La noche había caído nuevamente sobre la ciudad, las lámparas en las calles se encendían para iluminar la oscuridad que en ellas comenzaba a reinar, el lujoso auto de nuevo la llevaba hacia Le Rosey, se sentía particularmente ansiosa, mil preguntas se formaban en su mente torturándola una y otra vez. El uniforme le lucia impecable, la falda y el saco en verde menta contrastaban con las gruesas medias negras y la camisa del mismo color, el corbatín del mismo tono de su saco estaba perfectamente colocado en su lugar, sus rojos cabellos de fuego los había sujetado en una cola alta la cual había decorado con un precioso moño en color n***o, algunos cabellos habían quedado sueltos alrededor de su rostro enmarcando preciosamente su cara en forma de corazón, se había colocado solo un poco de bas