-03- El rubio grosero, por Park Jimin

1476 Words
—¡Adivinen quien está saliendo con Jungkook!- Grito y dijo Dahyun en broma, sus compañeras no tardaron en prestarle atención, claro, a excepción de Jimin, él estaba sentado sobre su cama mientras leía concentrado un cómic que Kook le había prestado. —Nuestra compañera Park Jimin~— fue en ese momento donde el menor prestó atención. —Uh?...— —Eso fue muy rápido— Comentó de mala manera Hani —No pierdes el tiempo— dejó de untarse la mascarilla, y Jimin juraba que era barro lo que usaba, por no decir otra cosa. Jimin rodó los ojos —Es un amigo— dijo y se dedicó a ignorar las agresiones de Hani, el no se iba a poner a discutir sobre algo así, y menos con una mujer. El silencio perduró por unos minutos, Momo fue la que hablo al comentar de sus gustos musicales, las chicas animadas volvieron. ...Jimin no supo cuándo fue que paso, pero cuando sus ojos se abrieron solo veía las coloridas viñetas del cómic que leía ayer por la noche. ¿Cuándo fue que cayó dormido? se preguntó y tomó asiento en su cama. Miró a su alrededor, pero sus compañeras no estaban, miró su reloj y se dio cuenta de que se había perdido de primera clase. Debe hacer algo con eso de tener el sueño pesado. Rasco su cabeza mientras se dirigía al baño. Accidentalmente la peluca se removió un poco, así que termino por retirarla en su totalidad y también optó por una ducha, cosa que no había hecho desde que había ingresado a la universidad. Cerro la puerta con seguro y se adentró a la ducha, el agua ni muy caliente ni muy fría, recorría su delgado cuerpo. Al salir se cubrió con una toalla y abrió la puerta del baño, pero antes de salir reviso si no había nadie. Perfecto! estaba solo. De su maletín sacó una faldita color durazno, una blusa floreada a tono con sus vans. Se arregló la peluca y cuando estuvo bien sujeta a su cabeza, se dedicó a maquillarse. —¿Este color irá a tono?— se miró al espejo —¿Qué mierda estoy diciendo?— terminó por aplicarse el color durazno en sus labios y delineo sus ojos —Quiero volver a ser chico...— Al terminar con su rostro, solo le faltaba una última cosa, y la más desagradable para él. —Mierda, mierda...— cerró los ojos con fuerza y relleno su sujetador con pechos falsos. Suspiro al terminar y salio de la habitación, tenía hambre. Llegó hasta el bufé pero nadie se encontraba, pues claro, todos estaban todavía en clases. El pelirosa con peluca se llevó una manzana verde, luego volvería y comería en el bufé. Salio y caminó por los alrededores, la verdad es que todavía no había recorrido ningún lugar. —Que lindo— le hablo al nido de pájaros que había en una de las ramas de un árbol. Le dio otra mordida a su manzana y retrocedió para atrás sin dejar de mirar el nido y a los pájaros dormir. Unos cuantos pasos más hacia atrás y tropezó con algo en el césped, o con alguien tomando una siesta... —Ah! Mierda!— Maldijo la persona que hace unos segundos dormía con tranquilidad. —L-lo siento! no te vi, estaba concentrada en el nido de arriba— señalo —Lo siento mucho!— —Tú?— —Yo?— —Eres la misma chica que me chocó el primer día, ¿los ojos los tienes de adorno o que?— —Así que eres tu el grosero de la otra vez, y yo no te choque, fuiste tu!— Se miraron con ira, luego el rubio sonrió ladino al darse cuenta de la posición en la que se encontraba la chica. Lentamente su mano se ubicó en la cintura delgada de la castaña encima de él. —Q-qué, dónde crees que estás tocando!?— —Nos podemos divertir, pero harás todo el trabajo ya que estoy cansado— Oh, no, Park Jimin se iba hacer respetar. Quiso golpearlo hasta hacerle pedir perdón de rodillas, ese rubio era un grosero y pervertido. Pero opto por hacer algo mucho más divertido y haría que su humor mejore en demasía. Ubico sus piernas a los costados del cuerpo del rubio, así también sus manos (a la altura de su cabeza). —Será muy divertido— Le dijo y sonrió provocadoramente, sus pequeñas manos con furia se enterraban en la tierra —Muy divertido—. Al chico rubio le estaba gustando, esa chica sabía provocarlo, hasta que... —Agh!— hasta que su boca se vio llena de tierra y pasto. Jimin sonrió y salió corriendo en risas. El timbre sonó y fue hacia el bufé mientras daba pequeños saltitos. —A mí no me joden— dijo en sonrisas e hizo la fila. —Jimin, faltaste a la clase de literatura— Jungkook lo tomó por sorpresa. —No era mi intención, me quede dormida— —Ya veo, debería ir personalmente a despertarte?