MÍA

Capítulo 6: «Inolvidable»

═══════ ≪ •Mía• ≫ ═══════

Creo que he cometido dos errores esta noche, la primera fue haberle revelado que me gustaba cuando estúpidamente creía que él lo sabía, ni era así y he quedado como una pendeja rechazada por el hombre de sus sueños.

Así que él no sabía de mis sentimientos y yo creyendo que no le importaba y su: «yo no lo sabría y de haberlo sabido no te haría daño aproposito» Me ha dejado muerta.

Ahora, el siguiente error que he cometido creo que ha sido el peor de mi vida y lo sé cuando

veo en su mirada que realmente va a hacerlo, no es porque me arrepienta de haberle pedido que me bese, me arrepentiré por conformarme.

Si realmente me llega a besar, sé que será el último, porque no haré esa estupidez de decir que quiero más —aunque quiera—, me conformaré solo con un beso. Es lo que he pedido y es lo que obtendré.

No voy a mendigar amor en una persona que solo me ve como alguien de la familia y lo ha repetido una y mil veces, no voy a ser tan estúpida de llorar o implorar por algo que sé que no tiene futuro alguno.

—¿Estás segura de que esto es lo que quieres?

—Muy segura, después de eso haré como si nada hubiera sucedido, lo juro.

Lo veo suspirar profundo y relamer sus labios, mis ojos caen sobre ellos y cierro los míos cuando veo que se está acercando poco a poco.

Siento el cálido aliento de sus labios chocar contra los míos, la respiración se me acelera y el pulso me dispara a mil latidos por segundo, va a suceder.

El primer roce de sus labios es tan solo una caricia, dejo de respirar cuando siento como mueve su cabeza un poco y acaricia mis labios un poco más antes de dejar una presión suave sobre mis labios, como si estuviera tanteando el terreno, una de sus manos me toma de la cintura y da un pequeño apretón que me hace suspirar, su otra mano toma mi cuello con la palma abierta, su pulgar descansa en mi mejilla y entonces subo mis manos colocándolas sobre su pecho sintiendo que en este baño no soy la única que tiene el pulso acelerado.

Entonces, tras una última exhalación, el verdadero beso comienza y yo pierdo toda la razón de ser. Me pierdo entre la suavidad de sus labios, lo frío de estos, en la manera en la que encajan a la perfección con los míos y la forma en la que ambos sabemos responder al próximo movimiento, me gusta la manera en la que su lengua da pequeñas caricias en mi labio inferior, suspiro cuando sus labios succionan mi labio superior y pocos segundos después pasa a morder con suavidad mi labio inferior. Su mano está sosteniéndome con fuerza contra su pecho y la mano que sostiene mi nuca deja pequeñas caricias en mi pómulo y evita que yo me separe de sus labios. No lo haría aunque quisiera.

Entrelazo mis brazos alrededor de sus hombros y me levanto un poco en las puntas de mis pies para estar más a la altura, abro mis labios cuando su lengua se pone exigente y entra a mi boca acariciando la mía.

Es el mejor beso de mi vida y necesito que dure muchísimo tiempo porque sé que una vez nos dejemos de besar, ya no habrá un segundo beso.

Me aferro a su cabello con fuerza, lo beso con suavidad aún cuando estoy desesperada demostrándole cuanto lo quiero y entonces eso es lo otro que tiene el beso, le estoy mostrando cuanto lo quiero.

Siento que me aferro con todas mis fuerzas a Logan y siento que él también lo hace conmigo cuando me levanta entre sus brazos y sin dejar de besarme, me sienta sobre la encimera del baño, se pone entre mis piernas y me sigue besando mucho más. No se sobrepasa conmigo, no pone sus manos donde no debería —o si debería—, mantiene sus manos en mi espalda acercándome a él y de vez en cuando deja unas caricias sobre mis muslos, pero eso es todo. Sus manos no piden más.

No tengo ni idea de cuántos minutos han pasado, no sé si llevamos horas o tal solo segundos compartiendo el mejor beso de la vida, solo que en algún punto, la respiración hace su presencia y nos recuerda que sin ella no podemos vivir, el beso baja la velocidad y poco a poco va acabando.

