Benjamín —Gracias por tu compañía Madison —me quedé mirándola mientras ella estaba parada frente a mí, podía sentir sus nervios a flor de piel, ambos habíamos acabado con una botella de tequila mientras cenábamos, sus mejillas rosadas estaban demasiado seductoras. —Gracias a ti por todo, perdona haber arruinado tu fiesta de compromiso con tu familia, fue sin intención —Fue lo mejor que pudiste hacer. —le dije mientras acariciaba su hombro. —No estoy segura de eso, pero si tu lo dices, debe ser así—ella tomó mi mano y la bajó, pero la forma en que lo hizo fue demasiado insinuadora, pues provocó que yo rozara su pecho, baje mi cabeza avergonzado, pero ella tomó mi mano con firmeza e hizo que acariciara por completo sus senos. —¿Qué estás haciendo Madison? —le pregunté con un tono de