Manuel (15 años) Ainhoa y yo cortamos tiempo después de mi declaración en aquel restaurante, lo hicimos porque a los trece uno no tiene ni idea de lo que está haciendo con respecto al amor, sin embargo, jamás dejamos de ser amigos, así que todo siguió normal, estudiábamos juntos, pasábamos rato en el receso , teníamos las mismas clases extracurriculares, hasta que por cosas del destino a los 15 años nos separaron de salón, ella se fue a humanidades, yo a físico matemáticos y todo cambió, todo por completo, cuando Brandon volvió a entrar en la ecuación. Así es, ese pillo que hace años atrás dejó a Ainhoa plantada en el baile de la escuela, ahora estaba junto con ella en humanidades despertando en mi algo que no conocía: los malditos celos. Sí, tal vez Ainhoa y yo ya no éramos novios desd