esto que estoy viviendo. Veo a Martha y deja unos tragos al costado de Hans y luego se retira. -Molly ven, o los hielos se van a derretir. -Ya ,ya voy. -Camino hacia él, pero no deja de mirarme, me pone nerviosa, pero a decir verdad quería que me mirara, que me viera a mí, no era tan bonita como sus modelos pero yo tenia lo mío. -¿Cuál quieres? -Mmm, ese.-Escojo un trago de colores muy llamativo y lo tomo. Es dulce y refrescante. -¿Te gusta este lugar? -¿Que si me gusta?¡Me encanta!.-Sonrío, no se cómo agradecerle por todo esto que estaba viviendo, las mejores vacaciones de mi vida. -Molly. -¿Que? Sin darme cuenta, Hans estaba demasiado cerca, tan cerca que me quedé como estatua en su delante. -Te ves bien así.-Dice mientras sigue acercándose a mí y siento sus labios en los míos, ¡Oh Dios, de nuevo esta pasando! Ayer él me besó y ahora lo hace de nuevo. Siento su mano en mi mejilla, me apega más a él, me gusta y quién no, Hans ya era lindo con ropa pero sin ropa y besándome era como si estuviera en el paraíso. Sigue más hasta bajar su mano por mi brazo y llegar a uno de mis senos. -Hans.-Sin darme cuenta, presiona uno de mis pezones y eso hace que pierda el sentido de la razón, ahora soy yo quien me acerco mas y lo enrollo con mis dos brazos, los pongo detras de su cuello y lo beso como si no hubiera un mañana. -Molly, te ves linda así, aunque te verías mejor sin ropa. ¿Que dijo? Debo estar soñando o el trago tenía algo. -¿Así?.-Respondo sin dejar de abrazarlo y besarlo, oh Dios. -Molly cumple con lo que me dijiste ayer. -¿Y que dije?.-Susurro agitada, este hombre me estaba quitando el aliento con ese beso largo. -Que cubrirías mis necesidades de hombre. ¿Yo dije eso?.Hago memoria y si, ¡sí lo dije! No respondo porque si lo afirmo siento que moriré de la vergüenza pero debo hacer algo.-Hans yo... -Molly siéntate encima de mí. -¿Yo? -Sí, tú.-Miro a sus ojos marrones, habla en serio, muy enserio. Me muevo hacia él sin dejar me abrazarlo, siento como su m*****o duro está tan erecto que con solo sentirlo tiemblo. -Hans... -Calma Molly.-Me aferró a su cuello, lo abrazo, me muevo lentamente hasta estar sentada en su encima, no sé cómo pero lo logro. -Hans no estoy segura de lo que hago. -Yo tampoco pero no importa. Siento su mano liberando la parte superior de mi bikini, no digo nada para detenerlo, es que en ese momento mi mente solo sentía el m*****o de él queriendo entrar en mí. -Molly eres linda.-Dice hasta que siento como cae ese trapo dejándome a su entera vista. Sí, estaba semidesnuda ante él y yo aún no me había dado cuenta, solo hasta que siento una de sus manos acariciándome los pechos es que reacciono.-Oh cielos Hans..-Los aprieta, me quiero morir, este hombre sabe lo que hace. Otra vez baja su mano y la mete dentro de mi sexo, mientras baja su rostro y muerde uno de mis pechos y yo grito de placer. Sí, sin duda esto es un sueño, jamas pensé que Hans me haria esto. Siento como mueve sus dedos en mí y recuerdo lo que pasó ayer.-Sí, se siente bien -Me muerdo el labio tratando de ahogar el grito que estaba apunto lanzar. Se acerca a mi oído, algo dice , pero estoy agitada ,casi sin aire por esos dedos y esa boca que me comían. -Molly, pasa la noche conmigo. Mi cabeza en ese momento no piensa por lo que mi cuerpo estaba sintiendo. -Sí, si quiero.-Digo y lo beso. No me había dado cuenta de mi respuesta,solo después de todo este placer que me había regalado, es que recapacito de lo que dije. ¿Voy a pasar la noche con él? No, no puede ser que yo haya dicho que sí. ¡Me quiero morir! solo espero no salir lastimada por todo esto, aunque ya no me importa, lo amo, me gusta, lo deseo y quiero que él sea mi primera vez, de eso estaba segura.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD