La Bestia

5° SUMISIÓN

El gemelo de Gneis se encontraba sentado a un lado de la puerta mirando a su hermano entregar su energía vital a cambio de una chica que apenas y conocía, se lo esperaba, pues Gneis era el tipo de ser que se arriesgaba por lo que le parecía importante y eso era admirable pero Drago se estaba hartando rápidamente de su imprudente decisión ya que Valery seguramente no sobreviviría a ese golpe de energía, después de todo solo era una humana común y corriente.

Drago dejo de pensar y miro a Gneis perder su consciencia mientras su energía se difuminaba en el aire, en ese instante Drago lo sujeto por el torso y lo acostó en una camilla contigua a la cámara de sanación, en ese momento la voz de Twist se manifestó alarmada.

—Gneis ha agotado su energía casi por completo—Pronuncio.

—Lo se Twist, solo conéctalo a el equipo de análisis—Mientras colocaba unos parches en forma de circulo en sus puntos cardinales— ¿A ver cómo esta Valery?.

—El usuario femenino acaba de despertar Drago—Con una voz de intriga.

Él se dio la vuelta y soltó los parche que poseía en las manos , atónito miro a la chica parada justo detrás de él, con los ojos ennegrecidos y la piel más pálida, además ya había recuperado sus extremidades y estaba más que consciente , Drago tartamudeo pensando.

«Han sido casi nueve horas de una carga excesiva de energía que no podría haber asimilado, pero esta mejor que Gneis ¿Cómo es posible?» bajo la mirada y se sonrojo al darse cuenta de que ella estaba desnuda y había absorbido la piedra azul que se encontraba en la cámara de sanación, extrañamente se había fundido con su cuerpo y ahora era un enorme y hermoso trozo de piedra entre ambos pechos.

—¿Cómo te sientes?— Con la voz temblorosa.

—Estamos hambrientos—Musito.

Drago abrumado sintió algo de temor al escuchar esas palabras que iban dirigidas en plural aun sabiendo que solo era ella, debía de ser la chica ¿no? El chico la cubrió con una manta y la llevo a la cocina sujeta por los hombros, la hizo tomar asiento en el mesón y saco de la nevera algo que parecía ser pastel de chocolate, noto que ella estaba muy embelesada mirando por la ventana espejo de la nave a la tierra, eso lo extraño un poco puesto que Valery normalmente en las pocas horas que había dialogado con ella parecía ser una persona cortante y muy directa, pero en ese instante parecía que algo estuviera compartiendo su cuerpo.

—Bueno come—Sonrió al colocar el pastel sobre el mesón.

—Nosotros necesitamos agua ¡ahora! —Amedrento encolerizada.

—Bien...bien ya te busco el agua—Irritado.

«Parece una mocosa, ah esta tiene daño cerebral» Pensó.

En cuanto se giró se encontró con que Valery había deglutido el pastel de un kilo que le coloco en el mesón.

—¡Carajo!¡Enserio!¡Muerta de hambre eso era mío también! —Espeto.

—¿Eh? de que hablas Drago—Confundida, parecía haber recuperado sus ojos azules.

—Bueno no importa ¿Cómo te sientes? —Afable.

—Me arde el pecho y la espalda, y tengo un zumbido en los oídos—Con extrañeza—¿Y Gneis está bien?.

—Ha estado peor—Se burlo.

—Necesito ropa sabes—Compungida.

Puedes quedarte así, por mí no te preocupes yo admiro ese cuerpo, además, podría hacerte venir—Se mordió el labio de forma morbosa.

—¡Ah maldito pervertido! —Rezongo.

Ella se levantó sujetando bien la sabana y lo cacheteó tan fuerte que su mejilla izquierda se enrojeció, Valery se sintió ofendida y de inmediato se dirigió a la enfermería, Drago en cambio se frotó la mejilla con una sonrisa sardónica mirando hacia la puerta y pensó.

«¡Que divino! No es tan inocente como aparenta» se lamió los labios antes de sentarse en uno de los banquillos altos.

