El aire no entra bien a mis pulmones, no estoy agitada pero la presión que siento en el pecho es tan fuerte, que siento que me voy a desmayar.
—Si no hablamos no se irá. —Esta vez me dirijo a Peter para que baje la guardia un momento. Estoy segura que no le gusta nada que me encierre en el despacho de mi padre a solas con Alexander, pero no tengo otra alternativa. Quiero que se largue de aquí, lo más pronto posible. —Estaré bien, cariño. Puedes subir y esperarme en el cuarto de Aiden si quieres o esperar aquí con Papá.
Niega y se cruza de brazos. Con solo verlo asi, erguido, imponente, me siento una pequeña mosca, en cuanto a tamaño.
—No subiré a la habitación de Aiden, te esperare aquí hasta que este inútil se vaya.
Alexander se pone de pie y vuelve a acercarse a Peter.
— Este inútil
