Luego, William contestó varios mensajes que tenia pendientes y al estar en esa habitación escuchó que se movían cosas en la cocina.
«Ya salió de la habitación» pensó William estando allí adentro.
Briana ya se había vestido dispuesta a prepararle aquel omellete que le prometió al mandatario. Ahora con esa llamada, la mujer se dio cuenta de que no debía cruzar la línea con William porque era un hombre casado y no quería tener ningún tipo de problemas. Entonces, estando seria con el cabello mojado, una pequeña camisa blanca de algodón con un logotipo de Hello Kitty, en donde se le notaban los pezones y un short corto de color rosado pastel, sacaba algunos sartenes para prepararle esa comida al presidente. Y mientras ordenaba todas las cosas para hacer la comida, de inmediato la mujer pensa