«Tiene un buen trasero...quiero penetrar» pensó frustrado al ponerse las manos en el cabeza y recostarse en el mesón.

Valery en cambio iba por el pasillo resollando y maldiciendo, estaba más que furiosa y herida, en cuanto se encontró frente a las puertas de la enfermería empujo con su mano derecha y paso rápidamente, de inmediato Twist quien no le había hablado en el momento en que estaba con Drago porque el chico les restringía el acceso a sus actividades con mujeres y la inteligencia comprendía sus necesidades, Twist se dirigió a ella.

—Usuario ¿Desea ser analizada por el sistema de sanación?— Pregunto.

—No—Gruñó.

—Posee urticarias en espalda y pecho, extraña absorción de un cristal de origen Darkiano, asegúrese de consumir muchos líquidos...—Aconsejó.

Ella asintió colérica mientras se sentaba en la orilla de la camilla en la que Gneis parecía reposar.

Valery acaricio las mejillas del chico , estaba muy agradecía con él y prefería esperar a que él despertara que seguir cerca de Drago, ella bajo la mirada en cuanto sintió que su cabeza comenzaba a doler y apretó la mandíbula, en cuanto se relajó parecía que su mente se volvía a nublar y una extraña energía roja salía de sus manos, eso la sorprendió y por alguna razón sintió la necesidad irregular de tocar a Gneis, se mordió el labio en cuanto transfería esa energía a el cuerpo de él con gran facilidad, cuando pareció ser toda ella quito sus manos rápidamente y sintió un extraño hormigueo en su extremidades, se levantó y apretó bien la sabana con la que se cubría para mirarse frente a un cristal que dividía a una serie de equipos muy sofisticados y discernió que en su pecho había un punto azul en todo el centro, le ardía y se quejó de que parecía doler pero no demasiado.

—Oye es de mala educación andar desnuda por allí ¿no crees?— Burlón.

—¿Tú también? —Horrorizada—Son iguales—Frustrada se cubrió bien con la sabana.

—Espera...¿Drago te toco?—Iracundo—Iré a matarlo—Se levanto casi de inmediato.

—No lo hizo solo dijo algo que no me gusto pero ya lo reprendí—Dijo sorprendida de que el chico actuara tan protector.

Él le sonrío sorprendido.

Estaba impactado por su imprevista recuperación, pero no quiso ser obvio al respecto.

—Uh necesito...ropa limpia y necesitaba que despertaras —Musito.

Tapando su pecho y su entrepierna con la sabana apenada.

—Twist ropa femenina para Valery por favor—Bostezo.

—Bien ¿Cuál es mi habitación? —Apenada.

—Usaras mi habitación y yo puedo dormir con Drago mientras abrimos otra sección de la nave ¿bien? —Sonrió.

—Claro—Murmuro.

Pero ella no deseaba dormir sola.

Él se estiro y luego le pidió que ella lo siguiera, Twist el cubo azul que flotaba cerca de ellos estableció diseños de ropa para que Valery eligiera mientras se dirigían a la habitación en la que se quedaría, Gneis tenía las marcas de los parches en el pecho y además andaba descalzo pues el piso estaba alfombrado en el pasillo, giro a la derecha y se encontró con una doble puerta de metal pulido y a su lado estaba un panel, presiono un botón y esta se abrió deslizándose, él entro y el cuarto antes oscuro se vio iluminado casi al instante , Valery entro tras de él y se asombró al ver su cuarto tan bien ordenado, la habitación era particularmente espaciosa ya que la cama está en el centro de lo que parecía ser una plataforma escalonada y había una mesa con muebles en el lado izquierdo, Gneis rasco su cabeza mientras miraba que hacía falta algo, le extendió los brazos en dirección hacia la cama y le dijo.

—Esta es tu cama—Sonrojado—Yo me iré a la cocina, si necesitas algo llámame por medio de Twist y yo vendré de inmediato.

—Mm está bien—Se sentó en la cama con cabizbaja y espero que él se fuera.

Gneis salió avergonzado preguntándose porque ella no le respondía, frustrado se dirigió a la cocina donde Drago parecía estar preparando espagueti, Drago noto a su hermano frustrado y le menciono.

