Christopher les había preguntado a los guardias si habían visto salir a Soledad, pero ellos dijeron que no, claro, Juan David se había encargado de sacarla por la salida de emergencia, directo al estacionamiento. El doctor Duque intentó pedir las cámaras de seguridad, pero le informaron que para eso debía haber una denuncia previa, resopló, gruñó y salió a buscar a Soledad al apartamento, cuando entró ella tampoco estaba, pero sí sus cosas. —¿Se habrá ido al barrio? ¡No puedo creer que sea tan irresponsable! —Soltó un gruñido, tiró de los mechones de su cabello, estaba desesperado, no sabía por qué la ausencia de ella, le preocupaba, y angustiaba, y no era solo por el bebé, sino que le hacía falta su presencia. **** —¡Soledad! La voz de Ximena se escuchó en aquella habitación de l