Cuando apoya su frente en la mía, puedo ver qué le cuesta respirar, jadea con fuerza y veo sus labios muy hinchados, seguramente estoy igual.

Lamo mis labios y siento que de verdad están muy hinchados, Logan no se mueve de donde está, pero yo sí me giro un poco para verme al espejo. No me reconozco, mi piel está casi del color de mi cabello, mis labios están al doble de su tamaño, mi cabello está alborotado y mis ojos brillan bastante.

Suelto un pequeño suspiro que me sale del alma y vuelvo a mirar a Logan, me parece graciosa la expresión que tiene en su rostro, su ceño esta fruncido mientras sus ojos están fijos en sus manos que descansan sobre mis piernas.

—Esto... ¿Me dejas salir? —pido en un pequeño susurro que parece haberle gritado, pues da un salto hacia atrás asintiendo.

—Claro, claro... Yo ehhh... Creo que mejor me iré a casa, le diré a tus padres que estás acá.

—Okay.

Él se queda pensando un poco más antes de mirarme.

—¿O volvemos a mi casa juntos? Tal vez se les haga raro que yo llegue sin ti.

—Solo diles que no estábamos seguros de que siguieran allí y mejor te pedí que me trajeras a casa —vuelve a asentir y veo sorprendida como acerca su rostro al mío, deja con rapidez un beso en mi mejilla y sale del baño como si tuviera un petardo en el trasero.

Cuando escucho la moto rugir y alejarse de mi calle, suelto un fuerte grito y subo las escaleras corriendo y así llego a mi habitación, me lanzó sobre mi cama y doy varias vueltas en esta. ¡Me ha besado!

... Porqué se lo he pedido ¡Pero me ha besado!

Y ha sido mágico, delicioso, increíble, fantástico ¡Ha sido mejor de lo que alguna vez imaginé! Logan sabe besar y ¡AHHHH!

Solo fue una vez, no te ilusiones Mía, no habrán más veces, tu misma dijiste que no mendigarias por más.

Ha sido increíble y lo recordaré para toda mi vida, será un beso que estará entre mi lista de mejores besos y en primer lugar, dudo mucho que algún otro beso lo reemplace. En mi corazón ya tiene un lugar muy especial.

Dejo de dar vueltas en la cama porque siento que me estoy mareando, pero me quedo mirando al techo y en mi cabeza se reproduce una y otra y otra vez el beso.

Tal vez pasaron horas, estoy segura de que duramos bastante tiempo en ese baño cuando tomo mi celular para llamar a mi mejor amiga, Clarissa, para contarle sobre lo sucedido, cuando me doy cuenta de que pasan de la una de la mañana y a esta hora ella ya está profundamente dormida. Aún así, decido dejarle un mensaje.

"Ha sucedido, ha sido magnífico, me ha besado, lo he besado, nos hemos besado, pero eso ha sido todo. No soñaré con un segundo beso, no sucederá, lo tendré como un recuerdo inolvidable, pero me niego a esperar por más. Ah y también le he confesado que lo he querido toda mi vida, pero él me ha dicho lo típico"

Envío el mensaje y me quedo observando un mismo punto viendo que algo no está donde debería, me levanto con rapidez de mi cama y me acerco a mi espejo de fotos.

—¿En dónde está...?

Miro al suelo buscando la foto que sé que tendría que estar ahí, pero no la veo por ningún lado y entonces recuerdo que Logan estuvo acá, ¿Acaso él la habrá tomado?

Frunzo el ceño mientras vuelvo a mi cama y tomo nuevamente el celular que había dejado allí y hago algo que nunca hago a voluntad, le envío un mensaje a Logan.

"¿Tomaste mi foto del espejo?"

Me sorprende la rapidez de su respuesta.

"¿Querrás decir nuestra foto? Ahora es mía ;)"

"Devuélvemela"

"Nop, ahora tu tienes algo mío y yo algo tuyo"

Leo su mensaje buscando que se supone que tengo de él, no le he quitado nada.

"No tengo nada tuyo"

";)"

¡Ahh! Maldito arrogante... Me encanta tanto.