—Eh Valery ha estado actuando raro mientras tu estabas dormido—Frunció el ceño en cuanto escucho el mesón romperse.

Gneis había golpeado con tal fuerza el mesón de mármol que este callo en seco al piso.

—¿Qué le hiciste? —Espetó.

—Nada, bueno le insinué el darle placer pero ella sorprendentemente me rechazo RezongoAdemás ella hablo en plural y sus ojos estaban renegridos—Haciendo pucheros—¡Se comió el pastel que comprede chocolate!.

Gneis se tocó las sienes pesando.

«¿Sera que Valery tiene efectos secundarios por haber absorbido parte de mi poder?» gruñó y le pidió a Twist reparar el mesón.

—Gneis...realmente te gusta esa chica ¿verdad?— Serio.

—¿A qué viene esa pregunta tan repentina? —Lo miro con recelo.

—Solo respóndeme—Lo miro por sobre su hombro.

—Si.

—Bien, porque es verdaderamente increíble—Se rió para sí.

—¡No la toques, ella es mía!— Amedrento.

—Empezaras con esas riñas infantiles, ambos podemos tenerla ¿eh?— Aconsejo.

No gracias, sabes muy bien que no compartoSe detuvo a decirle mientras salía de la cocinaAh y Drago no esperes que sea tan fácil que ella te preste su atenciónSonrió sardónico.

Drago frunció el ceño y arqueo la ceja izquierda con incertidumbre, ninguna mujer podía resistirse a sus sádicos encantos.

Mientras tanto Valery estaba en la habitación del chico que tanto se preocupaba por ella, más que apenada se acostó en la cama a mirar el techo y esa fue suficiente distracción como para recordar a su preocupada madre, ella realmente debía volver a la tierra pero cómo podía salir de allí si corría el riesgo de que Bestia terminara matándola de nuevo como en un bucle así que opto por esperar un poco más, a su izquierda ladeó la cabeza y miro a Twist y este estaba materializando ropa que parecía ser del agrado de Valery. Ella miro que el cubo colocaba la ropa sobre la cama y la inteligencia irradió más luz.

—Bestia localizada—Alarmado.

—¡Espera! —Alterada.

Algo la cubrió y le quito su visión, Twist bajo la guardia y advirtió una; "Falsa información".

Valery sentía un hormigueo en sus extremidades y un abrumador cansancio junto con un horrible ardor en el pecho y la espalda, estaba de nuevo asustada y cuando logro recuperar su visión observo a una criatura erguida en sus dos patas traseras sus ojos eran rojos brillantes, una cola de una longitud exagerada y su piel era negra, tenía un aspecto tenebroso a tal punto de ser demoniaco.

—Hola Valery—Con una voz gutural.

—¿Tú?... ¿Qué eres? —Increpó.

—No importa, debemos hablar...pues debemos discutir un convenio mutuo—Extendió sus garras hacia ella—¿Quieres volver a la tierra no es así? Primero debes confiar en mí.

—Si, pero tú eres un monstruo—Desconfiada—¡Intentaste matarme! ¿Cómo confió en ti luego de algo así?

—Te juro que no te matare, eres mi nuevo cuerpo ahora—Ladeó el rostro y dijo con voz anonada—¿Iras conmigo o no?

—¡No hasta que jures que nadie saldrá lastimado!— Grito.

—Hay muchas personas que desearías poder lastimar—Abrió su boca y los ligamentos de la misma comenzaron a despegarse como si estuviera rompiéndose su mandíbula— ¡No juro nada, tu eres mía! —Díscolo.

—¡No! No tendrás nada de mi—Amena.

—Siempre lo he tenido todo—La sujeto por los brazos con sus enormes garras y metió su lengua en su boca, atraganto a Valery con su áspera extremidad, pero está forcejeando logro morder la lengua de Bestia a tal punto de romperla dejándolo con un terrible dolor en la boca.