— propuso en broma. —Jaja, mis compañeras te matarían— La fila avanzó y Jimin observó al chico rubio entrar por los ventanales mientras limpiaba su boca. Sonrió victorioso y como lo infantil que era, le mostró la lengua. El rubio grosero solo gruño cuando paso por su lado. —Kook, sabes quién es él?— El nombrado se giró y reconoció a esa persona, asintió. —Estuvimos en la misma escuela secundaria, solo lo conozco de vista y nombre, no somos amigos. Se llama Min Yoongi— —Es un idiota— dijo para luego cubrir su boca —l-lo siento, mi hermana me educo mal— rió avergonzado. Jungkook rió por eso y le dijo que una chica con carácter es lo de ahora. —Taehyung!— el chico rubio giró y se encontró con su mejor amigo y con su reciente mejor amiga —¿Cómo está lucifer?- pregunto Jimin sorbiendo de su batido de anana. —De novio, ¿pueden creerlo?, y yo todavía no—. Jimin se aguantó la risa y así también Jungkook. —Yah, solo rían— y como si hubiera sido una orden, ambos empezaron a reírse en su cara. —No se que me ve de malo Hoseok— —¿Quién es Hoseok?— pregunto Kook. —El chico lindo con cara de caballo— Jimin y Kook se miraron, luego a Taehyung, y luego a la persona que pasaba por su mesa —¿él?— preguntaron al unísono. Taehyung asintió mientras se ponía de pie frente al chico de cabellos castaños y pómulos prominentes. —Hoseok, te gus— —¡Que no!— y salió corriendo para una mesa mucho más alejada. —Ven, ven como se aleja de mi sin motivos— —No sera por el susto que le diste cuando te vio con Lucifer en el hombro?— Dijo Jimin divertido, sus ojos sonrientes siguieron a aquel chico castaño, pero su ceño se frunció al verlo acompañado de cierto rubio grosero —Es amigo de ese?...— dijo en voz baja —Sabes Tae, creo que no vale la pena— —¡Pero qué dices mujer!, ¡ese chico será mi esposa!, ¡la madre de mis hijos y el segundo dueño de Lucifer!— —¿La madre de tus hijos?— preguntó Kook al aire con expresión confusa.  —¡Pero es amigo de ese rubio pervertido!— señaló al tal Yoongi, este se mostraba son una expresión seria. Jimin se puso rojo pero de la ira al recordar. Su cintura había sido manoseada!. —Ash!, espero que el tinte lo deje calvo!— Se puso de pie y salio del bufé, no tenía ganas de ver a ese chico. Pero si no lo quería ver, simplemente no lo hubiera visto... lo pensó muy tarde, ahora se encontraba frente a dos puertas. —¿A cuál debería entrar?, ¿chica o chico?, ¿cuál baño?— Pensó por unos minutos, si entraba a la de las chicas quién sabe qué cosa podrían estar haciendo; Si entra a los de los chicos, estaría mal porque él es una chica ahora. —¿Y que mierda te cuesta entrar al baño?— Jimin se giró y lo vio, ¿En serio le había hablado de ese modo? —Eres un grosero, ¿lo sabías?— Silencio... El rubio rió por lo escuchado —Muévete niña—, fue empujada y Jimin no se iba a quedar sin hacer nada. Avanzó hasta Yoongi y lo empujó, haciendo que este cayera al piso. —Idiota— Jimin entró al baño de chicas, suspiró aliviado al ver que no había nadie. Entró a un cubiculum e hizo lo que tenía que hacer. Al salir del baño nuevamente se encuentro con el rubio tarado, rodó los ojos y no le presto atención, pero no supo cuándo y el ya estaba estampado contra la pared y con manos sujetas por el contrario. —Estas siendo muy fastidiosa— —Yo?, tú eres el pervertido que me tocó indebidamente!— le dijo indignada —Suéltame— pido tranquilo. Yoongi no escucho y se acercó mucho más —B-basta... e-estás muy cerca— trago saliva y cerró los ojos "Golpéalo en la entrepierna", abrió los ojos de golpe y primero observó esa sonrisa ladina. Miro con enojo y le dio un fuerte rodillazo en sus partes íntimas. El rubio cayó al piso retorciéndose de dolor mientras sus manos se ubicaban en esa zona. —Jajajaja— un desconocido reía por la escena. Jimin paso por su lado en medio de insultos para la lombriz humana en el piso. —Amigo, jajaja, ¿estas bien?. ¿Todavía tienes el pene en su lugar?— habló en risas —¿Quién es ella?— Yoongi se puso de pie con dolor en su expresión —No tengo idea, pero ayúdame a averiguarlo Namjoon— su mirada no era para nada risueña.
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