Salgo de la academia molesta y cansada decir ya no más de todo lo que allí se vive. Brasil es muy distinta a Corea del Sur, las calles, las personas. Sí, mi vida allá no era la espectacular, pero por lo menos estaba cerca de él y las cosas eran conocidas. ¿Estará bien? ¿Pensara en mí? –pienso– ¿Si estuviera aquí conmigo permitiría que esto pasara? ¿O estaría conmigo, a mi lado? Deja de desear algo que jamás te sucederá –me reprende mi conciencia–. Porque en realidad él no te falló, él no te lastimo, él no te amo. Y gracias a no poner los pies en la tierra y darle frente a tu realidad, fue que anhelaste y esperaste tanto de una persona que jamás te prometió algo, por lo que jamás te incumplió y lo más importante, jamás te lastimó. Ya que fuiste tú misma quien lo hiciste. Te dejaste lleva