El matrimonio por fin se concreta y disfruto la cara de mi "marido", que parece que acabara de ver un cerdo volar.
La satisfacción que siento me hace sentir poderosa.
Curiosamente, no me había sentido así al principio, ya que mi padre me había dicho que lo de la deuda de Liam con su padre lo sabía y que estaba de acuerdo con que había cometido un error y podía resarcirse. ¡Habrase visto semejante absurdo!
Así que mis planes de echarlo a patadas de mi vida se habían ido al caño. Maldita sea, estaba enojada…
Aunque al menos Caroline se había puesto de mi lado y me alegraba tener una aliada del lado del enemigo, eso me haría las cosas más fáciles.
—Cassandra… — La voz de Liam es de incredulidad, aunque luego de unos segundos se transforma en una de molestia.
Su mirada va a parar a un c