La lengua se regeneró tan rápido como la perdió y en un abrir y cerrar de ojos ya estaba envolviendo a Valery con su cola, ella se contorsionaba intentando zafarse de su opresor, pero cuando él mencionó algo que parecía importarle ella cedió ante la Bestia.

—Bien vayamos a casa...Monstruo—Gruñó.

Ella desnuda se paró en medio de la habitación y la única luz que había era una azul puesta sobre una mesa en frente de los muebles, ella tomo la ropa interior blanca y se la puso, luego sujeto los pantalones negros y la camiseta de mangas cortas color crema y termino de vestirse.

Salió de la habitación con el cabello n***o recogido y la ropa que Twist le materializó bien puesta, seria se dirigió hacia la cocina en donde Drago estaba comiendo espagueti.

La chica entro empujando las puestas con sus palmas, Drago arqueo las cejas tragándose un gran bocado de pasta enrollada en el tenedor, Valery se le acercó y lo tomo por el cuello, lamió su oreja y le susurro al oído en forma de amenaza.

—La próxima vez que te nos acerques te comeremos—Amedrento.

Drago asfixiado fue soltado por la chica quien salió de la cocina olisqueando el ambiente, el chico sonrojado palpaba su cuello asombrado antes de sentarse de nuevo a comer, pues era lo suyo.

Gneis estaba en el puente girando el planeta de un mapa holográfico, parecía estar muy concentrado pues Valery entro y él no la percibió.

—Gneis—Murmuro.

—Ah Valery ya estas vestida—Giro el asiento.

—Nos vamos—Susurro frívola.

—¿Espera, por qué hablas así?— Intrigado.

—Necesitamos alimento—Álgida.

—¡Valery! ¿Adónde vas? —Farfulló.

Por algún motivo al intentar ir tras ella no pudo moverse, paralizado percibió un miasma que salía del cuerpo de Valery, allí se dio cuenta que no era ella y que había fallado en su misión, le grito a Drago y le dijo a Twist que no le permitiera la salida a Valery de la nave, pero ella ya se encontraba en la zona de carga, se miraba las manos que se convirtieron en puños y fijándose que estaba descalza suspiro antes de desaparecer como polvo en el aire.

Gneis pudo moverse unos minutos después y salió corriendo a perseguir a la chica poseída por un demonio, en la zona de carga no había nada más que un terrible olor azufre y unas machas de quemaduras en el suelo, el chico frustrado grito sacando una espada de la nada sujeto el mango de la misma y rompió el transbordador a la mitad. En un instante Drago se asomó a la entrada con Twist detrás él.

—Te dije que estaba actuando raro hermano—Cauteloso.

—Hay que ir tras ella ahora, antes de que El Genesis venga a buscarla—Bajo la mirada encolerizado.

—Despertaré a NickLe dijo a Gneis—Te veremos allá— Entro y se dirigió a una bóveda dentro de su habitación.

—Iré a la tierra—Dijo acelerado mientras tomaba sus armas.

Mientras Gneis miraba como Twist reparaba el transbordador, el chico se sentía impotente y estaba a punto de entrar en pánico porque la Bestia sustraía el espíritu de sus víctimas y eso le imposibilitaba el movimiento, además habían llegado a tal punto que tendrían que liberar a su arma maestra sin pensarlo dos veces, si Gneis sentía temor lo manifestaba con mucha ira porque estaba a punto de declararle la guerra a Bestia.

La bóveda oculta tras la pared de agua que poseía en su cuarto, la puerta de hierro forjado con lava de Furus y hierro pulido de Metalfury, tenía cincuenta y tres seguros y un metal extra ligero y fuerte en la última de sus protecciones, los golpes en su interior se escuchaban más que el movimiento de los cerrojos al abrirse y al rebelarse su interior solo había oscuridad en el portal ovalado, Drago se paró firme enfrente de ese portal al escuchar los rasguños y el escalofriante movimiento en sus paredes y él no se inmuto al recibir ese ensordecedor rugido con saliva venenosa.

Drago se limpió el rostro y se dirigió a la feroz criatura que no salía de la bóveda.

—Hola Nick... —despertaste.