Hace tres meses. Portadown, Irlanda del norte. Acabamos de aterrizar en una avioneta tan pequeña y frágil que temía que íbamos a caer. Según Peter, no "queríamos" llamar la atención de nadie al partir de Londres. Deje toda mi vida atrás, solo me aferro al pequeño que crece dentro de mí, lo único bueno que obtuve de su padre, lo único bueno que me ha dado la vida. —¿Dónde estamos? Hemos volado en ese cacharro casi dos horas y no tengo idea de dónde demonios estamos. Solo sé que abunda el verde, que hace calor y la humedad es horrible. —Ya casi llegamos a casa, muñeca. Tu padre debe estar mordiendo sus uñas de la ansiedad. Ha esperado mucho por este momento, no tienes idea de lo feliz que esta, de conocerte despues de tanto. Mi padre... Nunca tuve uno. ¿Por qué aparece en mi vida vein