—¿Qué me propones?
No soy un tonto, muchas personas han querido que me cambie de equipo, pero le he sido leal a mi estado, no me compro con unos millones, solo estoy con le hago, ¿Para que quiero más?
—Conseguirte un buen contrato, así puedes estar cerca de tu hermano, ¿Qué te parece?
Me lo pienso, el rechazo los ponía más intenso, pero había algo diferente en él.
—Eres la primera persona que me dice que es para estar cerca de mí hermano en vez de ofrecerme millones directamente.
—Vivo viajando y créeme, no hay nada mejor que estar con tu familia, te lo digo yo que estoy a punto de dejar de viajar para estar con mi esposa… queremos comenzar a tener una familia.
—Bueno, felicidades amigo, la familia es primero.
—Gracias… ¿Y qué dices?
—No se si tenga tiempo, estaré con mi hermano y este fin vamos a México.
—¿En serio? Mi esposa y yo también, celebraremos diez años de matrimonio.
—¿Ah sí? ¿Y por qué allá? ¿Es muy lindo cierto? ¿Te lo recomendaron?
—Mi esposa es de allá y sé que extraña un poco su país, solo quiero consentirla.
—Eres un gran hombre y admirable, tal vez considere tu propuesta, me gusta cuando estoy rodeado de personas que no solo le importa el dinero.
—Muchísimas gracias, de verdad… ¿Entonces cuando podemos tener la reunión? ¿Desea que sea en Cancún? Aprovechando el momento.
—No quisiera interrumpir su aniversario, además te estarías contradiciendo de que la familia es más importante.
—Por favor, es que a mi esposa le encantaría.
—De acuerdo, dame tu tarjeta para reencontrarnos allá.
—Claro —saca su tarjeta y me la da—, ¿Y a que se debe su viaje? Si no le molesta que pregunte.
—Solo son unas vacaciones con mi hermano, ayer me encontré en el supermercado con una mexicana y me aconsejó que la comida era más sabrosa si la comía en su lugar de origen, así que tome su consejo e iré con mi hermano, será una nueva experiencia, además de que nunca había ido, pero ahora me tomé un descanso, algo leve.
—Entiendo… si tomó el consejo de la chica, es porque debió ser muy linda, ¿no?
—Tal vez, pero solo me dio una idea nada más, tampoco que me casaré con ella.
—Oye, yo no lo pensé dos veces cuando vi a mi esposa por primera vez, sabía que quería casarme con ella.
Me hace reír.
—Eso si que fue amor a primera vista.
—Si que sí —responde él.
—Bueno, me tengo que ir.
—Claro, adiós.
Nos damos la mano nuevamente y cada quien se va por su lado. Claro que la chica me gustaba, pero no iba a decírselo, no confío tanto en él, es agradable, pero no quiero que tome nada y que lo haga rumor, ya me ha pasado y solo soy precavido.
***
Entro al bar de mi hermano, él era dueño, lo ayudé un poco y aunque le daba suficiente para pagar a empleados, le gustaba trabajar ahí. Este se encontraba lleno, tenía meseras y varios bartenders, en la barra se encontraban varios también bebiendo y una mujer con la cabeza en sus brazos.
—Hey Bro, parece que hoy sí que estás lleno —saludo a mi hermano.
—Para ser jueves, si… ¿Quieres algo de beber? —me ofrece.
—Solo agua. —me siento al frente de él en la barra.
—Claro, jugador estrella —me molesta un poco.
Sabe que no me gusta queme digan así.
—Como que tienes una cliente desmayada —le informo.
—Esta muy ebria, está aquí desde el medio día y anda sola, no puedo dejar que se vaya así, puede ocurrir un accidente y me siento responsable en este momento por ser mi cliente.
—¿La conoces?
—No lo recuerdo, vienen muchas personas aquí, pero tal vez porque ha venido o puede que sea su primera vez.
—Entiendo… ¿Sabes que le pasó?
—No, esto no es la peluquería, no me soltara nada y tampoco me importa.
—No te importa porque que ha venido, pero te preocupa que maneje ebria.
—Tendría una multa. —me sirve el agua.
—No debiste darle de beber creo yo, así no tendrías esa preocupación.
—Me amenazó con darme con la botella —dice asustado.
—Es una mujer indefensa, James.
—Pues yo creo que es muy agresiva.
—¿Y si la llevas a tu habitación?
—Lo pensé, pero no sé si pueda ser una ladrona.
—¿No te p**o la bebida?
—De hecho pidió el tequila más caro y p**o con una tarjeta dorada.
—Entonces tiene dinero, no podría robarte.
—No pienso arriesgarme. —lo miro mal—. Si tanto te preocupa, llévatela a tu casa —se defiende y yo suspiro.
—Me quedaré hasta que se despierte, para ayudarla y le llamo a su casa, luego me regresaré en taxi —planeo.
—Me parece perfecto… ¿Aún sigues pensando en la chica del super?
No hay nada que no le cuente a mi hermano, es menor que yo, pero somos unidos, la diferencia de edad nunca nos hizo diferentes al otro.
—Si, era demasiado hermosa James y tenía un acento, que me encantó enseguida.
—Sigo creyendo que la soñaste.
—No creo que haya traído comida del sueño al mundo real.
—Estas en un hotel, no tienes necesidad ni de cocinar, te llevan servicio a la habitación.
—Sabes que me gusta más hacer cosas por mi… y volviendo al tema, hoy la vi, estaba saliendo del ascensor del hotel y se veía que estaba llorando.
—Que mal, ¿Será que trabajaba ahí y la despidieron?
—Eso mismo pensé yo.
—¿Y que harías si la encuentras en este momento?
—Le pediría salir conmigo eso seguro.
—Aun no puedo creer que te hayas quedado corto, eres una súper Estrella, ¿Cómo es que no lo obtuviste?
—Tal vez no ve deportes.
—Como sea y gracias a ella iremos a México solo por la comida, si conociera su cara, te la buscaría yo mismo para que te convenza de viajar a Italia, parece que es la única que te convenció fácilmente de salir del país —bufa él.
James tenía tiempo pidiéndome unas vacaciones para Italia y yo siempre decía que no, como había dicho, ni me gustaba salir de Luisiana, estoy aquí por él, si no, me quedaría tranquilo en mi hogar, no tengo necesidad.
sígueme en ins.ta.gram writer_danger para anuncios de más libros